Capítulo 12: Yoongi

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Pov: Min Yoongi

¿Quién soy? ¿Quién es Min Yoongi y cuál es su razón para seguir viviendo?

Esas son preguntas que me persigue desde que me volví consciente de mi existencia. Recuerdo mi niñez, no fue la mejor, ni estuvo llena de lujos innecesarios, pero mi familia y yo siempre vivimos de forma decente, trabajando todos los días para lograr sobrevivir.

Mi madre, la recuerdo con ternura, era una mujer de principios que trabajaba por mí, ella era mi única familia. Recuerdo que su cabello era sedoso e igual de negro que él mío, parecido al de un abismo sin fondo, pero conservando esa belleza. Su carácter dulce, pero estricto en muchos sentidos era lo que la caracterizaba. Nunca paraba, pocas veces pasaba un día entero con ella, seguro se la pasaba trabajando. Era mi heroína.

Su época favorita, por muy encima de todas las otras, era el invierno. Recuerdo como esperábamos ansiosos en la ventana, esperando a que nevara. Solíamos colocarnos bajo los copos de nieve a cantar nuestras canciones favoritas, moldear la nieve a nuestro gusto, haciendo juegos y formas divertidas. Recuerdo los días de lectura, en los que leíamos los libros favoritos de mi madre heredados directamente de mi abuela, la cual era una gran fan de la lectura.

Todos aquellos momentos están ahora almacenados en mi memoria. Son como una bella melodía que entra en tus oídos con una majestuosa delicadeza.

Tenía 15 años cuando partió, desde ese día mis ojos dejaron de ver la vida como un lugar lleno de espectros coloridos. La inocencia que reposaba sobre mis inocentes pensamientos ya no existía, la triste y gris realidad era lo único que mis ojos podían admirar. Él panorama para mí era desalentador, un niño sin familia, solo en una ciudad inmensa, era como una pequeña hormiga rodeada de gigantes elefantes que me asechaban desde las sombras.

Los vecinos intentaron llamar a las autoridades, pidiéndoles que me llevaran a un orfanato y cuidaran de mí, pero yo no quería que alguien se hiciera cargo de mí. Desde el momento en que me di cuenta de que estaba solo, me di cuenta de lo difícil que es poder salir del gran hoyo en el que estaba escondido, no conocía nadie, no sabía de nada, era un niño inútil. ¿Quién diría que me iba a tocar ganar dinero desde tan poca edad?

Perdí todos los recuerdos que tenia de ella el día que salí corriendo despavorido, intentando escapar de las garras de los malvados trabajadores sociales que querían llevarme, me rehusaba. Mi madre siempre me dijo que si algún día desaparecía de mi vida, yo tendría que salir adelante solo, y que si me iba a un orfanato mi vida iba a ser un infierno en la tierra, y yo como buen hijo le hice caso y escapé.

Ese día dormí bajo las estrellas, frente a una tienda de ropa abandonada. El verano estaba llegando, y el tibio sentir del viento estaba ya presente. Recuerdo como recosté mi cabeza en el frió pavimento, lo que fue placentero, ya que el aplaco un poco el agobiante calor. No había nadie, estaba a la merced de todos y de todo. Nadie me dijo que la vida en la calle iba a ser tan difícil.

El día siguiente me dedique a buscar comida, comencé a tomar el hábito de pararme todos los días en la acera de una de las avenidas más transitadas de la ciudad, con esperanza que algún buen ciudadano se apiadara de un pequeño y hambriento niño que era. Mis harapos y rostro sucio hacían de esta actividad algo más sencillo, los primeros días logre comer dos veces al día, sin embargo, las semanas siguientes la cantidad de monedas que recibía iban disminuyendo.

El hambre hacia la tarea de encontrar trabajo más difícil de lo que ya era, eran pocos los días en los que conseguía suficiente comida y tenía la energía suficiente para recorrer toda la avenida en busca de alguna oportunidad. Pasaba horas y horas recolectando monedas y cosas de la basura, a veces regresaba al mismo lugar de la acera a pedir limosna, aún conservaba la esperanza de que alguien me regalara una buena suma de dinero o un almuerzo soñado como un acto de caridad.

Burning Snow ✧; MYG+PJMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora