Beautiful (Yaoi/BL)

Cap. 13

Al final lo llamé.

No podía más... Necesitaba que alguien me sacara de aquí.

–Lo siento... lo siento... –Sollozaba al teléfono sin dejar a Caleb ni que hablara o preguntara que pasaba– no puedo más... no puedo con más chantajes ni más dolor no puedo.... Caleb por favor sácame de aquí... por favor... te diré todo pero sácame de aquí...

–"Tranquilízate, ya estoy saliendo de casa, solo mándame la ubicación y no te nuevas ni un milímetro de donde estás" –Aceptó sin quejarse colgando el teléfono.

Apoyé la espalda contra la puerta del cubículo temblando e hice lo que me pidió apretando el teléfono contra mi pecho con todas mis fuerzas.

Había tenido que ceder frente a todos esos estúpidos y decir que era algo que no era... algo que había luchado ya años para que dejaran de decirme que lo era.

Que era tan difícil de entender? Que era tan jodidamente difícil que Efrén presionaba y presionaba siempre haciéndome sufrir por escuchar que no lo entendía.

No podía más... no sabía que más hacer...

Ni siquiera pensé en llamar a mi hermano o mis padres por la absoluta vergüenza que me seguía dando tener que contarles como había terminado metido en esta mierda...

–Jade? –Dudó la voz de Caleb entrando en el baño como le había dicho en el mensaje.

–Estoy aquí –Respondí sin poder dejar de temblar y llorar.

Me aparté de la puerta y dejé que él la abriera sin poder evitar mirarme de arriba a abajo y abrir la boca casi tan horrorizado como yo.

Estaba con la parte de abajo de un chándal y con una camiseta básica que solía verle cuando iba a su casa...

Seguro le había molestado bastante... y aún así había venido hasta aquí.

–Lo se, estoy asqueroso –Sollocé tapándome la cara con las manos.

–Pero que te ha pasado? –Preguntó notándose hasta en la voz que esto no se lo esperaba.

–Efrén! Eso es lo que me ha pasado! –Salté quitándome las manos de la cara como si lo que decía tuviera sentido para él–. Después de cortar y bloquearlo y todo apareció en la entrada de mi instituto! Me ha estado chantajeando con publicar fotos mías... no se que hacer Caleb... ya no puedo más... me hace vestirme como quiere y decir lo que quiere oír... y... y me tiene controlado... me ha hasta hecho daño... no se que hacer... si se lo digo a mis padres se cabrearán y todo el mundo verá las fotos si lo denunció... o la policía podría enseñarlas... no puedo más...

–Vale, respira, primero que nada cálmate –Intentó controlar la situación abrazándome.

–Lo siento –Sollocé en sus brazos aferrándome a él lo más fuerte que podía.

–Está bien, no te preocupes, te voy a sacar de esta... no te preocupes –Insistió frotando mi espalda con cuidado haciendo que me quejara por el dolor.

Me dolía bastante la parte izquierda de mi espalda desde ayer.

Caleb me dio todo el tiempo que necesité en sus brazos y me hizo separarnos en cuanto estaba mejor.

–Vas a mantener la calma, eso es lo primero –Pidió limpiándome la cara con sus mangas–. Tienes todas tus cosas encima? Teléfono, llaves, dinero?

Asentí con la cabeza como respuesta y suspiró sonriendo por un segundo.

–Vale, vamos a salir del baño y vamos a ir hasta la mesa y me vas a dejar hablar a mi, si? Tu no tienes que decir nada si no quieres –Explicó haciendo que asintiera con la cabeza de nuevo.

Y sin esperar más tiempo hice lo que pidió y lo llevé hasta la mesa donde todos sus amigos nos miraron sin entender de donde había salido Caleb.

–Soy un amigo de Jade, quien es Efrén? –Se presentó poniéndose frente a mi apoyando los brazos en la mesa.

Todos sus amigos lo incriminaron con rapidez no gustándoles nada el tono autoritario y serio de Caleb.

Jamás me había enseñado un lado suyo tan cabreado.

–Bien, despídete de tus amigos, te vienés con nosotros –Ordenó directo haciendo que Efrén agarrada su teléfono.

Creí que iba a gritar al verlo, pero Caleb fue más rápido agarrando su brazo impidiendo que pudiera hacer nada.

–Mira, no me cabrees más de lo que ya estoy –Medio amenazó notándose que estaba haciendo más fuerza de la necesaria para agarrar su brazo haciéndole daño a Efrén–. Me ha dicho un pajarito que eres un cabrón morboso con fetiches bastante raros y que tienes fotos de mi amigo con las que lo estás chantajeando, y yo no soy mi amigo, yo si tengo que partirte los dedos para arrancarte el teléfono lo voy a hacer. No me jodas ni metas a tus amigos más en esta mierda y levántate.

–Efrén? Eso es verdad? –Saltó el chico que me había regalado la paleta de ojos sin poder creerse que lo que decía Caleb de verdad fuera para Efrén.

–Vuelvo ahora –Aceptó Efrén levantándose perdiendo su moreno natural y poniéndose cada vez más pálido al ver la diferencia de altura con Caleb.

Por no hablar de la diferencia de musculatura.

Sin quejarse y guardando su teléfono en el bolsillo, para no poder usarlo, pagó su parte igual que yo pagué la mía y nos fuimos los tres.

En cuanto pusimos un pie fuera del local Caleb pasó sus brazos por encima de los hombros de Efrén sonriendo notablemente cabreado.

–Espero que dejaras tu casa limpia –Insinuó dándole una calada a su vaper echando todo el humo en su cara antes de volver a guardarlo–. Vamos Jade, llevame a su casa.

Y alargó su mano libre para que la agarrara.

Caleb al final lo iba a solucionar...

Estas casi 3 semanas al fin se iban a acabar...

Sin dudar acepté su mano sin poder evitar temblar y comencé a caminar para llevarlo a casa de Efrén.