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— Sir William— el nombrado salió de sus pensamientos y paró en seco su caminar por el pasillo de piedra, para girarse hacia el muchacho que lo llamaba.

—Lord Robb— saludó el mayor inclinando la cabeza hacia él — ¿En qué puedo ayudarlo?— preguntó curioso el pelirrojo recordando la pelea que el heredero había tenido con Morrigan, y como ambos no se habían hablado en ese tiempo.

—¿Es usted muy amigo de la capitán cierto?— contestó Robb con otra pregunta a la vez que se colocaba frente al caballero.

—Así es.

—Se os ve muy unidos...¿Puedo preguntar cómo os conocisteis?— dijo el heredero de Invernalia mientras comenzaba a caminar por el pasillo, aunque se detuvo cuando se dio cuenta que el caballero no lo seguía y lo analizaba desde su lugar.

—Con el debido respeto Lord Robb no...

—No contestéis Sir William— el semblante de Robb cambió a uno de enfado con él mismo —No debería preguntaros por vuestras relaciones personales, disculpad mi atrevimiento— El Zorro se sorprendió de verse interrumpido por el joven, el pelirrojo pudo apreciar como el muchacho se reprendía mentalmente por la pregunta que le había formulado segundos antes de manera tan segura.

—Lord Robb, ¿Me permitís hacer una observación? — preguntó William recargando todo su peso en una pierna y apoyándose en la espada que colgaba de su cinturón.

—Adelante.

—He podido apreciar que tenéis muy en estima a la capitán ¿Me equivoco?— Preguntó el caballero. Robb se lo pensó antes de responder.

—No— William colocó ahora una pequeña sonrisa con sorna en su rostro 

— Con el debido respeto mi Señor, si lo que os atormenta es saber si Lady Morrigan y yo somos amant...

— No me interesan los intereses amorosos de la capitán Sir William— le interrumpió Robb desviando la mirada de los ojos azules de el Zorro durante unos segundos. El caballero sonrió al tiempo en el que se erguía.

—No solo me llaman el Zorro por el color de mi pelo ¿sabe?— añadió el mayor manteniendo la mirada a Robb. Cuando el joven se disponía a contestar el nombre del pelirrojo resonó a través del corredor de piedra. 

—William— Esa voz provocó que ambos se giraran hacia el final del pasillo, donde Morrigan miraba intrigada y con la ceja arqueada hacia ellos. La chica se dirigía a sus maniobras pero no encontraba a su segundo por ninguna parte, cual fue su sorpresa al encontrarlo dialogando a solas con el heredero de Invernalia en uno de los pasadizos de la fortaleza.

—Temo que debo irme Lord Robb— dijo William volviendo a mirar al chico— Ambos sabemos que se enfadará si no lo hago— El de los rizos cobrizos asintió hacia el mayor, y lo vio alejarse por el pasillo hasta colocarse al lado de su capitán y marcharse.

Cuando desaparecieron de su vista, el heredero se encontró yendo hacia la sala de audiencias de su padre, y al llegar, no pudo evitar recordar cuando trajeron a Morrigan atada de manos para ser juzgada por el guardián del Norte. Recordó el odio que su madre profesaba hacia la muchacha, y también cuando la golpeó. Robb suspiró.

—¿Qué hace a mi hijo mayor resoplar como los caballos?— Lord Eddard apareció tras él con una sonrisa afable — ¿Te preocupa algo?— Ned se acercó y le puso las manos en los hombros a su primogénito para que este lo mirara. Robb lo miró pero se quedó callado. Lord Stark comenzó a andar y Robb lo siguió.

—Padre...—Robb se disponía a cambiar de tema cuando la voz grave de Eddard lo interrumpió.

—¿Es por una mujer verdad?— el semblante de Robb cambió a uno ligeramente sorprendido —Conozco esa mirada — rió el mayor— Te olvidas que yo también he sido joven... Tu tío Brandon solía molestarme con estas cosas— su mirada se oscureció un poco al nombrar a su hermano. Siguieron andando y salieron al exterior.

—No sé que me pasa padre— replicó Robb con voz pesada — Me avergüenza comportarme de esta manera.

— Me recuerdas a mí— Ned suspiró — Estás tan preocupado por hacer lo correcto que te olvidas de divertirte.

—¿Es lo que hacemos no?— preguntó Robb mirando a su padre — Sacrificamos nuestros deseos por hacer lo mejor para el Norte.

—En parte— respondió Lord Stark

—Me encantaría ser como vos padre, siempre sabéis como actuar— su padre lo miró de reojo — Nunca os equivocáis,  todo el mundo os aprecia como líder, y el pueblo confía en vos— terminó de expresar Robb con admiración.

—Robb, es importante para mí que sepas algo— Ned se detuvo para mirar a su hijo— Nada de lo que has dicho es cierto Robb— hizo una pausa— siempre cuestiono mi manera de actuar, me he equivocado muchas veces en mí vida, hay gente que preferiría a otros norteños como líder,  y el pueblo siempre critica mis decisiones— enumeró el mayor. Robb se fijó en los ojos de su padre que rebosaban sinceridad —El poder, es complicado. 

Robb dejó de mirar a su padre al oír el relinchar de un caballo justo para ver a Morrigan guiando al suyo fuera del establo. Sir William y el dothraki ,se encontraban hablando con los dornienses que ya formaban para partir de maniobras a las órdenes de Morrigan. Su mirada se encontró con la de ella, y cuando su padre se dio cuenta de como ambos jóvenes se miraban sonrió.

—Lady Morrigan— saludó su padre a la chica.

—Lord Stark— respondió ella en respuesta.

—¿Donde os dirigís?— preguntó Lord Eddard con una mirada tranquila puesta en la chica, que acariciaba el hocico de su corcel de arena.

—Me llevo a los dornienses de maniobras antes de que partan hacia Dorne mañana.

—Justamente, Robb y yo hablábamos de que está falto de un buen entrenamiento— Robb miró a su padre pensando "No hemos hablado nada de eso en toda nuestra conversación". El heredero sabía lo que pretendía su padre. — ¿Os importaría que mi hijo os acompañara?

Morrigan se lo pensó, y pasó su vista del guardián del Norte a su heredero.

—Claro que no Lord Stark— respondió la chica — Se lo traeré cansado a casa— sonrió divertida.

Tras esto Morrigan se subió a su caballo y se dirigió a la avanzadilla para empezar el trayecto.

—Padre...— Robb intento quejarse pero su padre lo interrumpió.

—Ve— dijo Ned con voz tranquila — Y es una orden — el mayor sabía que el sentido del deber de su hijo no le permitiría negarse si se lo ordenaba. Cuando el heredero estaba a punto de desaparecer por la puerta del establo para buscar su caballo su padre volvió a hablar — Y Robb... lo que sea que te pase con Lady Morrigan, arréglalo, soy plenamente consciente que ella es la causante de nuestra conversación anterior— pronunció el mayor.

—¿Es una orden?

—Sí lo es.







Siento que sea cortito, pero bueno el próximo más y mejor. Chauu <3

La Bruja (Game Of Thrones)Where stories live. Discover now