𔓘 ׅ ꒲ Taehyung sólo quiere jugar a ser el pequeño tigresito de su amado Jungkookie.
La relación de ambos es llena de dulzura que cada que caminan por las calles a su alrededor existe una pequeña pero inmensamente burbujita llena de a...
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Era 30 de diciembre, y era el cumpleaños del pequeño Taehyung.
Y este estaba muy contento pues le gustaba cumplir años pues le festejaban y llevaban regalitos, y le encantaba llevarse la sorpresa al abrirlos y ver lo que contenían, muchos eran peluches de animalitos y otras veces ropa.
Además se que su madre cocinaba e invitaban a sus amigos y de los pocos familiares que iban a Seúl solo para visitarlo en su cumpleaños, y eso lo podían muy contento.
Ahora el el pequeño Taehyung estaba despertando en lo donde ahora vivía no muy recientemente. Pues evidentemente ya se encontraba viviendo con su novio después de casi cuatro años de quererlo, planearlo y que los familiares de ambos estuviesen de acuerdo. Pues era lo único que les faltaba para poder ya por fin vivir juntitos como tanto querían.
Abrió sus ojitos encontrándose con el cuerpo junto a él y sonrió pues se sentía tan bien todos los días despertar y que lo primero que viera fuera a su Jungkookie dormidito junto a él.
-Feliz cumpleaños mi pequeño tigrito-. Abrió los ojos con una gran sonrisa en el rostro. Pues el que sea el cumpleaños de su noviecito no se dan todos los días y era muy especial pues cumplía otro añito más en el mundo.
-Buenos días, Jungkookie-. Rió abrazando al cuerpo frente suyo con mucho amor mientras el contrario lo recibía gustoso.
-Hay que levantarnos ya pues hay muchas que hacer para el día de hoy. Iré a darme una ducha rápida y luego te prepararé un rico desayuno, ¿bien?
-Sípi, yo dormiré un ratito más.
Río.- bien, yo te despierto-. Besó la frente del pelinegro y luego se levantó de la cama para irse al baño y hacer lo antes dicho.
Y Taehyung cerró sus ojitos para dormir nuevamente pues tenía sueño por haberse desvelado un poco viendo su caricatura favorita, pero no podía no perdérsela pues era un nuevo capítulo y eso lo tenía muy emocionado.
Después de casi cuarenta minutos Jungkook se encontraba ingresando a la habitación con una bandeja con comida en ella que era el desayuno para ambos que el mismo había cocinado.
Le quería dar una bonita sorpresa a su TaeTae.
Dejó la bandeja en la mesita de noche y despertó a Taehyung moviéndolo sutilmente y funcionó pues logró que despertara.
Sus ojitos fueron abiertos mirando a Jungkook y fueron desviados a la bandeja frente a el haciéndolo sonreír.
-Me trajiste el desayuno a la cama, qué lindo detalle de tu parte. ¡Gracias!-Chilló.
-Todo por mi pequeño-. Le regaló una sonrisa acompañada con unos dientitos de tonejo.- a comer. Abre grande.
Y fue un agradable desayuno para ambos, Jungkook le daba de comer a la boca a Taehyung y este no reprochaba, solo se dejaba hacer.
