Un pelinegro miraba a su tío el cual estaba ordenando unas cosas él se acercó y lo vio, él ordenaba unos papeles, él sabía que muy pronto entraría al colegio otra vez pues había estado algo enfermo y no había podido asistir, además que se sentía feliz que ahora estaba con alguien que le daba amor y apoyo aunque aún se sentía un poco mal por la muerte de su madre, sabía que debía de superarla era tarde y ellos estaban haciendo unas compras él casi no hablaba con nadie miró su mano y esta tenía un yeso se la había fracturado cuando se cayó de las escaleras, él vio a una hermosa mujer caminar donde su nuevo papá el cual también la saludo.
—Señorita Kim qué sorpresa. — sonrió.
—Lo mismo digo Hoseok. —hablo.
—Oh él es mi hijo Jungkook. —sonrió mostrando al pelinegro que se sonrojó.
—Es muy lindo. —sonrió. —hola, pequeño soy Kim Jisoo.
—Hola. —susurro.
—Es algo tímido. —le acarició la cabellera.
—¿Cuántos años tiene? —le pregunto.
—Pues hace una semana cumplió los nueve. —hablo.
—Vaya, él es un año menor que Taehyung. —sonrió.
—Oh, es verdad. —sonrió. —¿Cómo está él?
—Pues al igual que los otros dos llenándonos de orgullo. —sonrió. —es tan buen hijo.
—Lo sé. —hablo. —muchos sienten envidia.
Ella les enseño una foto, el pequeño pelinegro vio al castaño niño él sabía que lo había visto en algún lado, pero le era difícil de recordar, sabía que había algo extraño en ese niño, pero no dijo nada pues no tenía amigos y tal vez lo sentía extraño al verlo rodeado de mucho más niños.
—¿Volverás a la academia? —le preguntó.
—Claro. —respondió. —me gustaría que Jungkook también fuera solo que aún es algo pequeño.
—Sería un gusto tenerlo también. — hablo mientras le sonreía al pequeño.
Un castaño se terminaba de arreglar el cabello, sabía que era una idea muy loca, pero su primo tenía razón, estaba cansado de que no le dejará acercar a ningún otro chico o chica que quisiera conocerlo. Él sonrió y bajó debía de usar su mejor arma que según Taehyung tenía era su lindo rostro de inocencia, al bajar lo vio en la sala con sus amigos jugando él no dijo nada, bajó con sus pantalones cortos que dejaban ver sus piernas y una camisa algo larga al verlo se quedaron callados, él los ignoró y fue a la cocina.
—Oye tu hermano es muy lindo. —dijo uno con una risa.
—Callate Yuta. —frunció su ceño.
—Vamos, Yoongi es una linda ternurita. —rio otro. —es una pena que sea menor.
El pálido se levantó y fue a la cocina vio que él estaba viendo que comer, era sábado y ese día los empleados descansaban, su madre había salido al gimnasio y su padre a jugar golf con su tío, él se giró al sentir la cercanía de alguien vio a su hermano.
—Que. —dijo serio.
—Cambiate de ropa. —lo vio.
—No quiero. —sacó una botella con agua — hace calor por si no sabes.
—No me interesa. —hablo. —ve y cambiate es una orden.
El castaño rio con inocencia, pues después de todo si lo era al menos por ese momento, él abrió la botella y la bebió lento, se limpió la boca y lo vio.
—No eres nadie para decirme que hacer. —quiso salir, pero el pálido lo detuvo.
—Tienes razón. —lo vio. —pero que te quede claro algo Jimin.
—El que. —habló mientras lo miraba a los ojos.
—No dejaré que nadie te dé cariño. — habló mientras lo llevaba a la puerta del refrigerador. —al menos no como yo te lo daba.
El castaño lo vio y sus mejillas las cuales ante los ojos de su hermano mayor eran como dos manzanas las tocó, el castaño se puso en puntillas y le dio un pequeño beso en la mejilla.
—Hyung. —susurro.
—Si Jimin. —hablo.
—Me gusta alguien. —se sonrojó aún más. —pero no sé qué hacer.
El pálido frunció su ceño, pues nunca Jimin había estado así, él se alejó y Jimin lo tomó de la mano.
—Hyung. —lo llamó.
—¿Quién? —pregunto.
—Yo. —se quedó callado.
—Mierda Jimin. —lo vio molesto. — ¿Quién es?
—Baekhyun hyung. —dijo.
El pálido se puso molesto al escuchar eso, pero se calmó no debía de crear cosas, él vio como su hermano se fue corriendo con la botella con agua, él tomó un paquete de dulces y volvió a la sala vio a los chicos los cuales miraban sus celulares.
—Ya volví. —se sentó en el sofá.
Comenzaron a ver la película tranquilos hasta que cierto rubio pidió permiso para usar el baño él se dirigió ahí, al salir se asustó al ver al castaño.
—Oh Jimin me asustaste. —rio nervioso.
—Sabe hyung de todos ustedes. —se acercó un poco. —tú eres el más bonito que he visto.
El rubio se sonrojó un poco, pues a él le gustaba un poco ese niño, pero sabía que Yoongi era muy protector con el chico.
—Jimin yo. —tartamudeo.
—Hyung. —sonrió.
El rubio trago saliva y se acercó un poco al castaño lo tocó de una mejilla y este sonrió mientras se ponía de puntillas y le dio un beso en la mejilla.
—Jimin esto está mal. —negó. —tú eres menor y yo.
—¿No te gustó? —hizo un tierno puchero.
El rubio se sonrojó, el castaño se puso de puntillas y lo tomó de ambas mejillas para verlo, el otro lo miró, pero un ruido hizo que se alejaran.
—¿Qué mierdas pasa aquí? — preguntó furioso el pálido.
—Yo no. —se alejó el rubio.
—Le dije a Baekhyun hyung que me gusta. —habló el castaño.
—Él no te puede gustar. —miró a su hermano.
El castaño frunció su ceño y se fue a encerrar a su habitación y se quedó ahí, su corazón latía mucho se quedó en su puerta, se quedó ahí la puerta se abrió y vio a su hermano el cual tenía el ceño fruncido.
—Vete. —dijo el castaño.
—Baekhyun no te puede gustar. — habló.
—Si puede. —lo vio. —él es lindo y gentil.
El pálido se acercó y lo tomó de ambas mejillas para que lo viera le dio un pequeño beso y sonrió.
—Tú eres mío Minnie. —sonrió el pálido.

KAMU SEDANG MEMBACA
Black swan [V.K] [#1][PRÓXIMAMENTE]
Fiksi PenggemarLo único que deseo en este momento es volver a tocar tu suave y delicada piel, sentir el sabor de tu sangre en mis papilas gustativas, escuchar tus gritos como una de las grandes melodías que el mundo jamás se atrevió a escuchar , poder ser él único...