Ghost In Her Heart || Sakura Haruno

Capítulo 10: Mostrar amor y miedo a cambio

Kakashi llega a donde ha estado descansando pronto, justo como Sakura sabía que lo haría.  Él está en los árboles, tratando de evaluar la situación que Sakura ha creado.  Ahora está de nuevo en control, o tanto como lo estará alguna vez, y no duda cuando habla.

"Hola."  Detrás de ella está el susurro de las hojas cuando el líder del Equipo Siete cae al suelo.  La grava cruje bajo sus pies, deliberadamente fuerte para no ponerla nerviosa.  Es una táctica inútil, ella ya sabía que él estaba allí antes de que él se revelara, pero ella lo aprecia.

Él se acerca y se sienta a su lado, aunque decide evitar que sus pies se mojen y los apoya sobre el agua en lugar de sumergirlos.  Ninguno de los dos habla, y Kakashi se mete la mano en su chaleco antibalas para sacar un libro naranja vibrante.

Trae sentimientos vagos, la mayoría de los cuales son irritación en una u otra variante.

(Le entrega los papeles al hombre. No hay mucha información en los informes, pero sabe que él es un maestro de espías y puede usar los escasos detalles al máximo. Cómo se las ha arreglado para tener tanto éxito en su trabajo es un misterio, considerando su apariencia y reputación más que conspicua).

Hace una pausa por un segundo, debatiendo si incluso preguntar.  "¿Quién escribió ese libro?"

"Jiraiya. De los sannin".  Hace clic tan pronto como lo dice.  Sakura tiene otro nombre para poner en las caras que ve en su cabeza, y eso la hace sentir menos incómoda que antes.

"Tiene algo de reputación, tanto dentro como fuera de la batalla, ¿no?"  Kakashi hace un ruido afirmativo, pero no da más detalles.  Ella puede sentir la tensión entre ellos, y sabe que él también puede sentirlo.

Este es un hombre que es lo suficientemente inteligente como para poner los puntos juntos, aunque tal vez no en el orden correcto.  Una imagen borrosa puede ser mejor y peor para su situación, dependiendo de las conclusiones que saque.

Él la mira y ella puede sentir que su ojo evalúa su pequeño cuerpo, buscando cualquier factor de identificación.  La pausa en su hombro es interesante, y ella sabe lo que él está buscando.  Tenía el remolino entintado en su piel, aunque solo en sus sueños.  Eso no significa que ella todavía no pueda sentir el peso que la marca deja en todos los que la llevan.

Su suposición, si es lo que ella cree que es, sería conveniente.  No hay rangos una vez que uno se pone las máscaras blancas, y no sería inconcebible tener a alguien tan joven entre ellos.  Era más joven antes, después de todo.

También podría ser contraproducente y arriesgar su vida.  La cuestión es que ella dejó de preocuparse por eso hace mucho tiempo.  Con suerte, ella podrá regar las plántulas que ya están plantadas en su cabeza.  Ella juega con la manga de su camisa, asegurándose de que su hombro esté fuera de la vista.

"¿Cuándo nos vemos mañana, Taichou?"

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Ella va al puente y se acomoda con las piernas cruzadas.  Pasan unos diez minutos antes de que se suponga que se encontrarán, y unas pocas horas antes de que llegue Kakashi.  Se despliega un pergamino y las puntas de sus dedos brillan cuando rozan los trazos de tinta.  Tres contenedores, todavía tan frescos como cuando estaban empacados, aparecen en una nube de humo.  Pone un recipiente a cada lado y abre el tercero que coloca en su regazo.

Sakura siente su chakra antes de que pueda verlo o escucharlo.  No es difícil de detectar, ya que él no lo oculta.  Es especialmente fácil para ella reconocerlo, incluso si no es tan cálido como en sus sueños.  Ella toma la caja junto a ella y se la ofrece cuando él pasa.  Él lo toma, vacilante con una mirada sospechosa que nunca lo abandona, pero nunca se desvía hacia su cara.