02

31 18 0
                                    

Otro día sola, genial *sarcasmo*

Sí amigos, no me gusta estar sola.

Abro la nevera y no hay nada, o bueno, sí hay pero me da flojera cocinar.

Voy a comprar algo en la tienda. Así por lo menos veo gente y no estoy sola.

Salgo y me dirijo al ascensor.

—Hola vecina— y tayler está en el ascensor, genial— ¿ayer te entregaron la pizza?

—Después de media hora.

Ríe y entro al ascensor.

—¿A dónde vas?

—A la tienda.

—Yo también.

—Está bien.

~~~~~~

—Gracias señora, Pero no somos pareja.

Justo cuando terminaba de comprar una señora se acercó y dijo que hacíamos linda pareja. Que señoras tan atrevidas hay ahora.

—Oh que pena, es que se ve que tienen mucha química— Sí señora y física y geometría. Ruedo los ojos cuando la señora ríe.

—Sí bueno, nosotros nos tenemos que ir— agarro a Tyler del brazo y salimos de la tienda.

—Bah, yo quería seguir escuchando—dice riendo y luego agrega— ahora ¿a dónde vamos?

—A casa.

—No, hay que ir a otro lugar. Me contaste que no te gusta estar sola, vamos al zoológico y luego al cine ¿si?

—Está bien, pero tengo que avisar a mi madre.

~~~~~~~~~~

Luego de pedir permiso a mi madre para poder salir ella dijo:

¡Sí! Hija por fin vas a salir de ese sucio apartamento.

Y obviamente luego de cambiarme aquí estamos, en el zoológico.

—Muy bien, empezemos por los animales acuáticos.

Asiento y caminamos a el lugar donde están los animales marinos.

—Y cuéntame de tu vida, mujer.

—Pues... No hay mucho que contar. Soy de Italia, mi padre no vive conmigo, mi madre es doctora, tengo un pez muy pequeño, estoy en primer año de la universidad, no soy buena socializando, no soy nerd pero tampoco bruta y... Creo que eso es todo. Ah y tengo diecinueve años.

—Interesante— dice tocando su barbilla, me encogo de hombros y agrega— así que italiana eh. Bastante interesante.

—Ni tanto. Ahora cuéntame de ti, chico perro.

—Bueno. Tengo veinte años, tengo dos perros, vivo solo, voy en tercer año de universidad, no soy muy popular en la universidad, pero muchos me conocen, tengo dos hermanas menores que viven con mis padres, tengo un trabajo, soy de Australia y mi familia es de colombia.

—Oh, eso es genial. Yo tengo una tía que vive en Colombia.

—Tal vez, vayamos juntos.

—No te ilusiones, Australia— me río por el apodo de mierda que le acabo de poner.

—Supongo que ahora te diré italiana.

—Bah, suena lindo— respondo y me encojo de hombros.

~~~~~~~~~~

—Oye chico perro, gracias.

—Fue un placer, italiana.

—Adiós.

—Adiós.

Cierro la puerta y alguien a mi espalda carraspea. Pego un brinco del susto cuando veo a mi padre en el sillón.

Hija tanto tiempo sin verte— me abraza y me da un beso en la cabeza, luego de separarse agrega— hay unos asuntos de los que tenemos que hablar.

—Padre cómo has estado?— me acerco al reloj de la pared y observo que son las ocho de la tarde— ¿cuáles son esos asuntos?

—Todo bien hija. Te acuerdas de Minaline, mi esposa—asiento y prosigue. La verdad es que ella siempre me ha agradado, es una hermosa mujer, por dentro y por fuera— hemos estado pensando con tu madre que es mejor que pases una temporada en nuestra casa, en Venecia.

—Hablas en serio?

No estoy en contra ni nada, de echo es mejor. Creo que así voy a darle a mamá espacio para que no se preocupe demasiado por mis estudios y para que no llegue temprano a casa por no dejarme sola mucho tiempo.

Asiente y analiza mis expresiones.

—De acuerdo. ¿Cuándo nos vamos?

Mi padre parece sorprendido porque no responde.

—Padre?

—Sí sí, en dos días. Sólo que me sorprendió tú decisión.

—Sí, mi madre ha estado teniendo muchos turnos dobles y viene muy cansada y creo que se preocupa más porque estoy en casa. Tal vez si me quedo un tiempo en mi ciudad, mi madre descanse un poco de mí. ¿No crees?

—Cielo, tu madre jamás se cansará de ti, pero me alegro que pienses en el bienestar de tu madre, Alice.

¡Hey tú, Italiana! [En Proceso]Where stories live. Discover now