|| ¿Tú Otra Vez? || Zabdiel De Jesús y Tú || TERMINADA ||

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Narra ______ :

Termino de llenar el archivo y enseguida lo guardo en la memoria USB para ponerme de pie y dejarsela a Andrew sobre las carpetas, que tiene sobre su escritorio.

Para ser sincera me demoré bastante en planificar y coordinar las actividades generales de la empresa para este mes, ya que al ser Andrew una persona anticipada y con la pequeña reunión que habrá por navidad, hubo un poco más de trabajo que hacer.

Me limito a organizar mi escritorio y dejo las carpetas a un costado cuando mi celular ha sonado sobre mi escritorio, así que al ver la pantalla frunzo mi ceño por el mensaje de Zabdiel.

Tengo que hablar contigo, ¿crees que podamos vernos hoy en la noche?.

Trato de no ponerme nerviosa ni pensar cosas negativas sin antes saber bien el motivo, ya que no quiero quedar como una ridícula, y carraspeo mi garganta antes de responder.

Está bien. Te veré esta noche en mi apartamento. A las ocho y media.

Niego con mi cabeza volviendo a bloquear mi celular. Se que el "tengo que hablar contigo" no todas las veces es para algo bueno, pero al menos en este momento quiero convencerme a mi misma de que no se trata de algo en concretamente malo, sino de otra cosa que, bueno... Tampoco estoy segura de lo que podría ser.

Continúo torturandome a mí misma mientras repaso cada cosa que he hecho en mi mente.

Nada ha sido malo porque pocas veces nos hemos visto y la mayoría de ellas han sido en mi apartamento junto a Thomas... No pude haber hecho algo mal para que me enviará ese mensaje, a lo mejor y no buscó decirlo de aquella manera tan fría y concisa y yo estoy, literalmente, matandome sin razón alguna.

—Ahora estas paranoica, ______ —me digo y la puerta de la oficina se abre —¿April?.

Ella sonríe y no tarda en cerrar la puerta a sus espaldas antes de caminar hacia mi. Al parecer hoy ha salido temprano del trabajo porque casi siempre suele salir unos 10 minutos antes que yo.

Es más, ni siquiera esperaba verla hoy.

—No sabía que vendrías, pudiste avisarme. —le digo volviendo a arreglar mis cosas —Ha pasado demasiado tiempo en el que no nos hemos visto. ¿Cómo fue que decidiste venir?.

—Pues, no sé, estaba pasando por aquí y decidí venir a visitarte —habla caminando por la oficina —Como tu has dicho, han sido muchos días sin vernos, ¿cómo has estado?.

Sonrío, mirándola —Muy bien, me dijeron que has mejorado mucho en las terapias y me alegro por ti; estoy demasiado orgullosa, April —admito y ella sonríe, mirándome de nuevo.

—Gracias, es que no se que hubiera sido de mi sin el apoyo de Zabdiel y el apoyo lejano de mi mejor amiga —se acerca a mi —En verdad te aprecio un montón.

Ella me abraza y yo la miro incrédula ya que su actitud es un tanto extraña, así que trato de actuar lo más normal que puedo porque no quiero volverme más paranoica de lo que ya me encuentro.

—Me gusta mucho tu perfume, eh, parece que ya lo he olido antes. —menciona al apartarse.

—April, ¿qué cosas dices? Es el mismo perfume que he usado desde que entre a trabajar aquí.