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El hombre también estaba jadeando y sudando mucho. Su ropa colgaba de él y estaba desgarrada en algunos lugares.

Él claramente había corrido por un tiempo, pero se detuvo al segundo que sus ojos aterrizaron en YoonGi, y él se puso a llorar cuando tropezó al frente, con los pies descalzos chapoteando en la fría corriente de poca profundidad.

― YoonGi ― dijo, con las manos extendidas, pero YoonGi no se movió.

No pudo, se quedó paralizado. 

Algo estaba mal.

 Él hizo girar su cabeza y le dolía el pecho, había algo raro pasando aquí. 

Un fuerte estruendo resonó en el interior de los árboles, el tipo de sonido que sólo podría provenir de una criatura paranormal, y el omega se volvió a mirar hacia él, sus ojos estaban muy abiertos y la boca ligeramente abierta.

Se veía aterrorizado, pero luego empezó a correr de nuevo, hasta que estaba en el otro lado del rio, y cayó junto a YoonGi, envolviéndole los brazos alrededor del cuello de YoonGi.

YoonGi todavía estaba congelado, incluso cuando el omega comenzó a frotar su cara y limpiar las lágrimas en el pelo peludo de YoonGi.

― N-no dejes que me lleve, por favor 

 Él estaba sin duda asustado, y YoonGi apenas logró salir de su trance y gruñir en la dirección y esperaba que el lobo atacara.

YoonGi no conocía a este hombre, pero él estaría muerto antes de permitir que un alfa abusara de un omega, especialmente uno embarazado.

Hubo otro rugido y luego un lobo negro apareció entre los árboles y follajes.

Muchas ramas pesadas todavía golpearon de sus lugares en los árboles con el poder del lobo, era un lobo negro, que era sólo ligeramente más alto que el de YoonGi, pero eso no lo asustó. Ni siquiera estaba asustado cuando el lobo aterrizó sin problemas en sus pies e inclinó la cabeza, pelos en pie, listo para una pelea.

Lo extraño, sin embargo, fue el hecho de que, desde que miró a los ojos de YoonGi, el gruñido se detuvo inmediatamente cuando levantó la cabeza, como si tuviera curiosidad por alguna cosa.

YoonGi no impidió su gruñido, e inclinó y arrugo su rostro  para poder ocultar el hecho de su cicatriz y de que estaba en desventaja.

El Omega aún lo sostenía desesperado y llorando, pero apenas hizo un sonido. 

El mismo sentimiento, aquel que le dijo a YoonGi que algo andaba muy mal aquí, salió a la superficie para él, y su cabeza se volvió ligeramente.

¿Por qué estaba mirando a este alfa? 

¿Será que lo conocía también? 

¿Por qué el omega estaba tan aterrorizado? 

YoonGi estuvo cerca de cambiar de modo que pudiera preguntar al otro lobo lo que estaba sucediendo.

 ¿Quién era? ¿sabía quién era?

El lobo negro se volvió y saltó hacia atrás a través de los árboles, huyendo, dejando a YoonGi sorprendido.

Pensó que era algún tipo de trampa, que el alfa estaría de vuelta y estaba simplemente circulando en algún lugar, mantuvo la nariz y las orejas elevadas, y no paró de gruñir y gruñendo hasta por lo menos que los minutos pasaran y no había indicación de que el alfa regresaba a ninguno de ellos.

Él todavía estaba confuso como el infierno, pero supuso que bien podría descubrir quién era este omega y de dónde venía. YoonGi intentó alejarse de él al principio, para desalojar las manos del omega para que pudiera volver atrás y hacer su cambio en alguna parte.

Remember Me AlfaWhere stories live. Discover now