[•AMANTE•] ||CHRISTOPHER VÉLEZ||

"Soy ese lugar al que prometiste volver"

EPISODIO 17°

Gire mi cabeza rápidamente para ver como la puerta se abría lentamente,lenta muy lentamente,como si el que lo estuviera haciendo tuviera miedo de que esta se rompa o algo por el estilo.
Quería correr, de verdad quería, pero cuando logre ver el rostro del individuo que habitaba esa vieja casa me paralice.
Parecía joven, pero su abundante y sucia barba lo hacia ver como un viejo vagabundo.
Sus ojos rápidamente contactaron con los míos, saco la mitad de su cuerpo de la casa y tiro de mi para tomar mi brazo y adentrarme a la casa con el,apenas puse un pie dentro quise devolverme presa del miedo, pero el me lo impidió.

Marcos: Elena, Elena, mi hermosa y adorada,Elena.

Examino mi rostro con desesperación, como asegurándose de que yo fuese real.

Samantha: Yo-yo no soy Elena, me llamo Samantha y-y recién me mude aquí hoy..
De hecho mi-mi novio...debe estar buscándome.

Me miro con el ceño fruncido y la boca a entre abierta.
Luego su semblante cambio a un risueño y burlón, rio, rio tanto que apoyo sus manos en las rodillas para recuperar el aire que se había agotado de sus pulmones.
Limpio con su dedo indice la comisura de su ojo derecho que había derramado una pequeña lagrima.

Marcos: Elena, cariño, no juegues así conmigo.
No tienes que hacerme reír para que te perdone el haberte ido sin decirme a donde, ya estas aquí, no?
Es lo que importa.

Definitivamente esta loco.

Marcos: No sabes cuanto te he extrañado, yo-yo...
Ven..

Tomo mi brazo y mire hacia el suelo para no tropezarme con cualquier cosa por la poca claridad que había en el lugar.

Marcos: Toma asiento.
Señalo un punto del suelo, lo mire, luego al punto al que señalaba y luego otra vez a el.
La casa no tenia ningún mueble, silla o algo similar, solo fotos deterioradas en las pares, una nevera pequeña y una  televisión que descansaba en el suelo.

Samantha: E-en el suelo?
(Mi pregunta le causo gracia)
Marcos: No, tontita, el mueble que compramos después de casarnos,acaso no lo ves?

Decidí no llevarle la contraria y sentarme con las piernas cruzadas, recordé que es mejor no hacerlo enojar, estaré bien si lo mantengo tranquilo.
Para así poder escapar.
Lo vi alejarse y rebuscar en una vieja caja.
Eran algunos álbumes de fotos y un muy pequeño libro.

Marcos: ¿Ves? Aun los conservo.
Me los tendió y los tome, a pesar de estar muerta del miedo no dejo de tener curiosidad de el.
El libro se llamaba *Adiós y despedida (con citas relacionadas al titulo de este)
Marcos: Me lo obsequiaste, deberías recordarlo..también deberías decirme el por que.

Lo mire, probablemente su esposa se lo regalo como una forma de despedida, una sutil y disimulada.
Una tarde, a las cuatro, nos separamos
por una semana....
Entonces esa semana se hizo eterna.
-Cavafis
Decía la primera pagina.
Sus ojos con expresión inocente,como si no supiera lo que esta ocurriendo, apuesto a que ni siquiera tiene una idea de como luce, que día es hoy o en que año estamos..

Samantha: ¿Cuanto tiempo me he ido?

Pregunte y este cerro sus ojos haciendo una mueca de dolor mientras trataba de contener las lagrimas.

Marcos: Mucho, demasiado, carajo...Una eternidad...

Deje el libro a mis pies y abrí unos de los 3 álbumes que me dio, no veía del todo bien así que acerque una vela para divise los rostros plasmados en aquellos trozos de papel, creo que estos eran lo único mejor conservado de la casa.
Mis ojos querían salirse de sus órbitas, cualquiera que me conociera y vieras esas fotos daría fe, metería las manos al fuego si es posible para afirmar que la que estaba ahí era yo.
Era igual a mi, con algunas diferencias, claro.
Su cabello era mas oscuro y sus ojos mas pequeños.

Samantha: Entonces estos eramos....nosotros?

El asintió lentamente, el lucia muy feliz en las fotos, al diferencia de ella. Ella lucia triste, cansada.
Probablemente se amaban, se amaron, pero no al mismo tiempo.
Cerré el álbum y me puse de pie dispuesta a irme, sentía pena por el,pero no puedo seguir haciéndole creer, dejando que crea que soy su esposa muerta por mucho que me parezca a ella.

Samantha: Tengo que irme, Marcos.
Marcos: No.

Mas que como una afirmación, se oyó como una suplica.

Marcos: Te necesito.
Samantha: Lo siento, lo siento tanto,de verdad.
Marcos: Esta pasando otra vez, no?
Es un sueño,siempre es igual, vienes,te disculpas y luego te vas.

Un sueño, si eso es.

Samantha: Volveré mañana.

Tonta,a que estás jugando?
Regaño mi subconsciente.

Marcos: Al menos deja que me duerma primero.
Quédate conmigo hasta que me duerma, así dolerá menos..

Me tendió la mano y yo la tome, abrió una puerta camuflada y me mostró una también bien conservada habitación, sabanas limpias,almohadas rellenas.
Nos tumbamos y este rodeo mi cintura, abrazándome de piernas y brazos como asegurándose de que con este gesto no me iría.
Suspire, estaba con un completo desconocido con problemas mentales.
Lo normal..

Samanatha: ¿No apagaras las velas?
Marcos: Esas las apagas tu antes de irte, es tu rutina.

Susurro y por su respiración pesada supe que se había dormido.
Luche mucho para quitármelo de encima, pero lo logre.
Como el menciono apague las velas antes de salir a la casa que nunca de vi entrar, a la que nunca volveré.
Aun estaba oscuro afuera, así que camine rogando al cielo encontrar el camino a mi nuevo hogar.
Mis suplicas fueron escuchadas a lo lejos vi las luces aun encendidas de una casa, corrí y mis lagrimas empezaron a cesar.
Era Christopher, había encontrado el camino.
Lo abrace muy fuerte, al abrir mis ojos Ana estaba detrás de nosotros,llorando...
¿Llorando?

Ana: Te juro que la busque, la tenia conmigo y de un momento a otro desapareció.
Lo siento, Chris...

Jodida mentirosa, aunque no la culpo, fui yo quien se fue sin más.
Christopher examinó asegurándose de si no tenia algún rasguño.

Samantha: Estoy bien..

Susurré cuando estuve lo suficientemente cerca, había sido un día horrible, lo único que quería era dormir..
Junto al el, durante mucho tiempo..

-Im Moolingth-
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