Pecas

Suspiró con pesadez,sus manos recorrieron su rostro con duda y lentitud,se detuvieron en sus mejillas; las observó atentamente en el reflejo,las miraba con tanta intensidad como odió.

Siguió observando sus pecas,sus tan Odiadas Pecas,las aborrecia con todo su ser. Odiaba como ser veían en él,odiaba como lo hacían sobresalir del resto de la gente,las odiaba por qué lo hacían Diferente.

Wallance odiaba como las personas observaban sus pecas, él deseaba poder encajar con el resto del mundo,más sus pecas lo convertían involuntariamente en el centro de atención.

Gruñó con molestia,por más que frotara las pecas no se irían y eso lo frustraba. Su mirada permanecía demostrando el odió que se profesaba a si mismo,sus mejillas estaban rojas por la acción anterior. Sus ojos comenzaban a arder,los frotó rápidamente con su mano derecha,no deseaba llorar por eso nuevamente.

Volvió su vista al espejo,ya no se reflejaba el sólo. A su lado,una figura más pequeña y menuda estaba junto a él,trato de sonreír; más sus ojos permanecían rojos y llorosos. Un leve peso extra provocó que trastabillara,se recupero rápidamente.

Los delgados y pequeños brazos de su novio permanecían abrazados a su cuello y sus piernas envueltas en su cadera. Sonrió,abrió un poco los labios,preparándose para hablar; más la suave voz de su pequeño le distrajo.

—Wally,¿Otra vez,con tus pecas?— sus mejillas adquirieron un tono carmín al escuchar las acertadas palabras de su novio. El azabache negó,quitó de sus manos sus guantes y con sus pequeñas manos tomo las mejillas del Pelirrojo.

—Dick,¿Que haces?— disfrutaba de las suaves caricias que Richard le brindaba. Pronto a sus manos se unieron sus labios.

El pelirrojo podía sentir como los suaves labios ajenos besaban cada parte de su rostro,pero principalmente sus pecosas mejillas.

—Wally,te lo he dicho muchas veces. Tus pecas son hermosas,al igual que tú— sus labios se concentraban en besar cada peca que podía,el Pelirrojo sonreía y se carcajeba. Wally adoraba a Dick,y adoraba el poder del menor para hacerlo feliz.

Wallance abrazaba la definida cintura,mientras disfrutaba de cada beso que Richard le brindaba. Amaba los besos de Richard y Amaba a sus pecas,porque gracias a ellas,recibía cada día muchos besos de parte de su cariñoso novio.