1

1.1K 53 0
                                    

Te odio.

¿Aún recuerdas el día que hablamos por primera vez? Seguro que no te acuerdas, ¿por qué lo harías? Si tan sólo hubiéramos tenido una profesora distinta, nada de esto hubiera pasado.

Me acuerdo que te saludé con una sonrisa falsa; tú ni me miraste. La verdad, es que me caíste bien al hacer eso. Me dejaste en claro lo que pensabas de mí.

Fui al baño y cuando volví ya habías avanzado más de la mitad del proyecto. Ni siquiera había tardado 5 minutos y tú habías hecho prácticamente todo. Gracias, era obvio que no necesitabas mi ayuda.

Me dijiste que hiciera lo que quedaba y que te lo enviara. Pregunté por tu número y tú por el mío. Yo guardé mi contacto en tu celular como tú lo hiciste en el mío. Bloqueaste mi celular, pero te quedaste viendo mi fondo de pantalla con disgusto.

¿Tan malo era tener a tu celebrity crush de fondo de pantalla?

Terminó la clase y te fuiste corriendo como siempre. Me daba curiosidad saber por qué te apurabas de esa manera. Lo único que se me venía a la mente es que eras raro.

Lo más gracioso de toda esta situación es que era nuestra penúltima clase juntos y ya no nos volveríamos a ver.

Pese a que sólo éramos 8 estudiantes, tu presencia no se hacía notar. ¿Sabes por qué yo te noté? Te sentabas al costado de mi crush, nunca entendí cómo es que ustedes eran amigos.

Tú nunca hablabas y él, bueno, cada que abría la boca decía una idiotez.

Aparte de eso, eras el "japonesito" de la clase. Tus padres eran japoneses, tú manejabas el idioma pero decías que querías aprender a escribirlo y sólo por eso llevabas las clases. A diferencia de mí, sólo mi padre era japonés, por lo que no tenía la misma facilidad que tú para hablarlo y por eso comencé a llevar esas clases.

Nunca me había arrepentido tanto de algo tan insignificante. En ese momento, me arrepentí de haberte notado.

- H. T.




Debí Odiarte Antes Donde viven las historias. Descúbrelo ahora