Manchas de Suciedad [Yuwu]

5. Sexy Mo Xi se hace el cool en línea

Al día siguiente, el ejército regresó a su hogar con éxito.

El ambiente de la ciudad entera era sofocante, y las mujeres y niños, jóvenes y viejos, todos estaban alineados en las calles con un clamor de alegría, dejando los callejones vacíos para ir a celebrar.

"¡Bienvenidos al regreso del Ejército de la frontera del norte!"

Mientras la cabalgata entraba a la ciudad, por un mínimo segundo se hinchó una atmósfera extraña desde ambos lados, como si hubieran derramado agua en una olla con aceite ardiendo, pero luego le hubieran puesto una tapa de madera, bloqueando el sonido chisporroteante del fanatismo con ella.

Las personas agacharon su cabeza, pero por el borde de sus ojos echaban vistazos hacia el frente continuamente, espiando al caballo de élite que pasaba, llevando al gran general en su espalda.

De pies a cabeza, Mo Xi tenía puesto el uniforme de la Guardia Imperial, sus botas incrustadas con chapado de hierro pisando los estribos, y aparte de su cinto y sus brazales que brillaban en un plateado frío, estaba vestido completamente de negro.

"Xihe-Jun es demasiado apuesto, ¡aaahhhhh!"

"Me voy a morir, voy a morir"

"¡Creo que me miró por un segundo!"

"¿Eh? No seas ridícula, aparte de la Princesa Mengze no hay nadie más en sus ojos, ¿de acuerdo?"

"Pero él no se ha casado con la Princesa aún... Este año ya va a cumplir 30, sin esposa, sin prometida y sin concubina, ¿no está bien que yo sueñe un poco? ¡Cielos!"

Con respecto a los demás oficiales y soldados, sus expresiones eran mucho más dulces que la de Mo Xi.

Cada uno de ellos saludaba con alegría a la gente agrupada en la calle para recibirlos, especialmente Yue Chenqing, que hasta incluso aceptó flores que le pasaban las damas jóvenes, con la intención de insertarlas a los lados de su cabello. Fue solo después de que Mo Xi le diera una mirada de advertencia que se dio por vencido con la idea y tristemente se conformó con sostenerlas en su mano y olerlas.

El camino principal era muy extenso, y Yue Chenqing solo fue capaz de comportarse bien por un pequeño periodo de tiempo antes de comenzar a presumir su belleza una vez más, sonriendo mientras lanzaba miradas coquetas sin discriminar: "Hola señoritas~".

"Se ven bien~".

"Este humilde servidor sinceramente acepta concubinas, no tendrán que preocuparse por comida o vivienda".

Mo Xi dijo severamente: "¡Yue Chenqing!"

Yue Chenqing se tapó la boca.

La armadura del Ejército de la Frontera del Norte reflejaba la luz del sol brillante, las armas encandilando sus ojos, y a lo largo del viaje, su apariencia militar era realmente magnífica, un contraste evidente con el vigor que había cuando Gu Mang regresaba a la ciudad en el pasado. En aquel momento, cuando Gu Mang regresaba victorioso, él mismo era el primero en causar problemas, y los soldados que lo seguían estaban animados y relajados, riendo alegremente mientras recibían aperitivos y vino de la gente. Sin embargo, su líder actual era Xihe-Jun, y como Xihe-Jun no sonreía ni por un momento, los demás desde luego no se atrevían a ser muy descontrolados.

Les llevó más de media hora caminar con sus caballos lentamente desde las puertas de la ciudad hasta el Palacio Imperial, y luego de llegar al palacio hubo una ceremonia de premiación larga y cansadora que requería que se pusieran de rodillas, alabaran y agradecieran, y fue un asunto muy molesto, por así decirlo. Lo soportaron hasta que, por fin, comenzó el banquete, pero aún así Mo Xi no podía descansar.