Capítulo I

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Juliette Tuan, la hermana menor de Mark Tuan, es parte de un conservatorio, toca el violín desde hace varios años, y un día le pidió a su hermano que le acompañara a una presentación muy importante, en la cual iba a tener por primera vez un solo, la niña lucía radiante, una sonrisa de oreja a oreja mientras jugaba con el borde de su falda en el auto de su hermano mayor.

— En verdad estoy muy orgulloso de tí, Julie. -Dijo dulcemente, mirándola de reojo por muy cortos segundos antes de devolver sus ojos hacia el camino, pudiendo avistar a un par de cuadras el lugar en donde sería la presentación.

— ¿En serio?, Es la primera vez que me acompañas a uno de éstas presentaciones... Y es la más importante,  ¡Yo estoy orgullosa de tí!

— ¿Por qué estarías orgullosa?, Si yo no he hecho nada.

— ¿Bromeas?

En realidad Mark fue por mucho tiempo de su vida un chico depresivo, decaído, se la pasaba encerrado en su cuarto pensando en tantas formas en que podría morir, ¿La razón? Ni siquiera su hermana lo sabía, ya se había acostumbrado a no contarle sus problemas a nadie, es más, si él se metía en problemas, él mismo salía de ellos.

Y era la primera vez que iba a una de las presentaciones de su hermana, la acompañarían sus padres pero como siempre tenían muy largos "Viajes de negocios". Sin embargo, al menos Mark, sabía que eran simples escapadas que se daban para poder tener sexo sin tenerlos a ellos dos ahí por dónde sea, y bueno, en parte podía entenderlo.

Su hermana y él eran cercanos y se la pasaban en la casa, así que era más que común que ellos dos estuviesen callados, los gemidos de sus padres resonarían en toda la casa así que él lo entendía, su hermana seguía con esa creencia, sin embargo él no podía culparla, apenas tenía doce años.

Ante la pregunta de su hermana él solo se encogió de hombros y soltó una risa leve, luego de ello llegaron al conservatorio, su hermana se bajó y seguidamente lo hizo él, comenzaron a caminar hasta el lugar desde el estacionamiento subterráneo que había en el lugar.

— ¡Youngie!~ -Dijo Juliette, saludando a un chico el cual estaba caminando junto a sus padres un poco más adelante, éstos le esperaron hasta que Mark y Juliette llegaron a ellos.

— Hola, Juliette, ¿Qué tal está todo? -Preguntó aquel chico, sonriendo ligeramente.

Esos dos intercambiaron algunas palabras, y Mark tuvo su mirada curiosa sobre el chico, disimulándola con una expresión neutral, sin embargo, ese chico tenía algo diferente. Se veía de una edad muy cerca a la suya, mayor que su hermana, era un poco más bajo que él, cabello negro y peinado, a diferencia de Mark que lo tenía algo esponjado.

Vestimenta impecable, un uniforme negro con blanco, típico del conservatorio y la situación, sin embargo, más allá de eso, había algo más allá lo cual, al darse cuenta, quedó embelesado unos segundos.

Los orbes de aquel chico eran grises, no negro claro, no, grises, su pupila destacaba por sobre los mismos, pero su iris era gris, se preguntó si sería ciego, pero no, se veía firme en donde estaba, descartada entonces la idea de que pudiese ser ciego.

¿Lentes de contacto? Muy improbable.

— ¡Mark! -Exclamó la niña dando un chasquido en frente del rostro de su hermano, sacándolo de sus pensamientos.

— ¿Qué pasa? -Preguntó apenas moviendo los ojos hacia ella cuando le habló.

— Que ya debemos entrar, ven. -Murmuró aquello último antes de tomar su mano, haciéndole caminar junto a ella hasta dentro del edificio.

Una vez estuvieron adentro él soltó un suspiro, sin poder borrarse la vista angelical que tuvo de aquel hermoso pianista de ojos grises, ahora se encontraba ayudando a su hermana a arreglarse tras bastidores, acomodando su cabello.

— ¿Qué tanto estabas viendo, Mark?

— Yo no estaba viendo nada, ¿De qué hablas?

— Te le quedaste viendo a mi amigo, no lo sé, ¿Tú qué piensas?

— Es que me llamaron la atención sus ojos, son grises, nunca había visto ojos así.

— Oh, sí... Él tiene los ojos así, según su madre le hacen tener una vista mejor que cualquiera... Y aparte es como si pudiese ver los sentimientos de las personas, como si viese su aura y problemas, tiene una vista bendecida.

— ¿No que los ciegos son los que tienen los ojos así?

— Yo no soy ciego...

Una voz algo delicada, pero diferente a la de su hermana había aparecido, él con algo de vergüenza se volteó un poco y pudo ver al chico del cual estaban hablando asomando una parte de su cuerpo desde una pared del lugar.

— Yo puedo ver todo... Menos los colores, solamente puedo ver en blanco, negro, gris... Esas cosas...

Él hablaba con timidez, Juliette se levantó de su asiento para ir por su violín y Mark, nuevamente, se quedó embelesado de tan solo poder volver a ver los ojos de ese chico.

— ¿Está todo bien?

Había preguntado el chico estando de frente a Mark, moviendo un poco su mano en frente del rostro del mencionado.

— Ah, sí, lo estoy, es sólo que tus ojos son lindos.

¿De donde mierda había sacado eso? Joder, Mark, ¿Acaso ya te está gustando alguien que obviamente se ve que no es homosexual y que aparte no sabes su nombre? Eran las palabras que se repetían una y otra vez en su mente, pero para nada, Mark no estaba enamorado, ugh.

La razón por la que Mark se había aislado tanto tiempo fue precisamente por enamoramiento, su corazón ya no podía ser penetrado por nada ni nadie, hasta llegaba a considerarse a si mismo asexual, al fin y al cabo a nadie le importaría su orientación sexual.

— Oh, muchas gracias, no me lo dicen mucho, pero gracias por fijarte en eso. Bueno, ya vamos a salir así que ¡Disfruta la música!

Dijo por último antes de retirarse junto a su hermana, Mark salió de ese vestidor y se fue a sentar en el auditorio, en la fila en donde estaban los espacios reservados por quienes asistirían, yendo a una en donde se veía su nombre. Se sentó en tranquilidad y esperó a que empezara la música de la que aquel chico le hablaba.

--₡--

bUeEe, aquí está un fanfic el cual estuve planeando, y hoy que escribo ésto es 22 de abril, así que ajá, no sé cuándo lo publique, pero justamente cuando tenga más capítulos listos, lo subiré, ya eso, gracias por leer. 💚💚

El Pianista de Ojos Grises || MARKJAENơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ