Uno pensaría, que en medio de toda la mierda en la que creció encadenado y con una correa corta. Lo más lógico sería alejar a idiotas con sonrisas bobas y ojos brillantes que no se cansaba de danzar a su alrededor.
Solo un idiota lo dejaría quedars...
Me odio y no tengo cariño hacia mi salud, por eso publico ahora xd
¿Por cierto, ya vieron que bonita portada con el hermoso dibujo de Diana? ❤️❤️
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Un par de ojos rojos veían con indiferencia a los soldados que entraban por la puerta, algunos con heridas y otros arrastrando cuerpos sin vida de sus compañeros que no había sobrevivido.
Chasqueo la lengua con fastidio y resopló recargando su espalda contra la pared del pasillo, supuestamente estaba al mando de las tropas de vigilancia y orden durante la ausencia de Ultraman desde que esté, junto a los demás integrantes del Sindicato, revisaban la máquina que los ayudaría a expandir su poder por otras dimensiones, o algo así.
Jon creía que ya eran todos los soldados, eso hasta que escuchó unos latidos que hace tiempo había perdido el rastro, creyendo incluso que ya había muerto después de que este lo dejara plantado para su "almuerzo", lo cuál era estúpido para el joven Ultraboy que se sentía indignado ante tal descaro del de ojos verdes, obviamente no lo busco después de ese dia, ni al día siguiente...ni al siguiente.
Sin embargo, cuando escuchó un par de pasos ligeros y seguros, dos siluetas entraron con uniformes de la liga de la alianza. La perra de Talia Al Ghul y su cría habían echo presencia después de desaparecer durante 6 meses.
El de iris rubí sintió sus ojos cosquilliar ante la idea de freirlos a ambos por tal descaro, pero se dijo que tenía que demostrar que era mejor que el estúpido de su progenitor y guardó la compostura.
—Vaya, vaya. ¿Pero qué tenemos aquí? Una serpiente rastrera y a su mascota.
El rechinar de dientes y el aumento de pulso por coraje de alguien no se habían oído tan bien para Jon como en ese momento que se regodeo en su lugar viendo con superioridad a la mujer adulta frente a él en una de miradas furiosas que acabó con Talia desviando la mirada al saber que por más que quisiera no podría ganarle. Al menos no en esas condiciones.
Talia bufo y siguió su camino hacia la sala de juntas con la espalda erguida y pasó firme para demostrar que no le había afectado lo anterior. Jon se permitió saborear esa pequeña victoria personal de ganarle y una respiración tranquila junto a pasos más lentos captaron su atención, dejó de ver el camino que había tomado Talia y giro su vista para ver al Moreno detrás de si. Un par de ojos grandes de un verde brillante y con tonos más claros alrededor lo miraban fijamente como si quisiera entrar en él y recorrer cada parte hasta saberlo todo.
Fingió que no sintió un escalofrío y lo analizó, era obvio que había crecido unos centímetros pero él lo había echo más que él, llevaba un uniforme parecido al de los soldados con la diferencia de una armadura con detalles dorados. Jon terminó rápido su registro y afirmó su postura.
—Tienes bastantes pelota para aparecerte por aquí, bastardo, y te ves demasiado relajado para alguien que vino por una paliza.
El Moreno parpadeo e inclinó su cabeza a un lado como un cachorro confundido.
—¿No vas a decir nada, pedazo de mierda?—Hablo esta vez más molesto dejando de lado su postura importando le poco los únicos soldados que estaban en la puerta y tomó al mayor de las solapas de su ropa y sintió que gruñó de molestia.
Pero lo siguiente...Jon no sabía qué le había sorprendido más, si su mirada o sus palabras. Damian le miraba con leve temor e inseguridad.
—¿Y-yo...te conozco?
...
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