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La luz pasaba por la suave tela de las sábanas, las cuales cubrían sus tibios cuerpos desnudos.

JiMin había despertado primero, y ahora estaba contemplando el rostro del alfa que se apoyaba en su pecho, mientras enredaba sus pequeños dedos en la cabellera azabache contemplando aquella tierna mejilla aplastada.

La habían pasado increíble, por primera vez, YoonGi fue tierno y gentil, suave y cuidadoso. Sus gemidos dejaron de ser exagerados tal como en una película porno, ahora eran pequeños quejidos y jadeos, así como palabras sucias susurradas al oído.

Los dos comenzaban a ser más cercanos y un sentimiento de nunca querer soltar al contrario se había instalado en su pecho.

Un pequeño ronquido por parte del pálido hizo sonreír al menor, sus mejillas se levantaron cerrando sus ojitos en dos finas líneas.

La cabeza del mayor comenzó a moverse, lo cual causó cosquillas en su cuello. Sintió como el alfa enterró su nariz en su piel dando una fuerte inhalada.

—Buenos días, precioso—dijo con voz adormilada. JiMin contestó de igual manera—¿cómo estás?

—Perfecto, ¿y tu?—el alfa sonrió por la tierna y acaramelada voz del menor.

—De maravilla—y dicho eso el alfa comenzó a descender el recorrido de su mano derecha acariciando la tibia y suave piel bajo su tacto, hasta que llegó a aquel bulto—¿no te hice daño?

—Claro que no—contestó entre risas volviendo a acariciar el pelo del contrario—te extrañe tanto. Lo que hiciste... Fue... único.

—Eso—le miró a los ojos y el menor no pudo evitar sentirse avergonzado, la carita que puso hizo sonreír a YoonGi—A eso se le llama hacer el amor.

Y dicho eso, el mayor planto un casto beso en los esponjosos labios.

Volvió a recostarse a su lado de costado mirando ahora hacia el vientre de JiMin que estaba cubierto por las sábanas, comenzó a pasar su mano por encima haciendo ronronear al omega.

—A crecido un poco. ¿No pesa?—preguntó con inocencia, JiMin negó lentamente—Pero después lo hará. Te tendré que llevar en brazos hasta donde tú quieras...

—Seguro y pesare el doble, YoonGi—dijo sonriente.

—Que tonterías dices—frunció el ceño y volvió a cerrar los ojos después sintió como unos dientes se encajaban en su mejilla como su fuera una manzana, YoonGi gritó por la impresión—¡Mocoso malcría-! ¿Qué... ¿a donde vas?

—A desayunar, duh—dijo con voz profunda y obvia haciendo reír al mayor, mientras se ponía su pijamada unos brazos le tomaron desde atrás abrazándole mientras dejaba profundos, castos y seguidos besos por todo su cuello y espalda.

Le recostó en la cama nuevamente entre risas, JiMin solo se había puesto su pantalón de pijama y era lo único que llevaba. Ante los ojos del alfa se miraba tierno pero sexy una dualidad única de Park Jimin.

—Aprovechando que es sábado, ¿no tienes algún antojo?—le pregunto sentándose sobre los muslos del menor más abajo de su entrepierna, el omega asintió bostezando—Dime y te lo cumplo.

—Quiero, arroz y verduras—el mayor hizo una mueca de asco y el menor se soltó a carcajadas—claro que no, quiero solamente, un ramen casero, de los qué haces tu.

—¿Osea que tendré que cocinar?—él omega levantó la cabeza y los hombros un "ujumm" salió de su garganta—uugggh

—Así es, haré la tarea, la cuarentena me está estresando de más—YoonGi beso sus labios nuevamente y le dejó salir de sus brazos.

Teacher's pet • YoonminOnde histórias criam vida. Descubra agora