[Editando] La División de los cielos - LingZhui

Capítulo 4: Los dioses fueron encerrados

El pueblo de ¨XiaoGuan¨ Era un punto de comercio marítimo perteneciente a la provincia de LanLing, cualquiera que fuera podría encontrar literalmente lo que sea; desde las hierbas más extrañas hasta las joyas nunca antes vistas; por ese motivo el joven sucesor fue a tal lugar, con la esperanza de encontrar lo que necesitaba.

Había mucho bullicio, los comerciantes gritaban lo que ofrecían, algunos tenían precios exagerados y otros simplemente discutían. JinLing andaba cubierto por una capa, no podía llamar la atención. Fue a una esquina y revisó la lista que trajo consigo mismo, después de analizarla fue a un puesto amplio de verduras y frutas.

-Quiero todo lo que hay en esta lista.

No fue con rodeos. El viejo señor dueño del puesto, lo examino de pies a cabeza y su primera impresión fue ¨Debe ser un joven rico, le aumentaré el precio!¨

-Joven maestro todo lo que usted pide es muy costoso por ser extraños, los quiere aún?

JinLing se sintió por un momento ofendido, acaso no se veía capaz de pagar por unas cuantas verduras o lo que sea que fuera lo que pidió. Rodó los ojos y de sus mangas sacó una bolsa de piedras de oro y lo puso con fuerza en la mesa del señor.

-Esto basta?

El viejo miró con sorpresa la bolsa rebosante de piedras y dio una sonrisa de oreja a oreja.

-Por supuesto que si Joven maestro, por favor espere sentado ahora mando a alguien a traer un té, por favor pase y descanse.

JinLing se sintio un poco asqueado por la avaricia del comerciante, pero en fin ese no era su problema en estos momentos, ingreso al local y se sentó, a los minutos llegó una joven con una tetera caliente y vasos de té, lo sirvió y se retiró.

Eran las 10 de la mañana y tenia que darse prisa, XiaoGuan estaba relativamente lejos de Caiyi una persona normal se demoraría unos 5 o 6 días en llegar pero para él le tomaría una hora o tal vez menos.

En realidad a JinLing no le gustaba bajar del Cielo, relacionarse con las personas no era algo de su interés, los humanos según su perspectiva tenían una naturaleza avariciosa, malvada y poco altruista; aún no podía cambiar su concepto de estos seres pero estaba dispuesto a conocer a Lan SiZhui sin importar si es humano, había algo especial, no sabia lo que era, pero era ¨encantador¨.

Miró el vapor que salía de la tasa de té, ahora que lo piensa necesitaba saber más del otro, cualquier cosa basta, no importa si es lo más mínimo, lo que sea estaría bien.

¨Estará bien?¨ pensó.

El libro que leyó hoy en la madrugada decía lo frágil que eran los humanos en comparación a los cuerpos de los dioses o de hasta un inmortal. De repente algo hizo ¨Click¨ en la mente de este joven.

¨El anciano lo estará cuidando?¨ pensó

-Mi querido Joven Maestro aquí tiene todo lo que desea, algo más?