S E I S

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— Chae Yeon falleció en un accidente automovilístico —habló mientras mantenía su vista en las fotografías que aún no terminaba de ver. Ki Hyun lo miró con detención y noto que este hablaba tranquilamente como si no doliera, quizás lo hacía, quizás no, jamás lo sabría a menos que esté se lo confesara o negara— tenía siete meses de embarazo —comenzó a relatar— tuvimos una discusión fuerte, ella salió molesta y se subió al auto, la llame y llame pero no contestaba, la busque toda la noche hasta que me llamó su padre diciendo que estaba en el hospital.

» Fui enseguida. Tras horas en operaciones terminó en coma, el doctor me dijo que no sabían si pasaría la noche —Ki Hyun lo escuchaba con atención— me quedé día y noche junto a ella, dio la pelea para vivir, incluso despertó —sonrió— cuando me vio me sonrió y me dijo que me amaba, dijo que estaría bien y que el destino me tenía preparada una sorpresa. Yo no entendí absolutamente nada, solo la abrace y le dije que la quería mucho. Nos quedamos dormidos y en la madrugada comenzó a sonar una maquina, los médicos entraron y a mi me sacaron. A las horas salió un médico a dar la noticia que falleció.

— Enserio lo siento mucho.

— Lo sé —dejo la caja a un lado y miro al castaño— al menos pudimos despedirnos. Por eso estoy tranquilo.

El silencio volvió solo que ahora estaban más cómodos, Ki Hyun acercó su mano al hombro del moreno el cual acarició con cariño para hacerle saber que no estaba solo. Hyun Woo lo miró y le sonrió suavemente.

— Me alegro de saber que a pesar de todo sigas siendo mi amigo —murmuró.

— Aun que intente evitarlo, siempre estará esa conexión que me hará volver a ti —abrazo sus piernas y cargo su rostro sobre sus rodillas mientras lo miraba con serenidad—  así que nunca dudes de mi lealtad como amigo.

— Perdón si alguna vez te hice mal.

— No importa —se encogió de hombros— eramos demasiado jóvenes, demasiado tontos.

— Tienes razón. ¿Amigos? —extendió su mano.

— Amigos —la estrecho.

Y así permanecieron la noche entera bajo el cielo nublado, conversando de cosas completamente aleatorias, nada que les recordará al pasado o a su presente, simplemente hablaban sobre la cosa más mínima hasta que el moreno en uno de sus silencios reflexivos se quedó dormido. Ki Hyun lo observó dormir sintiendo como una calidez se le instalaba en el pecho, había olvidado lo mucho que le gustaba ver al mayor dormir, le llenaba de paz y ternura. Incluso con el pasó de los años eso no había cambiado.

Lo despertó suavemente y entraron a la casa, Hyun Woo por respeto a Ki Hyun decidió dormir en el sofá hasta que amaneciera pero ninguno pudo dormir después de separarse. La mañana llegó y el moreno se fue a primera hora no sin intercambiar número con el castaño, quedaron con salir la próxima semana.

Entro a la oficina donde debía presentarse a firmar el contrato con la empresa para la que trabajaría y ahí se encontraba el que sería su jefe desde hoy en adelante. Conversaron bastante mientras hacían los trámites pertinentes quedando en que Ki Hyun entraría a trabajar dentro de dos semanas para que tuviera todos sus papeles al día y así cuando entre se dedique de lleno a trabajar.

Camino a casa paso a comprar unas cosas para llevarle a su mamá y cuando llegó se encontró con su novio conversando con Hyun Woo en la entrada de su casa. Ki Hyun sintió que su alma salió de su cuerpo en ese instante, temía tanto lo que pensará Yoon Gi. Una vez que reacciono se acercó a estos.

— Hola bebé —le sonrió el pelinegro, Ki Hyun beso sus labios como siempre y luego miro al moreno quien lo saludo con una sonrisa.

— ¿Que hacían? —pregunto observando lo incómodo que se veía Hyun Woo.

Can't help falling in love; SHOWKIWhere stories live. Discover now