〖 Me vuelves loco 〗 (Dabi x Lectora)

Capítulo 34: Rara amistad.

Preparaba café mientras vigilaba que mis tostadas no se pasaran. Había despertado algo temprano por alguna razón y al no poder volver a dormir, decidí bajar con un largo abrigo de lana. Apenas veía la poca luz del sol por las cortinas de mi ventana, no solía levantarme a éstas horas. Agarré mi taza ya lista y algunas tostadas para caminar hasta la mesa, tomé el control y prendí el televisor.

— Dónde estará ese idiota.. -bebí mi café.-

No percaté la hora en que ya había más luz, miré la hora del programa que mostraba ya las 8; me levanté para lavar la taza ya vacía.

*toc toc*

¿La puerta? ¿Quién puede ser a ésta hora? Digo, es demasiado temprano y los que conozco son malditos perezosos.

*toc toc toc toc*

— Ya va.. -respondí.-

*TOC TOC TOC TOC TOC TOC*

Los golpes cada vez son más fuertes, y me hace dudar de si abrir o no. Caminé hasta la puerta hasta quedar cerca, giré la perilla y abrí rápidamente.

Kacchan: ¡POR FIN TARADA! 💢

— ¡CASI ROMPES MI PUERTA, IDIOTA!

Kacchan: Si no tardaras tanto. -quejó.-

— ¿Qué quieres?

Kacchan: Vine aquí porque el idiota pelo de mierda necesita tu ayuda.

— Ahh.. ¿Y dónde está?

Kacchan: Al imbécil le da pena venir. Ya, mueve tu trasero o te dejo aquí.

— Espera que me cambio, ¿no ves que estoy apenas con ésta cosa? Pasa si quieres.

Kacchan: Ya era hora.. -pasó entrecerrando la puerta.-

Subí hasta arriba para ponerme mi traje rápidamente. Antes de bajar, revisé mi celular para ver si tenía algo, notificaciones sin importancia, ni un mensaje de él.

Kacchan: ¡Apurate maldita extra!

— Ya vine, ya. Vamos. -salimos y comencé a seguirlo.-

Kacchan: Me da tanto asco.. -murmuró.-

— Hey.. Y.. ¿Para qué necesita ayuda?

Kacchan: Tsk, para algo de esas cosas cursis, no sé y no me importa.

— Ahh, ¿Y porqué no lo haces tú?

Kacchan: ¿De qué mierda me viste cara? Maldita pérdida de tiempo..

— De galán, rraur.

Kacchan: ¡¡CIERRA LA PUTA BOCA!! -Quejó avergonzado.-

— Hahahaha ~ 💧

Nos tomó unos minutos llegar a nuestro destino, a la distancia noté una cabellera de puntas rojizas, estaba sentado en una mesa del agradable parque adornado de árboles y personas.

Kirishima: ¡Hey, chicos!

Kacchan: Ya hice lo mío, me voy. -retrocedió.-

— ¡Adiós guapo! ~ -despedí burlona ganándome unos pequeños insultos.-

Kirishima: Eheh.. Lamento no haber ido yo personalmente..

— No te preocupes, está bien. -me senté.- ¿Qué pasa Kiri?

Kirishima: Verás, mañana quisiera sorprender a alguien y la verdad no estoy seguro de algunas cosas..

— Ahh.. Adivino, ¿yo conozco a esa persona?