EL DRAGON SLAYER: NATSU DRAGNEEL

BONUS 6: OPERACIÓN DULCE

BONUS 6: OPERACIÓN DULCE

Referencias:

-hello-dialogo

-"hello"-pensamientos

-hola-recuerdos

/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/

–Bien, es hora de que inicie la operación… Dulce –

En una grab habitación donde se encontraba 5 camas, al igual de haber 5 niños sentados alrededor de un mapa que tenia muchos dibujitos.

–Igneel, no creo que sea muy buena idea –

El nombrado Igneel, era un niño de 8 años con el cabello escarlata alborotado, el miro aun lado y se topo con una tierna niña de 10 años de cabello azul hasta los hombros, ella tenia una mirada nerviosa.

–Estoy de acuerdo con Grandinee, si nos logran atrapar, nuestro castigo será peor y papa aun no regresa para salvarnos –

El dueño de esa voz era la de una niña de 9 años, tiene el cabello purpura hasta el cuello, al igual de portar unos ojos rojizos.

–Oh, vamos Ul, no seas aguafiestas, ¿acaso no quieren dulces? –dijo Igneel con una mirada irritada.– ¿tu opinas Simon?

Igneel miraba a un niño de la misma edad que Ul, tiene pelo morado con mechones rosados, el solo tenia una mirada serena y entonces dijo.

–La verdad no lo se, pero… con tan solo pensar en un delicioso chocolate relleno de nuez –dijo el cambiando su expresión a uno babeante.

–¿Vez? El esta de mi lado –dijo Igneel sonriendo victoriosamente.– ¿y tu Mavis?

La nombrada Mavis, ella era un niña de 7 años, tiene el cabello oscuro hasta la espalda. Ella miraba un libro que traba sobre la magia Etherias.

–Bien –asintió Mavis sin despegar su mirada del libro.

–Bueno, ¿entonces que esperamos? Vamos –dijo Igneel sonriendo.

…

CREAK.

Una puerta se abrió y dejo ver a Simon mirando por todo el cuarto y ver a 5 siluetas femeninas durmiendo en una gigantesca cama.

–Todo despejados –murmuro Simon alzando el pulgar.

–Perfecto, entonces sigamos –asintió Igneel junto a las otras 3 niñas.

Los 5 niños caminaron de manera silenciosa hasta llegar a la cocina, donde se notaba que lo único que iluminaba era la luz de la luna.

–¡Haya! –señalo Ul.

Los otros 4 miraron el lugar que señalo la pelipurpura, para encontrarse que había un gran refrigerador y hasta arriba había una caja transparente que mostraba una infinidad de dulces.

–¿Cómo los alcanzamos? No podemos usar magia en casa –cuestiono Mavis sin despegar su mirada de su amado libro.

–Hagamos una pirámide humana y tu Mavis, vigila –dijo Igneel a los demás.

Mavis estaba en la entrada de la cocina leyendo su libro, mientras que atrás de ella se mostraba una pirámide humana, donde primero estaba Grandinee, luego Ul, luego Simon y parado de ellos estaba Igneel de puntitas y estirando sus manos para alcanzar esa caja.

–Ya no aguanto más… –dijo Grandinee con una mirada cansada.

–Aguanta –murmuro Ul.

–¿Ya lo tienes Igneel? –pregunto Simon con fastidio.