Juego, Set y Partido. Adaptación Juliantina

Capitulo 21

Una vez arriba, Juliana y Martina se afanaron en la cocina calentando la comida que había quedado olvidada en los escalones cuando Valentina se puso a jugar, Juliana tomó nota de la cantidad que tendría que encargar la próxima vez que se le ocurriera la idea de invitar a cenar en casa a una manada de atletas hambrientos, después de despedirse en los escalones del edificio con besos y abrazos, Lucia y Guillermina se ofrecieron a acompañar a Paloma y Martina a sus respectivos hogares esa noche, Eva y Mateo llamaron a un taxi que pasaba, de modo que Juliana se llevó a su tenista arriba para darle un baño caliente.

— Debes de haber perdido dos kilos a base de sudar ahi afuera y seguro has ganado casi tres a base de la comida china.

Valentina no se tomó demasiado en serio los aspavientos de Juliana, puesto que la morena estaba de rodillas desnuda al lado de la bañera, se metió dentro y se arrodilló entre las piernas de Valentina para poder lavarle el cabello.

— Levanta una pierna, por favor, tesoro.

Valentina dejó colgado medía pierna izquierda por fuera de la bañera para que Juliana tuviera espacio para acercarse más. Cuando Juliana así lo hizo, Valentina se metió en la boca el pezon que tenía por justo delante, haciendo que Juliana se olvidara de lo que estaba hablando por un instante.

— Qué bien sabes— dijo Valentina alrededor de su amigo ahora todo animado.

— Ah, no, quieta ahí, ya sé que mañana no tienes que jugar, pero te vas a dar un baño y a acostar a dormir, por mucho que le guste ver tu lindo duraznito corriendo por toda la pista, los partidos cortos me gustan mucho más, y me da la sensación que a ti también.— Juliana oyó y notó que Valentina la soltaba con un pop.

— Aguafiestas.

— Sólo quiero cuidarte. — Juliana aclaró el jabón del pelo de Valetina y terminó la tarea con un beso.

— Y yo te lo agradezco— dijo Valentina con una sonrisa, cuando Valentina estuvo seca y vestida con otra camiseta y pantalones cortos, Juliana la instaló apoyada en el cabecero de la cama y le dio de comer el postrecito.

Valentina oía a Juliana lavando los platos que habían usado, pero la mujer más menuda le había dado órdenes estrictas de quedarse en la cama y no entrar en la cocina, tenía la esperanza de que fuese porque Juliana quería que descansara y no porque no sabía que decir después de lo que había ocurrido esa tarde, Juliana se acurrucó pegada a ella en cuando apagó las luces y se puso un corto camisón.

— Gracias por venir a todos mis partidos hasta ahora, para mí es muy importante levantar la mirada y verte sentada en las gradas.— dijo Valentina suavemente y estrechó más a Juliana, el sólido cuerpo cargado de curvas le resultaba tan gozoso pegado a ella que Valentina no pudo evitar dejar que sus manos se pasearan un poco, Juliana era tan bella físicamente que le recordaba a Valentina una cosa que había leído una vez en un libro: " Tenía figura de reloj de arena con treinta minutos extra añadidos porque si". O algo así, y ahora sé a que se refería. El pensar vagó por la mente de Valentina mientras su mano se posaba en el trasero de Juliana.

La boca de Juliana se curvó en una sonrisa al oír lo que había dicho Valentina, era muy tierno, teniendo en cuenta la cantidad de gente de todo el planeta pegada a sus televisores para poder ver jugar a Valentina, que fuese Juliana quien más le emocionaba a la tenista tener allí.

— No más importante de lo que es para mí estar ahí para verte jugar, en cierto modo, es un poco raro.

El largo cuerpo que estaba debajo de Juliana se agitó un poco cuando se comenzó a reír.

—¿Raro?

— No raro en el sentido de extraño, mi amor, raro en el sentido de ver a alguien que hacer una cosa para ganarse la vida que otra gente quiere ver y aplaudir. ¿ Tú le ves el sentido?