Destinos enlazados

Capitulo 14:Epilogo

Saltando de rama en rama en el bosque que está en las afueras de Konoha se ve a Shikamaru, siendo seguido por su equipo.

Eiji y Azuma se han convertido en unos jóvenes de quince años muy apuestos, sus facciones se marcaron, quedando muy poco de las facciones infantiles que poseían, su cuerpo creció y se torneo, con músculos pero no al grado de verse exagerados. En cuanto Reiko también se le han marcado y afinado más sus facciones, se ha convertido en una adolecente muy hermosa, no solo creció en estatura sino que también le crecieron partes de su cuerpo como sus senos y caderas, y su cintura se marcó más. Y Shikamaru no ha cambiado en nada, sigue igual que hace tres años.

Eiji viste un bermuda negro, holgado con varios bolsillos adornándolo. Una playera ceñida de color blanca sin mangas y cuello alto, encima un chaleco negro que lleva desabrochado. Su banda ninja la tiene amarrada en el brazo izquierdo y su estuche de armas está amarrado en su cintura.

Azuma viste un pantalón algo bombacho de color verde seco, tiene un par de bolsillos en los costados de las piernas. Su playera es ceñida, de mangas cortas y color negra. Su banda ninja la lleva amarrada en la frente y su estuche de armas en la pierna derecha.

Reiko viste un short de mezclilla, color celeste, le llega a mita muslo, y le cuelgan algunas hebras, como si hubiera sido arrancado. Usa una blusa de malla color negra, encima un top negro que le cubre los senos, y un polo color blanco que le queda un poco holgado, es de zíper el cual solo tiene cerrado hasta la parte baja de los senos y en la espalda le cuelga un gorro. Su banda ninja la tiene amarrada en forma de diadema, y su largo cabello cae en cascada en su espalda, llegándole a la iniciación de sus glúteos.

- Estas muy ansiosa por llegar. –comenta Azuma algo divertido, mirando a Reiko de reojo. –fueron muchos días fuera de la aldea… seguro lo extrañas mucho. –Azuma ríe entre dientes al verla sonrojarse.

- No molestes. –Reiko voltea su rostro al otro lado en un intento de ocultar su sonrojo.

- Sigo sin entender lo que Rei-chan le ve a ese baboso niño bonito. –Eiji roda los ojos mostrando fastidio.

Recargado en el tronco de un árbol que está cerca de la entrada de la aldea se encuentra Itachi. Se ha convertido en un joven muy apuesto de diecisiete años. Sus facciones se marcaron más, haciéndolo ver mucho más guapo, ya no queda nada infantil en él, incluso está más alto, y sus músculos se marcaron más, sin llegar a verse exagerados. Su cabello está un poco más largo, llegándole debajo de la nuca y cortado en pequeñas capas, dejando caer unos cortos mechones en su rostro.

El pelinegro usa su banda ninja en la frente. Viste un pantalón algo bombacho de color blanco, sus sandalias ninjas son negras al igual que la playera que usa, que no tiene mangas y su cuello es un poco alto. Tiene las muñecas vendadas hasta las manos, dejando al descubierto desde los nudillos para arriba.

- Espero Naruto no me haya mentido y en verdad llegue hoy. –Itachi mira el cielo, resoplando, haciendo que los mechones que le caen en la frente se ondeen.

Entonces voltea hacia donde está la entrada viéndola, no pudo evitar sonreírle como solo a ella le sonríe, la extraño tanto, más de un mes sin verla y ahí está. Cuando la mirada de ella se topó con la de él le sonrío emocionada, lo que se le hizo encantador.

- Tan guapa. –Itachi ríe entre dientes.

- ¡Nos vemos Shikamaru! –grita corriendo hacia Itachi.