Me despierto en un cuarto de hospital, tengo conectados muchos tubos y, parece que también estoy conectada a un monitor que me toma mis latidos cardiacos.
Desde siempre, algunas veces me hacía falta el aire, pero de un tiempo acá me he estado desmayando o un fuerte dolor en el pecho.
Ya que estaba más consciente, el doctor entró a mi habitación, y por cierto, es el doctor que me atendió la otra vez que me trajo Robert.
- Hola, América, de nuevo la tenemos por aquí.
- Sí, lamentablemente...
- Mire, ya no me gustó que le diera otra vez un dolor en el pecho, y que apenas podía respirar, así que le vamos a practicar unos estudios, para descartar cualquier cosa...
- ¿Qué estudios me practicaran y por qué?
- Mira se te hará un estudio con rayos x, un electrocardiograma, una ecocardiografía, una angiocardiografia y los estudios de radionúclidos.
"Mañana te haremos la toma de imágenes con rayos x, el electrocardiograma y la ecocardiografía. Al otro día la angiocardiografia, y al siguiente los estudios de radionúclidos.
"Estos estudios se le harán, para descartar un diagnóstico que ya tengo, no le puedo decir nada aun, porque no se lo puedo asegurar, por eso le haré los estudios...
- ¿Es muy grave?
- Esperemos que no...
- ¿Ya les avisaron a mis padres?
- Ya, en un momento llegarán.
- Muchas gracias.
- No se preocupe, este es mi trabajo.
El doctor salió de mi habitación, y me quede dormida.
****
Cuando desperté, estaba mi mamá sentada al borde de mi cama, como esperando a que reaccione.
- Hija, por fin despiertas, ¿cómo te sientes?, ¿por qué fuiste a la playa sola?
- Me siento bien, y no fui sola, fui con... Robert, pero él se fue y me dejó sola cuando me puse mal...
- ¿Qué?, ¿cómo pudo hacerte eso?
- Mamá, ya supo lo de Ceasar, él es su padre...
- Oh Dios, le hablare a Griselda, ella te ayudará, le diré que venga después de que te hagan los estudios, ¿está bien?
- Si mamá, gracias...
- Ahora duerme un poco, para que no te agites mucho.
- Sí, gracias por acompañarme.
- No te preocupes, es mi deber como madre...
Y me volví a dormir, que no sé por qué, pero me sentía muy cansada.
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Siempre a tu lado (Completa)
RomanceAmérica, de 19 años, estuvo durante un año con un hombre de 37, pero un día, ella supo la verdad, él estaba casado y con un hijo de su misma edad. Ella no sabía que iba a hacer, sentía que su vida ya no tenía sentido, hasta que conoció a Robert, un...
