El Dúo Perfecto| Jotakak

Cambiando costumbres

Ya había pasado una semana desde que se habían reunido en la casa de Kujo lo cuál para sorpresa de los dos se a vuelto un pequeño hábito a la hora que salían del colegio, no decían nada pero por alguna razón ya se estaban llevando mejor que anteriormente.

- Oye, Kakyoin - llamó el moreno sacando de sus pensamientos al pelirrojo quien solamente estaba viendo la partitura sin siquiera tocar el violín.

- A-ah? Dime Jotaro - miró al recién mencionado estando distraído.

- Estás distraído y debemos terminar antes de las 5 - dijo de manera seria mientras acomodaba su partitura.

- Y eso a que se debe? - preguntó de manera curiosa el menor, normalmente ellos practicaban antes de que fueran las siete y el pelirrojo podría llegar tranquilamente a casa.

- Es mi madre, ella tiene que practicar con el arpa para una presentación - normalmente en estos casos respondería de forma grosera, pero con el poco tiempo con el que está con el menor a cambiado un poco su forma de hablar con él.

- Me puedo qued- fue interrumpido por el pelinegro.

- Deja de hacer tantas preguntas y terminemos esto de una maldita vez - y ahí estaba de nuevo el Jotaro grosero que conocía, vaya que duró muy poco su amabilidad.

Noriaki solo suspiró y empezaba a tocar junto con el de vestimentas negras estado centrado en sus pensamientos de los días anteriores, se dió cuenta que no es tan malo despues de todo aunque sea pronto de que lo diga, intercambiaron números si, pero no se hablan mucho que digamos, aunque al estar mucho tiempo con Jotaro le a afectado de cierta manera ¿Por que? Fácil, el club de perras escandalosas ahora estaban persiguiendo a Noriaki y algunas lo molestaban por que "estaban con su amado Jojo", era molesto si, pero Noriaki las rechazaba de manera sutil y se escondía sin mucho éxito de esas chicas.

Dejando sus pensamientos de lado, ya había terminado de tocar junto con el moreno y a comparación de la semana anterior habían avanzado muchísimo.

- Estuvo mejor que las demás veces pero te falta práctica - comentó el pelinegro mientras se estiraba haciendo tronar sus huesos.

- Lo sé, pero tú también, se nota que tú posición no es la correcta - decía mientras hacía movimientos circulares en sus muñecas ya que las sentía acalambradas.

- Debo admitirlo, tienes razón..... En cierta parte - al decir eso solamente recibió un suspiro cansado del menor, Jotaro era alguien muy testarudo y necio a la hora de admitir sus errores como músico.

Después de que Noriaki se había estirado un poco empezó a peinar un poco su rizo característico mientras era observado por Kujo ya que a sus ojos esa escena fue como ver a un ángel cuidando a su perfecto cabello sin ninguna imperfección pero después fue sacado de su nube por su madre quien entró sin tocar la puerta mirando a los chicos.

- Hola chicos! Los estaba interrumpiendo? - sonreía de manera amable la señora Holly lo cual fue respondido por el pelirrojo.

- Para nada Holly-san ya habíamos terminado la pieza y solo teníamos un pequeño descanso - le dijo de forma amable mientras hechaba a un lado su rizo mirando a la mencionada.
- Oh que bien, les importa si puedo practicar? - está fue respondida por su hijo de una forma no tan amable.

- Ya deja de hacer tantas preguntas y haz lo que tengas que hacer, que fastidio - refunfuño el pelinegro mientras que su madre solamente se acomodaba en su lugar agarrando su arpa y mirando a tocar la pieza il mare eterno nella mia anima.

Lo cual los dos adolescentes se quedaron escuchando atentamente la pieza quedando los dos maravillados obviamente Noriaki se mostraba más que Jotaro ya que este se quedaba viendo a su madre tocar con un brillo en sus ojos, ambos se preguntaban a donde tocaría esa señora esa maravillosa pieza tocada por un ángel como ella, era tan relajante y melancólica al mismo tiempo al punto que te imaginabas un escena tanto trágica pero hermosa haciendo los ojos de Noriaki se cristalizaron a escuchar tal belleza. Ya cuando había terminando de tocar aquella señora, el menor solamente aplaudió maravillado haciendo que la señora se sonrojara de la atención que era recibida por aquel adolescente.

- Eso fue hermoso Holly-san! - decía de forma animada mientras dejaba de aplaudir. - Aunque, podemos saber dónde tocará esa pieza? - preguntó de manera algo avergonzada mientras miraba a la señora Holly mientras que Jotaro solamente estaba callado mirando todo aunque por dentro también tenía curiosidad a donde iría su madre.

- Bueno, iré a Tokio a una presentación dentro de unas semanas con algunos compañeros y de cantante principal será el señor Ceasar Antonio Zeppeli - decía con mucha emoción mientras dejaba el arpa en su lugar junto con la partitura. - aunque si quieren puedo pedir unos boletos para que vayan ustedes dos, incluso irá el abuelo de Jotaro - sonreía de manera feliz haciendo que Jotaro solo chasqueara su lengua fastidiado.

- El viejo solamente va hacer un escándalo como siempre, es una molestia - decía de forma arrogante cruzado de brazos escondiendo su rostro bajo la gorra que tenía puesta.

Noriaki al ver eso solamente suspiró y le mostró una sonrisa a la rubia mayor - Sería muy amable de su parte que nos diera boletos para ir a verla pero si yo voy siento que sería una molestia - apenado, empezó a jugar con su rizo rojo.

- No es una molestia! Además gracias a ti, mi hijo ya no es tan malhumorado y grosero -