22. Exámenes
30 De Mayo de 2014 (24 AÑOS) (3 meses y 18 días)
Los médicos me habían prometido que en cuanto pudiese hacer por mí misma las cosas más básicas me darían de alta y podría irme a casa con las personas que me amaban y me esperaban allí.
Logan llegó en el momento justo en que sentí la ligera molestia que me indicaba que debía ir al baño.
- Buenos días – dijo con una pequeña sonrisa - ¿cómo está todo por aquí?
- Bien, - lo miré - ¿me puedes hacer el favor de llamar a una enfermera?
- ¿Por qué? ¿Qué sucede? – preguntó alarmado
- Nada… - me sentí sonrojar y miré a mis manos en mi regazo – es que… - me decidí por no decirle que necesitaba ir al baño – la necesito
- ¿Para qué? – Preguntó aún con alarma en su tono de voz - ¿Te duele algo?
- No…
- ¿Hay algo que quieras saber? – preguntó
- Quiero ir al baño – Susurré avergonzada
- Ahh – me miró y sonrió – Si quieres yo te ayudo
Me sentí aún más avergonzada, y no sabía que decirle o que hacer, pero mi cuerpo respondió por mí, realmente necesitaba correr al baño o tendría que lavar de una manera poderosa esas sábanas
- Trae esa silla de ruedas – le indiqué – luego de eso puedo arreglármelas
- Tú no necesitas eso – me dijo frunciendo el seño
Se acercó a mí y me colocó sus brazos bajo mis piernas por un lado y por el otro justo en mi espalda, levantándome de la cama y llevándome a la puerta del baño.
- ¿Qué se supone que está haciendo? – le pregunté escandalizada
- Te llevo al baño, por tu cara sé que no puedes seguir aguantando por mucho más tiempo – le miré con los ojos abiertos – No te avergüences ahora, he visto mucho más que eso, soy el padre de tus hijos
No podía creer que Logan fuese el padre de mis hijos, nadie me había dicho nada de eso, había vivido en la incertidumbre de no saber con quién había tenido a mis hijos y me sorprendía de una manera increíble el que fuese Logan, aunque una voz dentro de mí me lo confirmaba.
- Solo… Déjame allí – le indiqué el lavamanos – puedo agarrarlo y arreglármelas de alguna manera
- Mel… Sabes que no puedes caminar, ¿Cómo crees que te voy a dejar arreglártelas como sea? No puedo hacer eso – respondió
- Bien – suspiré derrotada
Me colocó en el retrete y me miró por un par de segundos en los que sentí mi rostro calentarse y luego dio la vuelta y salió cerrándola la puerta casi por completo.
Hice lo que pude por levantar la bata de hospital y orinar de la manera más silenciosa posible mientras no despegaba mi vista de la puerta que podría ser abierta en cualquier segundo.
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The Secret Daddy Of My Baby (Libro#1)
RomanceMelody tendrá una bebé, ella sabe quién es el padre, pero nadie más en el mundo lo sabe, ese es su secreto, ella no tiene pareja y no, su hija no será de una simple aventura, su explicación es muy vaga y tiene a todos preguntándose por el padre de l...