32.

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Me miraba fijamente, después de haberlo seguido a la sala, el llegó al sillón donde había una manta se recostó y tapó.

Cerró los ojos por alrededor de 15 minutos, mientras Dae y yo lo mirábamos sin emitir un solo sonido, expectantes de que hacía el omega. Hasta que Taehyung exaltado se paró, agarró al cachorro en brazos y se hecho a correr hacia el segundo piso de la casa.

— ¡¿Taehyung?! — grité mientras lo seguía de cerca, en el segundo piso entró a un cuarto, la última puerta del pasillo.

Más calmado lo seguí, giré la perilla y entré.
A primera vista era un cuarto con una muy buena decoración, la cama extra grande que tenía sábanas en tonos negro y rojo satinado, el closet que se veía moderno, y oh, las fotos, ellos 3, ellos 4, en todas estaba ese paliducho que era más bajo incluso que Tae, de ahí puedo decir que alto no era, no como la foto de la entrada.

Y cuando mi cerebro reaccionó, lo olí. Tae y ese otro olor, era su cuarto, ellos dormían ahí, juntos.

— ¿Tae...? — susurré al no verlo, entonces escuche ruido en lo que parecía ser el baño.

Parece que remodelo un poco nuestra casa.

— Yoonie, hay un fantasma, ven por favor... — escuché que susurraba al pegar mi oreja en la puerta.

Y lo entendí, Yoonie es ese alfa, Yoongi, el de la carta. Él.

— Omega, no soy un fantasma, soy yo, Jeon Jeongguk — hablé fuerte y claro — abre por favor, hay que hablar —

Poco a poco fue abriendo la puerta, hasta que pudo sacar su mano, la extendió hacía mí.

— Las llaves — me pidió.

¿Las llaves de la casa?
Las saque de mi bolsillo, y las dejé en su palma extendida. Él metió la mano mientras volvía a cerrar poco a poco la puerta.

— Tae, es una historia muy larga, yo quise regresar, pero no pude, ellos me lo arrebataron, bebé por fav-... — me interrumpió.

— ¿Por qué traes vendas? — habló mientras la voz se le entrecortaba.

— No llores precioso, no llores por mí, oh mi amor te amo tanto por favor no llores — exclamé mientras las lágrimas empezaban una carrera por el valle de mis mejillas hasta perderse bajo mi mandíbula.

— Pregunté, ¿por qué traes vendas? ¿Estas herido? — volvió a decir un poco más alto.

— No pasa nada mi omega, no llores simplemente, hay que habl-... — me volvió a interrumpir, ahora gritando mientras hipaba.

— ¡¿Por qué traes vendas Jeon? ¿Qué haces en mi casa?! — justo cuando acabó la oración se escuchó un sollozo en otra habitación, seguido de un llanto incesante.

Entonces la puerta se abrió abruptamente y mi omega salió disparado con mi hijo detrás. Los seguí a paso lento hasta la habitación con decoración celeste, llena de nubes y estrellas.

Ahí estaba mi omega, cargando a la pequeña que me miraba recelosa. Entonces él alzo la mirada y suspiro.

— Si en realidad eres tú, ahora no puedo hablar, yo pensé que estaba soñando otra vez, como ves tengo que atender a mis hijos, hay que bañar a Dae y darle leche a Sook, por favor, vete. Hablaremos mañana, sólo cuando mi alfa esté — habló mirándome fijamente.

— Yo soy tu alfa... — susurre antes de que las lágrimas volvieran a bajar — Siempre seré tu alfa, no digas eso, me hiere... —

— Por favor vete Jeon — volvió a repetir serio.

Asentí, mientras volteaba a ver a mi hijo que me seguía mirando intrigado, me acerque a él y le di un beso en su frente para después salir de la habitación y hacerme camino fuera de mi casa.

Dejando otra vez, aún cuando no quería, a mi familia.













— Y esta es mi casa guapo — murmuró el omega mientras abría la puerta de la adorable casa, demasiadas flores en el porche.

Y acá estaba yo, a 45 minutos de mi hogar con un omega que era aproximadamente 10cm más alto que yo y me encantaba. Su olor ligero a fresas o lo que parecía ser frutos rojos.

Justo después de entrar atacó mis labios, posando sus suaves manos en mis hombros mientras me guiaba al sofá que parecía más próximo.
Sus esponjosos labios sabían a frutos rojos también. Poco a poco empezaba a marearme y querer más de él. Jalando mi camisa logró abrirla, dejando parte de mi pecho al descubierto empezó a dejar suaves y húmedos besos.

Cuando iba a empezar a desabrochar el pantalón, una tos muy forzada nos interrumpió.

— Jinnie, realmente no me molesta que traigas alfas, pero ¡puedes hacerlo en tu cuarto! — terminó gritando el omega más precioso, hermoso, maravilloso y muchos adjetivos más, que yo había visto en mi vida.

Alto, con un cuerpo delgado y estilizado, en una pijama corta que dejaba a la vista los increíbles muslos que poseía junto a las levemente morochas y largas piernas, con cabello oscuro y algo quebrado, nos miraba un poco asqueado, bonitos labios rosas. Y el olor, él era el que olía así, los frutos rojos.

— Nammiee, perdón bonito, pero ve a este alfa — haciendo pucheros exclamó el omega que estaba encima mío. Aparentemente Jinnie era su nombre.

Como el morocho nos seguía viendo, mi alfa avergonzado de que tremendo monumento me viera así, deslicé al omega de mi regazo para pararme y vestirme correctamente, todo bajo la mirada de ambos omegas.

— Min Yoongi, encantado, ¿puedo preguntar tu nombre? — exclamé en un arrebato de valentía gracias a mi alfa.

Y el bonito se rió, y unos preciosos hoyuelos se asomaron.

A este paso mi cara de embobado era visible y ambos lo habían captado.

— ¿Con Nam? ¿Enserio? Woah, suerte Yoonie, no sale con alfas, pero bueno, me retiró a mi cuarto — dijo el pálido para subir las escaleras dejándonos solos.

El omega después de suspirar, habló.

— Mi omega reconoció a tu alfa, es un poco incómodo porque hueles a Jin, pero, tienes mi olor también — camino hacia la puerta — La ropa que ocupaba era mía, tal vez es eso — la abrió — pero, ¿puedes retirarte de mi casa?

— Y-yo... lo siento, ¿podemos vernos después? — si tendría que arrodillarse lo haría.

Me miró y sonrió.

— Yo te hablaré, doctor — mientras daba un paso atrás yo salí hacia el porche.

— Por favor, lo esperaré, ad- — cerró la puerta.

Caminando a mi coche, pensé en mi hija y en Tae, y cuando encendí el móvil y escuche los mensajes de voz salí a toda prisa, me esperaba mi familia. Pero mi alfa decidió que no podíamos seguir así, en el fondo siempre lo supimos.


— Pero ¿amas a tu omega? —

— No es nuestro omega —











.......



Hei. Comentarios de asombro here.

Si me quieren mentar la madre tbm.

Lxss quieroooo, gracias x leeeeer.













Tú te fuiste. [KookTae]Where stories live. Discover now