[4.Una pregunta difícil]

5.6K 713 62
                                    

Todoroki se quedó mirando a Midoriya durante todo lo que quedaba de día, se preguntaba muchas cosas sobre el peliverde.

"¿Porqué ha llegado tarde? ¿Porqué insiste en ocultar su frente con su flequillo? ¿Porqué no dejaba de mirar a su alrededor como si estuviera alerta?"

Habían muchos porqués y no tenía ni idea de como responderlos, así que decidió ir de frente, como siempre hacía.

-¿Estas bien? -Empezar así no parecía tan malo, aunque no sabía que esa pregunta podia hacerle mucho daño a alguien como Izuku, pero él no podía saberlo.

-¿Para que preguntas? -Intentó que su tono no sonara como si Shoto no le diera rechazo, pero acabo sonando más como si le estuviera molestando la pregunta.

-Parece que estas mal. -Shoto se caracterizaba por lo observador que es, eso era algo que compartía con Izuku, pero este últimamente se distraía mucho.

-No te importa. -Terminó la conversación justo ahí, seguía sin confiar en Shoto, aunque en las últimas clases el chico tampoco le había hecho nada, pero es justo la espera del golpe lo que más duele, duele mucho saber que algo malo va a pasar y que tarde en ocurrir, simplemente no podía estar relajado, así que respondía muy a la defensiva.

Shoto, por su parte decidió no indagar más, entendía porque el chico no le contaba nada, nadie está tan mal como para contarle sus problemas a una persona que acababa de conocer, ¿verdad? Aun así no quería seguir preguntando, sin duda Todoroki le causaba mucha intriga el pecoso.

Las clases continuaron hasta acabar, y algo que el heterocromático notó fue como el muchacho de ojos verdes recogía sus cosas lentamente, como intentando dejar pasar el tiempo. A la vez, quería saber a donde estaba mirando Izuku, porque sus ojos se movían con nerviosismo, mirando de reojo a alguna persona de la clase. Hasta que vió como un grupo de tres chicos, bastantes ruidosos si le preguntan a él, se fueron por la puerta, y ahí es cuando Izuku empezó a recoger sus cosas con más velocidad que antes. Todoroki no era tonto, notó la mirada de despreció de aquel rubio, tanta frialdad le llegó a dar miedo incluso a él.

-¿Quién es ese? -Preguntó Shoto, refiriéndose a ese rubio de mirada escarlata que les miraba con odio.

-Ya le conocerás. -Decía Izuku convencido de que el chico no iba a pasar de la semana sin escupirle en un ojo e insultarle por su orientación sexual.

Terminó de recoger sus cosas y salió de la clase, seguido por Shoto, quien no caminaba al lado de él, pero si detrás, parecía que le perseguía y le daban escalofríos por la columna cada vez que giraba mínimamente el cuello y lo veía tan cerca pero sin querer estar al lado. En la salida allí estaba el grupo de desgraciados que le hacían la vida imposible, estaba tan concentrado en que Todoroki le ponía los pelos de punta por la incomodidad que se olvidó de prepararse mentalmente para su segunda paliza consecutiva en el día, no quería, así que sin darse cuenta dejó de caminar y se quedó allí mirando a esos tres chicos que ni como un ser humano lo veían. Al momento donde el grupito de chicos problema lo vieron pararse, decidieron acercarse ellos, fue ahí cuando Todoroki lo entendió, lo entendió todo y no pudo evitar entrometerse. Agarró a Midoriya del brazo y comenzó a caminar un poco rápido, casi arrastrando al pecoso, pasó de largo a los energúmenos que tenían claras intenciones de golpear al más bajo. Shoto intercambió miradas con los tres sujetos, no los miró con respeto, no se lo merecían.

Una vez alejados de la escuela, el peliverde volvió a poner los pies sobre la tierra y apartó el agarre de Todoroki. ¿Quién se creía él para meterse en su vida?

-¿¡Pero que haces!? -Estaba enfadado, tampoco pretendía ocultarlo, es que no le gustaba que le defendieran, meter a alguien en problemas por su culpa era algo que no le gustaba afrontar, y es lo que le suele pasar con sus amigos, más de una vez de una vez se lo mencionó a Uraraka o a Tenya, que si querían estar bien solo debían alejarse, pero sus amigos eran casi tan tercos como él lo era, y no pensaban dejarle solo, ¿pero porqué Shoto le había ayudado? Si no se conocen.

Shoto se quedó mirando un rato al pecoso, este simplemente estaba que se subía por las paredes, solo quería saber porqué el chico nuevo lo ayudó y en vez de contestarle solo se le quedó mirando. Cada vez le daba más miedo ese chico. ¿Qué pretendía? ¿Sería uno de esos abusadores posesivos que no permitían que nadie tocara a su víctima? Si era así le pareceria algo muy perverso, teniendo en cuenta que no se conocían ni de un día.

-Tienes marcas en la frente. -Dijo intentando acercar su mano para tocarlas, pero Izuku no se lo permitió y dio varios pasos atrás. Shoto suspiró, el entendía lo que era que alguien te golpeara sin saber porqué, su situación en casa no era lo que se dice 'bonita y familiar'. Al menos el pudo salir de aquello, pero entendía la sensación de no querer causar ningún problema a nadie, era capaz de apostar todo su dinero sin temor a equivocarse que su familia no sabía nada de lo que sus compañeros de clase le hacían. -¿Te duelen?

"Si." Era la respuesta que su rostro gritaba, no por el dolor físico, era más por el sentimiento de no poder escapar, pero le era tan difícil contestar esa palabra tan simple.

-Si te duele tanto, ¿porqué no pides ayuda?

Esa pregunta le hizo estallar, se tapó la cara, quería llorar, no podía mirar al mestizo. De un empujón apartó a Shoto para poder irse a su casa corriendo. Ya lo tenía claro, ese chico quería ayudarle, y eso le dolía, les estaba dando otra víctima más, otro juguete para sus juegos.

No, de ti noحيث تعيش القصص. اكتشف الآن