Mistress (Camren) [Traducción]

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Camila's POV

No había manera en el INFIERNO que Giorgio estuviera en casa. De ninguna jodida manera.

"C-Camz," Lauren me miró cagada de miedo.

"Oh, Dios mío," jadeé cuando sentí que estaba teniendo un ataque al corazón.

"¡Joder! ¿Q-qué hacemos?" Susurró.

"¡¿Camila?! Abre la puerta ahora mismo, joder," Giorgio golpeó con fuerza. Por suerte la cerramos y no había una contraseña para abrir la puerta. Solo una llave que no llevaba consigo.

"Bueno, lárgate de mi cama,",ñ la empujé con fuerza para que se cayera, con un sonido sordo golpeó el suelo. "E-está bien. ¡Solo un segundo!" Me apresuré, yendo a mi armario para ponerme una de mis batas blancas.

"¿A dónde voy? ¿Por la ventana?" Preguntó Lauren en pánico mientras se vestía.

"Joder, no," suspiré, ya que ella moriría. "Hay otra salida al pasillo en el baño. Sal por allí. Él no te verá." Le arrojé la blusa.

"Está bien. Buena suerte." Me besó rápidamente antes de irse.

Gracias a Dios.

Inmediatamente, me apresuré a abrir la puerta para que mi esposo y dos guardias entraran en la habitación.

"¿Quién estaba aquí?" Él pasó a mi lado, mirando alrededor a todo.

"¿Qué? Nadie." Crucé mis brazos, sudando un poco.

"Mentira. Estás en nuestra habitación cuando hay una gran fiesta en la casa de huéspedes. Debes haberte escabullido con alguien." Se me acercó, mirándome de arriba abajo.

"Tal vez estaba demasiado cansada y quería descansar para mañana." Gruñí, frunciendo el ceño ante su figura alta.

"Está bien, claro," asintió, colocando sus manos en sus caderas. "¿Pero en serio? ¿Una fiesta? ¿Qué demonio, Camila?"

"Hey, es Halloween y ¿no se supone que estás en algún lugar de Italia? ¿Jugando fútbol o golf con tus amigos?" Fruncí el ceño, aún sin ceder.

"Llegué a casa temprano. Y gracias a Dios por eso, pude llamar a la policía en tu pequeño evento." miró por la ventana. Joder.

"Tú...¿llamaste a la policía?" Mis brazos cayeron asombrados.

"Sí," se dio la vuelta, encogiéndose de hombros. "Tú y la señorita Lauren no se van a librar tan fácilmente. Sé que fueron ustedes dos quienes organizaron esta fiesta." ¡¡Mierda!!

"C-cómo?" Fruncí el ceño.

"No soy idiota. Entré y encontré a un millón de chicos, todos borrachos y drogados, y me dijeron 'Lauren y Camila hicieron el mejor fiestón del 2017.' Lo que sea que eso signifique." Puso los ojos en blanco.

"¿Y qué pasa si quisiéramos organizar una fiesta en un día en el que fuera perfectamente aceptable ir de fiesta?" Me enderecé de nuevo a la defensiva. "Lauren vino a mí con la idea y como ya sabes, nunca estás aquí para celebrar el día conmigo, también podría hacerlo con alguien a quien le importe."

"¡Camila, soy italiano! ¡No me importa una mierda esta estupidez de Halloween!" exclamó, usando sus clásicos gestos con las manos.

"¡Bueno, a mi sí! ¡Siempre estoy atrapada aquí en esta maldita cárcel sin nada que hacer mientras estás en algún lugar del mundo, abandonándome a mí y a tus hijos!" Levanté mi voz, disparándole miradas furiosas.