Listen To Your Heart | Solangelo

Capitulo 3 "It's Time"

-¿Will?, ¿qué haces aquí? -los esqueletos de mariposas volvieron a volar. Maldición, pensó Nico removiendose incómodo.

-Vine a traerte esto, se me olvido decirte que la había pulido y limpiado anoche cuando estabas dormido -alzó su mano derecha en la que traía una espada de hierro estigio. Nico llevó inconsientemente su mano al cinturon donde siempre la tenía enfundada y estaba vacío.

-Gracias -murmuró apenado mientras agarraba la espada por la empuñadura y la enfundaba. ¿Cómo pudo olvidarse de algo tan importante?

A lo lejos sonó el cuerno que anunciaba la cena y Nico salio de su cabaña acompañando a Will hacia el comedor.

-Nos vemos luego, Chico Muerte -y se alejó guiñandole un ojo a Nico, antes de que éste pudiera replicar. Lo siguió con la mirada hasta que llegó a la mesa de Apolo y se sentó con sus hermanos y hermanas.

Nico se dirigió a la mesa de la cabaña 1 donde Jason y Percy se encontraban platicando y comiendo. Después de la guerra contra Gea, los tres jóvenes habían acordado comer en una sola mesa. No tenía sentido comer solos.

Por supuesto, primero pidieron permiso a Quirón para cambiar una de las reglas más importantes del campamento; comer en la mesa que le corresponde a cada uno por su padre/madre divino. Después de todo por lo que había pasado cada uno, al centauro le pareció ridículo seguir con esa norma. Claro, solo para ese caso.

Llegó a la mesa y se sentó al lado de Jason, frente a Percy. Rápidamente, las ninfas llenaron su plato con comida y él agarró su copa, ésta se llenó de Coca-Cola. Esperó un poco más y el refresco se tiño de azul. Antes hacía ese tipo de cosas porque le recordaban a Jackson, pero ahora solo las hacía porque realmente le habia gustado ese sabor.

-Percy me dijo que te ayudo a remodelar tu cabaña, debo admitir que la decoración que tenía era... deprimente -comentó Jason con un pequeño escalofrío.

Nico lo miró de reojo. Le daba gracia como esas pequeñas cosas lo asustaban. Después de todo lo que vivieron, a Jason le inquietaban todavía esas tonterías, pero Nico debía admitir que su cabaña daba un poco de miedo.

-Al parecer, el decorador anterior se tomó muy en serio lo de "cabaña del dios del inframundo". Pero si, cambiamos algunas cosas de ahí, creo que ahora tiene más luz -dijo con un poco de ironía.

Se escuchó un golpeteo de cascos en la mesa principal y todo el comedor quedó en silencio, gradualmente.

-Muy bien, chicos -se escuchó la voz de Quirón y los tres amigos voltearon-. Las noticias de hoy: los cultivos siguen marchitandose, pero encontraremos la causa. Por ahora tendremos que enviar pequeñas misiones para salir a comprar recursos al mundo mortal -un pequeño murmullo empezó a formarse a lo largo del comedor pero el centauro lo calló con otro golpeteo de cascos y se volvió a hacer el silencio, excepto por algunos murmullos de preocupación provinientes de la mesa de Deméter-. Cómo iba diciendo... las misiones serán de 2 o 3 campistas, ni más ni menos. También la siguiente noticia, aunque todos ya lo saben y deben de estar emocionados -el Sr. D bufó con burla, ya que pensaba que eran tonterias, aunque todos ya sabían su desagrado por ese tipo de actividades... o por todo el campamento en realidad-. El próximo captura la bandera será el viernes y las cabañas que lo lideraran serán la de Atenea y la de Hermes -gritos, apluasos y vitores de parte del todo el campamento, principalmente de la cabaña de Atenea y Hermes-. Recuerden que deben de notificar a la Casa Grande sobre quiénes son aliados de quién antes del viernes. Eso es todo por ahora. ¡Coman y disfruten, mestizos! Los tiempos mejorarán de ahora en adelante -y con una sonrisa sincera pero cansada, Quirón se retiró del comedor hacia los campos de fresas.