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A este punto el lago estaba bajando su temperatura a una más fría congelando las piernas del peliazul que seguían enrolladas en las caderas de MoonBin. Sus labios por alguna extraña razón, lograr conectarse con los del pelinegro, una sincronización perfecta, un agarre perfecto y labios jodidamente apetecibles.

Pero DongMin no podía seguir dejando que siguiera de ese modo, hace solo unos minutos estaba con aquella morena tocando su redondo trasero.
Permitiendo que besara una parte de su cuerpo. Y ahora aquí estaba besandolo a el.

La idea solo lo asqueo.

Fue quitando su mano de su cuello y la poso en su pecho rompiendo el beso. El oxígeno faltaba en sus pulmones así que se dieron un momento para respirar con más calma. La tensión era notoria y se había extendido por sus cuerpos, a DongMin jamás lo habían besado de esa forma tan hambrienta y deseada, aturdió un poco su cabeza distrayendolo del verdadero problema.

MoonBin lo miro fijamente con los mechones de su cabello cubriendo su frente, dando una imagen tan sexy y sublime, o al menos para DongMin fue así. Sus delgados labios estaban rojos y no había sonrisa juguetona, expresión de burla. Y DongMin pudo asegurar ver la mirada real de MoonBin fuera de su papel de invencible.

El peliazul trago saliva y barrio con su mirada todo su rostro hasta dejarlo en sus ojos oscuros.

-Esto no significó nada.-musito- No te confundas y creas que he caído ante ti, ya te lo dije al principio. No me llamas ni un poco la atención.

DongMin no pudo descifrar su mirada en este momento, ya que solamente lo miraba como si estuviera pensando o analizando lo sucedido y dicho. Bajo sus piernas de sus caderas y alejo su cuerpo del suyo.

-Llévame a mi apartamento, por favor.-pidio con su voz aguda, dándose la vuelta para salir del lago.

MoonBin echo su cabello mojado hacia atrás tensando su mandíbula, dio un golpe en el agua salpicando fuertes gotas. Estaba frustrado por qué el peliazul parecía querer rechazarlo a propósito, odiaba eso por que a el nadie lo rechazaba, siempre tenía a todas y todos a su merced, por que el era MoonBin.

Y a MoonBin por muy jodido que fuera, nadie se resistía ante el.

O bueno, al menos hasta hoy.

Un rato después cuando esperaron a que sus ropas se secaran un poco, dieron camino hasta la motocicleta del pelinegro para ir de vuelta a la ciudad. DongMin no dijo ni una sola palabra en todo el camino, MoonBin tampoco tenía ganas de hablar, y sinceramente no podía entender por qué el rechazo y la indiferencia de alguien que recién conocía le afectaba tanto. Y eso es lo que más le molestaba.

El peliazul dudo si sostenerse de su cuerpo,se sentía incómodo después de lo que pasó. Decidió entonces solamente sostenerse de su chaqueta, pero aún así MoonBin tomo sus manos y las llevo a su abdomen para que se aferrara de ahí ya que por el camino oscuro necesitaba asegurarse de que DongMin no se cayera.

Así que así lo hicieron, 30 minutos de regreso hasta entrar al centro de Seúl, aparco frente a los lujosos edificios y espero a que el peliazul bajara. DongMin hizo una pequeña reverencia.

-No vuelvas a venir por mi para estás cosas.-ordeno - La próxima vez no iré contigo a ningún lado.

MoonBin lo miro de reojo y suspiro para arrancar la motocicleta e irse de ahí. DongMin recibió todo el humo del tubo de escape, tosiendo y moviendo sus manos para apartarlo, viendo el camino que hizo MoonBin desapareciendo se su vista.

¿Había hecho lo correcto?

Ahora dudaba de eso.



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La puerta del departamento fue tirada con fuerza asustando de esa forma a los tres chicos que estaban en la sala jugando una partida de Uno mientras bebían de sus botellas de Soju. MoonBin saco su chaqueta tirándola en la mesa junto con su camisa.

-¡Maldición!- exclamó con frustración dándole una patada a una silla.

-¡Ey! Con la silla no, hombre. ¿Que te pasa?- dice Jackson sentado en el sofá blanco.

-DongMin, eso pasa.- confesó.

-¿Algodón de azúcar? ¿Azulito? - el pelinegro asintió.-¿No acepto ir contigo a la fiesta del lago?

-Lo hizo, pero fue una completa mierda.

-¿Tu plan de darle celos con Mónica para que se enamore de ti no funcionó? - pregunto está vez Jaebum recibiendo una risa por parte de Jackson.

-Al principio creí que si por qué cuando me vio con ella se molestó y se fue, pero después de habernos besado me rechazó y yo..-

-¡Wow wow! - le detuvo Jackson. -¿Se besaron?

MoonBin suspiro rascando su frente.

-Una larga historia, el punto es que el me correspondio el puro beso pero después que todo estaba bien, se aleja y ¿Saben lo que me dijo?- todos negaron queriendo saber más del chisme -"Esto no significó nada" "No te confundas y creas que he caído ante ti, no me llamas ni un poco la atención". ¡Joder!

Todos empezaron a reír viendo demasiado entretenido a un Bin cabreado. MoonBin frunció su ceño al no ver seriedad en sus amigos.

-¿De qué mierda se ríen?-espeto con molestia.

-Moonsito, moonsito-canturreo Jackson acercándose a su lado colocando su brazo en sus hombros.-¿A caso no lo viste venir? Ese chico se nota a distancia que no es fácil persuadir, y lo admiro por ser tan inteligente al mandarte a la mierda.

MoonBin empujó su cuerpo sacándole una carcajada al castaño.

-Ve el lado positivo - comento Bambam del otro lado.- Se está haciendo un favor a el mismo de no salir con un tipo como tú.

-¿Que clase de amigos son ustedes?- reclama indignado.

-Unos los cuales te conocen a la perfección a la perfección, y sabemos lo que tramas. Al principio fue divertido MoonBin, pero si el chico no acepta, entonces no lo obligues, puede incluso ordenar una orden de restricción si sigues acosandolo.-le advierte Jaebum.

-Si, además ¿Cuál es tu obsesión con que te preste atención? No es el único chico en la universidad, puedes conseguir a otro.

MoonBin tomó asiento en el sofá llevando la botella de alcohol de la mesa a sus labios y bebiendo de un trago su contenido.

-Ya se los dije, solo quiero acostarme con el, llevarlo a la cama es mi único propósito.

-Ok, como tu digas.- acepto el castaño. - Solo no te enamores en el proceso de conquista, Moonsito, por qué me voy a reír mucho de ti.

MoonBin bufo rodando los ojos.

-Yo nunca me enamoró, Jackson. Recuerda eso siempre.

Todos se dieron una mirada cómplice y no siguieron con el tema. MoonBin conocía sus propias emociones, el jamás de iba a enamorar de alguien como DongMin. Solo era un pasatiempo, una nueva víctima para tener sexo y después dejarlo.

Si, eso era, porque no podría ser más que eso.

¿O si?

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Sweet Bitter ᵇⁱⁿʷᵒᵒWhere stories live. Discover now