Finite Encantatem (BL#2)

Capitulo 38

Nott cerró la puerta tras de si cuidadosamente, como si intentara no alarmar a Hermione. El problema era que la había pillado totalmente desprevenida, con la guardia baja. Hermione se humedeció los labios, sintiendo como una gota de sudor se deslizaba por su nuca. Nott la miró fijamente, como si de amansar a una fiera se tratara. Hermione entreabrió los labios.

—¿Cómo lo has sabido?—titubeó la muchacha con la voz ronca.

Nott soltó la manija de la puerta y se acercó a ella poco a poco, sin dejar de mirarla.

—Estaba a punto de visitar a Grahmound cuando los guardias han avisado de la llegada de Pansy Parkinson.—respondió él educadamente—Y te he estado observando. Tal vez hayas enredado a Grahmound y a Lucius Malfoy, pero yo soy muy perspicaz. Aparte de haber jugado relativamente bien el rol de Pansy a la hora de hablar, no has hecho lo mismo a la hora de andar. Pansy camina con la postura muy recta y cojea ligeramente de una pierna porque de pequeña se lesionó la rodilla. Lo sé porque yo estaba con ella cuando pasó. Y también te has olvidado de dejar de mirar a tu alrededor como un cordero sin su rebaño... Estabas totalmente desorientada.

Hermione frunció el ceño.

—¿Esto es todo lo que te ha delatado?—inquirió, perpleja.

—Pansy nunca habría reaparecido aquí.—respondió—Se habría ido a la villa de sus padres.

Hermione miró al suelo, todavía confusa.

—¿Y en qué momento has creído que soy yo?

Nott se sentó en el baúl en el que Brixon se había sentado anteriormente, y Hermione se fue sentando lentamente en su respectiva silla. Se dio cuenta de lo que el muchacho estaba intentando. Estaba tratando de hacerla sentir segura, de que no saliera corriendo. Pero, ¿Qué otra opción tenía? Ninguna.

—Brendan me ha contado muchas cosas sobre ti.—dijo Nott, relajando los hombros—Además, ¿Quién más se haría pasar por Pansy Parkinson para entrar en la mansión Malfoy?

Hermione presionó los labios en una fina línea, preocupada.

—¿Crees que alguien más se ha dado cuenta?—murmuró.

—No, claro que no.—negó Nott sacudiendo la cabeza.

Hermione suspiró levemente.

—¿Por qué no me has delatado ya, si se puede saber?

—Porque quizás yo también quiera rescatar a Brendan de su destino.

Hermione entrecerró los ojos.

—¿Y...?

Nott puso los ojos en blanco.

—¿Acaso no puedo hacer un acto de caridad hacia un viejo amigo?

—Quieres sacar algo de esto, dime la verdad.

Nott se humedeció los labios y la miró con un poco de indecisión al principio, pero finalmente decidió lanzarse.

—Yo tampoco estoy feliz con mi posición aquí.—dijo en voz baja, como si temiera ser escuchado a través de las paredes.

La muchacha lo miró en una mezcla de alivio, pena y sospecha.

—¿Tu posición aquí?

Nott asintió.

—Estos últimos meses han sido terribles. Estar rodeado de las personas que provocaron la muerte de mi madre y la de Rosella me han hecho llegar al límite... Y prefiero ser un traidor y contribuir a vuestra... Nuestra causa, que seguir fingiendo que soy alguien que no soy para seguir con vida.