𝙏𝙁𝘼𝙏𝘽 | Los días normales en el instituto comenzaron a desaparecer cuando las flores se hicieron presentes en la taquilla de Kim Yein.
El club de música, una pelea con su amigo de infancia y el misterio del dueño de los regalos diarios, darían...
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Tal y como lo pensé, las voces de los vocalistas se oían en toda la universidad gracias al silencio del público, al igual que la guitarra de Dein conectada al amplificador.
El precoro acaba, y en esos casi tres segundos de silencio donde solo se oía el eco de la cuerda que tocaba, miro a Jongho de reojo. El pequeño me sonríe antes de volver a acercarse al micrófono para cantar junto a los otros el coro. Los golpes de la batería se oyen tan bien que me lamento no poder girar a ver a Hongjoong sin que se viera extraño, así que me centro en no distraerme más, y poco a poco siento que todos los nervios se van yendo de mí.
Tomo el valor de alzar los ojos, dejando de ver el césped y pasando la mirada entre las cientas de personas que nos observaban. Me tranquiliza el notar como todos parecían estar disfrutando la canción. Muchos estaban moviéndose al ritmo de la melodía, y otros pocos tomaron la decisión de grabarnos con su celular. Si me volviera famosa no me avergonzaría de este predebut.
Cuando me doy cuenta, la corta parte en solitario de las chicas llega. Hongjoong deja de golpear la batería, y solo Jongho y yo acompañamos con las guitarras. Las tres vocalistas armonizan perfectamente, gracias a que sus voces se parecían bastante, y luego de un rato el segundo coro llega.
No sé cómo he alcanzado a ver que más y más gente se unía al público, todos saliendo de los edificios cercanos. Mientras me aseguro de no enredarme con las cuerdas trato de buscar si alguno de esos grupos era de los chicos, y entonces, veo el cabello azul de Yunho. No demoro mucho más en reconocer a todo el club de danzas, aún con la ropa con la que se iban a presentar, por lo que supongo que acaban de bailar y habían salido al instante para vernos.
Me quejé mentalmente por no haber podido ver a Yunho, pero al menos me alegraba que pudieran vernos tocar.
Llegando a la mitad de la canción, todos los vocales callan por un segundo, y las baquetas de Hong y los dedos de Jongho quedan inmóviles. Comienza el puente donde solo sería yo y los vocales. Toco las notas más bajas de la guitarra en el pequeño solo que tenía, lamentándome el no hacerlas con un bajo como debería, y luego vuelven a cantar. El pelirrojo golpea con fuerza uno de los tambores, iniciando la parte que tanto nos había costado grabar. Los vocalistas se dividen en dos grupos y cantan líneas diferentes al mismo tiempo. Luego, una de las chicas comienza a cantar otra línea, teniendo ahora tres diferentes al unísono.
La misma muchacha hace una nota larga junto a Jongho mientras Hongjoong da a la batería de forma repetitiva, y al llegar a lo más alto, nuevamente cae el ritmo. Alcanzo a escuchar como las personas que estaban más adelante sueltan un sonido de asombro, y no puedo evitar sonreír con orgullo. San canta su parte en solitario con toda la pasión del mundo, y lo acompaño con pequeñas notas agudas.
