Mío || [Tododeku]

Anhelo.

Despertar a tu lado todos los días, para mí significa la maravilla más grande de mi existencia. Toda la belleza, toda la perfección que el mundo y el universo mismo me podían ofrecer en algún momento se opacaron al instante en que correspondiste mis sentimientos y comenzamos nuestro trayecto juntos, tomados de la mano.

Te pienso demasiado, tanto que podría asustar a cualquiera que tuviera la capacidad de leer las mentes. Te pienso tanto y de tantas maneras, que podría rayar en lo depravado. Pero así me tienes, Izuku; cada célula de mi ser, cada neurona, cada poro de mi piel, cada centímetro de mi cuerpo... reaccionan a ti, viven por ti, están para ti.

Este sentimiento que crece de manera desmesurada en mi pecho, es la muestra fiel de lo devoto que te soy. ¿Lo has notado, Izuku? Mi existencia gira en torno a ti...

Pese a que compartimos una vida juntos, no puedo evitar seguir anhelandote con mis pensamientos poco decorosos, con mis sentimientos y mis acciones. Algunas veces, suelo despertar temprano y te observo dormir. Admiro la profundidad con la que descansas, la seguridad plasmada en tu rostro me asegura que te sientes bien a mi lado, cuento de manera casi obsesiva las pecas de tu rostro; admiro el hermoso color verde brillante de tu cabello cuando es acariciado con timidez por los primeros rayos del sol y me siento celoso de las sábanas que cubren tu cuerpo desnudo...

¿Qué es este sentimiento que se instala en mi pecho cada que te veo, Izuku? Experimento un calor y un deseo incomparables a la altura de mi corazón que poco a poco se expande por todo mi cuerpo haciéndome desear más; más contacto, más cercanía, más amor, darte más y más de mí hasta hartarte... Mientras más te observo, mientras más te admiro y mientras más te amo, siento que mi amor por ti, puede llegar a límites incalculables y peligrosos.

Jamás me había sentido así en mis veinticinco años... Nadie despertó en mí tal necesidad, tal deseo y ansias de estar con una persona, por el simple hecho de existir.

Pero entonces, apareciste en mi vida.

Me sonreíste y te quedaste a mi lado.

Cada día desde que nos juramos amor eterno, me esfuerzo por seguir a tu lado, por hacerte feliz, por hacer que disfrutes los momentos que estamos juntos y que jamás te arrepientas de haber decidido pasar el resto de tus días, conmigo.

Izuku, la manera en la que te amo, temo que pueda convertirse en algo peligroso para ambos; que en algún momento sucumba ante mis deseos ocultos, volviéndome irracionalmente pasional. Pero tu cuerpo, tus manos, tu piel, tu mirada...

Todo de ti, despierta un deseo egoísta que hay dentro de mí.

Quiero que seas sólo mío.