Indiferencia *Iguro (1)*

3.2K 198 109
                                    

Ser la hermana menor del pilar serpiente es un dolor de culo. Todos los días entreno sin descanso, nada le complace o todo le fastidia a menos que se trate de Mitsuri-san.

A veces me preguntó cómo tan bella persona pudo fijarse en él pero... Lo mismo me he hecho yo esa pregunta al enamorarme de mi hermano. He tratado de olvidar ese sentimiento pero no puedo, su cabello, su rostro, esos atractivos ojos eterocromicos que me encantan.

Suspire.

Estoy descansado en la finca mariposa ya que debido a mis múltiples lesiones por el entrenamiento que llevo a cada rato. Shinobu-san lo regaño pero su sola indiferencia hace que me duela el corazón mas que mis lesiones, camino directo al cuarto que me asignaron para descansar pero me topo con el hermano menor de Sanemi.

—Lo lamento Genya-kun, no te vi —-hable sonrojada ya que una de sus manos está en mi cintura, evito que me cayera.

—Ten más cuidado, fíjate por dónde caminas —dijo enojado pero un pequeño sonrojo invade su rostro.

—Que lindo —susurre a lo que se alejo de mi rápidamente.

—Tsk.... ¿No tienes a mas nadie a quien molestar?

—No te estoy molestando. —Me reí ante su nerviosismo—. Solo me parece lindo tu sonrojo.

Dije esto último para ir a dormir, últimamente lo he visto por aquí para chequeo es como si realmente estuviera enfermo pero no es así.

Llegué a mi habitación recostándome en la cama viendo el techo, mi espalda duele y tengo una pequeña fisura en uno de mis brazos que a veces hace que se me calambre.

Respire profundamente para dormir pero un almohadazo en mi cara me levanta sobresaltada

—¡¿Pero que de... —Unos labios hambrientos y furiosos detienen mis palabras, al acabarse el aire abro mis ojos encontrándome con un Iguro totalmente molesto y sonrojado— ¿Nii-san? —Salio de mi habitación dejándome totalmente atónita y confundida ante todo esto.

(...)

Una semana después

—¿Qué lees? —Preguntó Genya sentándose a mi lado.

—Shinobu-san me presto muchos de los libros que tenía su hermana guardados. Son interesantes, hay uno que habla sobre los diferentes tipos de respiración que hay, tal vez pueda encontrar la mia.

—¿Pero no estás entrenando para la respiración de la serpiente? —Me pregunto.

—No me sienta bien, no puedo usar esa respiración pero aquí hay una que peculiarmente estoy familiarizada.

—¿Respiración de la nieve? —Observo el libro quitándolo de mis manos.

En esta semana que llevo aquí Iguro no se ha vuelto aparecer y eso me pone mal. ¿Por qué me besó? Es la pregunta que me hago todos los días pero no pasó de eso al no quererme hacer ilusiones.

Genya por otro lado se ha acercado cada vez a mi, hablamos de algunas cosas, en otras solamente me acompaña mientras hago todo lo que me dice Shinobu con los tratamientos para poder recuperarme. Me enteré que también está en recuperación ya que al entrenar con su sensei se le hace rudo el entrenamiento.

—Esta respiración podría ayudarme, puede ser la perfecta para mí —gire mi rostro feliz sin darme cuenta que estábamos muy cerca.

—L-Lo siento —volteo su rostro sonrojado.

—No tienes por qué —dije en el mismo todo que usó con mi cara roja como tomate.

Sentí una mirada fría sobre mi, mire para todos lados pero no encontré a nadie, solo estábamos nosotros.

(...)

Dos semanas después.

Regrese a la finca serpiente solo para recibir la sorpresa de que mi hermano no estaba. Seguí con mis entrenamientos en el jardín pero sigo sin poder dominarlo, no va conmigo y eso lo sé.

Respiré pesadamente bebiendo un poco de agua, me senté debajo del árbol más grande del jardín sintiéndome fresca cuando el viento pasa por mi rostro moviendo mi cabello. Desabroche tres botones de mi camisa para que mi pecho se secara -gracias al sudor- recosté mi peso sobre el tronco quedando profundamente dormida.

(...)

Desperté observando mi entorno, me levante sobresaltada observando mi entorno. Ya al tener una mejor vista me di cuenta que es mi habitación.

—Despertaste —mire a mi hermano junto a mi sin si camisa y vendas, trague duro al ver lo cerca que estamos. Su olor recién bañado es atrayente y embriagante, sin poder evitarlo lleve la cara a su pecho olfateando más su aroma tratando de que ese olor se quedé en mi para siempre aunque sea imposible.

—Iguro... —Susurre su nombre olvidando todo sentimiento de extrañes, sorpresa y confusión dejando solamente el paso de tenerlo cerca y de esta forma.

—Deverías cubrirte —me separó de el tomando mi mentón—. No querrás que te vean esas marcas, ¿O si?

—¿Marcas?

—Velo por ti misma —sonrió ladino yendose de la habitación dejándome con una expresión de horror al correr al baño y ver marcas de mordida y chupetones cerca de mi cuello— ¡Nii-san estúpido!

**************

Holaaaaa espero que les guste 🙂😍😍

One Shot Kimetsu no Yaiba x ReaderWhere stories live. Discover now