10. NI QUE HUBIERAS VISTO UN ALIEN

17 4 44
                                    

Flashback (un año y un mes antes)

En cuanto sonó la campana que marcaba el final de las clases salí corriendo en dirección a mi casa, no me detuve a esperar a mi hermano. Emily iba a venir esta tarde a casa y tenía que dejar todo preparado. En dos días tendríamos el final de física y aún no había empezado a estudiar, no necesitaba empezar antes, pero no había contado con este imprevisto que me quitaría una tarde entera.

Llegué casi sin aliento, así que me detuve en el salón unos momentos, luego subí a mi habitación, tiré la mochila encima de la cama y baje a coger algo de comida, que por suerte ya estaba preparada.

—Hola mamá—dije saludándola.

—Hola cariño—respondió alegremente— ¿qué tal ha ido el día?

—Muy bien, he sacado un 9 en matemáticas.

—Esa es mi chica—dijo mi padre apareciendo por la puerta de la cocina— ¿ves? No tenías de que preocuparte.

—Lo sé, lo sé, pero me estreso igualmente por las notas, son importantes.

—Eres muy inteligente Emma—me tranquilizó mamá dándome un abrazo—vas a conseguir todo lo que te propongas.

Quería demasiado a mis padres, era afortunada porque teníamos una buena relación y no había peleas entre nosotros.

— ¿Por cierto donde está tu hermano?—preguntó mi madre notando su ausencia, ya que normalmente volvíamos juntos del instituto.

—Esto, he vuelto sola, tenía prisa. Lo que me recuerda que venía a coger la comida e irme a la habitación a estudiar, tengo que aprovechar el tiempo.

Mis padres me miraron algo preocupados, eso lo hacía pocas veces y solo podía significar una cosa.

— ¿Va a venir esta tarde Emily otra vez?

Asentí.

—Emma—empezó mi padre—ya sabes que adoramos a Emily y es muy buena amiga, pero creo que a dos días de un examen importante sería mejor que dedicaras el tiempo al estudio. Y estoy seguro de que los padres de Emily opinan lo mismo, debería llamarlos...

— ¡No!—exclamé—no llames a sus padres—Emily me mataría por eso—ya saben que viene y están trabajando, han dicho que mejor no llamarles.

—Tranquilo Harry, no hay porque molestarlos—dijo mi madre, después me miró a mí—puede venir y estudiáis las dos en tu cuarto, diré a tu hermano y a sus amigos que no os molesten con su reunión.

— ¡Gracias mamá!

Le di un beso a cada uno, cogí mi plato de pasta y salí de la cocina, no sin antes echar un último vistazo y ver a mi padre mirándome con una expresión sospechosa. Sabía lo que pensaba, yo no mentía nunca y no había motivos para desconfiar de mí, sin embargo lo hacía por Emily y mi padre lo sospechaba. Por suerte mi madre parecía estar encantada con ella y no tenía problemas.

Me senté en mi escritorio, me recogí el pelo y me puse a estudiar, aunque sinceramente no me cundió mucho, comer y estudiar no eran tareas compatibles para mí. Y siendo sincera conmigo misma estaba bastante nerviosa con la visita de Jacob. A ver, sabía que no me venía a ver a mí, pero iba a estar en mi casa y en algún momento tendría que hablar con él.

El ruido del timbre y unos pasos hacia mi habitación me sacaron de mis pensamientos, la puerta se abrió de pronto y un torbellino me abordó, Emily.

— ¡Tía, menos mal que aún no han llegado!—exclamó nada más entrar—quedaría muy sospechoso que llegara yo cuando Jacob ya estuviera y esa excusa que le has puesto a tus padres de que vamos a estudiar ¡es genial! Así no pensará que estoy aquí por él, nuestro encuentro será súper casual.

No será la última vezWhere stories live. Discover now