El mejor error de mi vida {Marco Asensio}

Capitulo 8. El campeonato

Acabamos de llegar al hotel de Vigo donde nos vamos a hospedar durante nuestro trayecto en la competición, que esperamos que sea hasta el final. El hotel es alucinante, a este mismo hotel vienen los jugadores cuando les toca jugar contra el Celta de Vigo.
¿Que si tenemos nervios? Muchísimos. Tengo ganas de llegar y pisar el escenario, de bailar y de luchar por el trofeo y el título de mejor estudio de baile del país.
-Chicos, en media hora aquí. Tenemos que ir a confirmar nuestra asistencia, ¿entendido? -dijo Miriam y nosotros asentimos.
Cogimos nuestras maletas y nos fuimos montando de poco en poco en los ascensores. Llegué a mi habitación, la cual compartía con Laura (me llevo bien con todos y todas, pero con ella me pasa lo mismo que con Daniel y, obviamente, Rubén. Nos entendemos mejor) y dejé la maleta donde pillé para acto seguido tirarme en la cama. Ayer me quedé hasta tarde hablando con Marco y, en otro chat aparte, Pilar. Pilar me cuida como si fuera mi hermana mayor y nos llevamos genial desde el día del evento. Tanto ella como las demás mujeres y novias de los jugadores españoles han venido para animarnos y, ya de paso, despejarse de Madrid.
Con Marco cada vez me llevo mejor. Antes de conocerle me parecía un poco chulo y prepotente, pero en este tiempo (que no es mucho) que llevamos hablando me ha demostrado que no.
A la media hora, en la que yo he estado en la cama hablando con Laura mientras que ella colocaba su ropa en el armario y mi móvil se cargaba, bajamos al vestíbulo del hotel, donde habíamos quedado y donde ya estaban la gran mayoría de mis compañeros. Cuando estuvimos todos fuimos al autobús para llegar al teatro donde se celebraría el campeonato.
Hoy no teníamos que bailar ningún equipo, solo era la confirmación de asistencia y ver por encima el escenario. Después de asegurarnos de que estábamos inscritos y que no había ningún error, decidimos ir a pasar el resto del día por la ciudad gallega, a lo que también se animaron las chicas.

Al día siguiente
Ayer terminamos cenando todos en una terraza del centro. Laura me despierta y adormilada voy hacia el cuarto de baño para lavarme la cara y asearme. Después salgo y me pongo el chándal del equipo, hoy yo no tenia que bailar. Cuando estamos listas bajamos y todos están ya preparados.
Al llegar al teatro vemos a todos los equipos de baile que habían venido, que no eran pocos. El campeonato comienza y veo, desde bambalinas, a los presentadores de este año. El campeonato se lleva haciendo muchos años y todos ellos son transmitidos en televisión.
Daniel pasa por mi lado y ya le veo vestido de blanco para salir dentro de un rato a interpretar su solo. Le doy un beso y me responde con una sonrisa de oreja a oreja. Él tiene mucha presión, es el primero en bailar y si no gana, nos iremos a casa. Todas las pruebas son eliminatorias por lo que tenemos que intentar no tener ningún error para llegar lo más lejos posible. Mientras que todos miran hacia el público o hacia los presentadores, mi móvil empieza a sonar indicando que tengo una llamada entrante. Es Marco así que no tardo en cogerlo.
{Llamada}
-Hola Asensio. -le dije y oí como al otro lado de la línea resopló, yo solté una carcajada.- Hola, Marco.
-Hola Carol, ¿qué tal? ¿Estás nerviosa? -me dijo más alegre.
-Nerviosa es poco, creo que incluso lo estoy más que Daniel que es el que baila... ¿y tú? ¿Qué haces? -le dije. Hablar con él me relajaba bastante, para qué engañarnos.
-¿Yo? Veros por la tele. -me dijo tan tranquilo, como si fuera muy obvio.
-¿A nosotros? ¿Pero que hora es allí? -le dije ya que me extrañaba bastante. Aquí son las 19:00.
-Las 10 de la mañana. Hoy tenemos entrenamiento por la tarde, así que no te preocupes.
-Aah, pensaba que era más pronto.
-Bueno, para ti esto es pronto. -dijo y sabía que estaba a punto de reírse. Yo asentí porque llevaba toda la razón del mundo.
-No te lo puedo discutir. -le dije y vi como Javi me hacía señas con la mano dándome a entender que el campeonato estaba a punto de empezar y que Daniel iba a bailar en cualquier momento.- Oye Marco, Javi me está diciendo que ya va a empezar y tengo que ir. Deseános suerte.
-No la necesitáis, pero bueno. Muchas suerte, Carol.
-Gracias Marco.
-Adiós Carol.
{Llamada}

Yo, sinceramente, no sé qué hace este hombre pero ahora, después de hablar con él, me siento infinitamente más tranquila y segura que antes. Gracias Marco, de corazón.