Cap. 243: Paseo nocturno

432 67 23
                                    

***Es súper cortito, sorry!

El río estaba plácido en ese momento y la luna estaba en lo alto iluminando todo el paisaje, la ciudad se escuchaba tranquila, después de cenar algo Junho y Yoonho fueron a caminar un poco, a esas horas, había pocos transeúntes y Junho podía colgarse de su brazo mientras caminaban, en el camino, compraron un par de helados y buscaron una banca para sentarse y contemplar la claridad en el río

Mientras comían el helado, Junho apoyo su cabeza en el hombro de Yoonho y entrelazaban sus manos, por varios minutos estuvieron en completo silencio, hasta que sus miradas se encontraron y se buscaron para darse un beso, Yoonho abrazo a Junho y juguetearon un poco en medio de las penumbras, se daban pequeños besos en sus rostros y se acariciaban mutuamente, los ojos de Junho brillaban cada que miraba a Yoonho, realmente, no sabría que hacer sin él

-Te amo - Murmuraba Junho mientras acariciaba el rostro de su novio

-Yo también te amo...

-Antes estaba cegado, me quede con esa persona, porque no quería estar solo, después de perder la oportunidad con Seongmin, me entramparon y me quede con Byung, fue un desastre por culpa de Jason y me rompió el corazón...

-Si el no se hubiera interpuesto, los dos no estaríamos juntos ahora - Murmuró Yoonho

-Es lo único bueno de entre lo malo... que te conocí

-No se qué hacías con una persona que nunca te dio tu lugar, una pareja es de dos, no de tres, por eso tampoco podía quedarme mucho tiempo con Dong Pyo

-Tampoco la has pasado bien - Murmuró Junho - Aparte de por mi culpa, también porque te dejaron solo durante tu enfermedad, debió ser duro para ti, sufrir todo ese proceso sin nadie que te apoyara

-Sobreviví - sonrió y abrazo a Junho - Y quiero estar contigo el resto que me quede de vida...

Junho lo miró con los ojos amorosos y lo besó de nuevo, de modo tan dulce y tierno, no con voracidad ni con deseo sexoso, más bien, era tan apasionado, lleno de amor, cuando despegaron sus labios, sus frentes quedaron unidas, sus narices rozando y sintiendo sus respiraciones, era un momento tan precioso, solo ellos dos en ese instante

-No me dejes nunca - murmuró Yoonho

-Nunca - respondió Junho abrazándolo por el cuello por largo rato, oliendo su pelo y su cuello, le gustaba su olor, era tan él, apenas y podía creer que hubo un tiempo, en que fue tan frágil que estuvo a punto de irse

Junho cerro los ojos y dio gracias a Dios, porque estaba vivo, porque lo había rescatado y le había demostrado, que había alguien en ese mundo que lo quería solo para él, que no deseaba compartirlo con nadie, que su alma, su cuerpo, sus besos, caricias y su vida entera, eran exclusivos para dárselo a él, a nadie más... eran los dos en ese mundo tan difícil de aceptación, pero estaba seguro de que lucharían juntos

-Hace más frio - suspiró Junho - No quiero que te resfríes

Yoonho asintió y le sujetó su mano, se levantaron y comenzaron a caminar de regreso, a esas horas, había pocas parejas romanceando, uno que otro que iba solo y a prisa, salieron del parque y subieron al coche, pusieron música tranquila para regresar a su departamento, siguieron jugueteando con sus manos en cada semáforo en rojo, se miraban e intercambiaban sonrisas, se detuvieron en una tienda de conveniencia y se atiborraron de snacks y ramen

Cuando llegaron a su departamento, decidieron preparar ramen juntos, entre juegos amorosos y besos escarchados en sus rostros, haciendo un desastre en la cocina, destapando los snacks y dándoselos de boca a boca. Cuando lograron terminar el ramen, fueron a ver un poco de tv escogiendo una película romántica, mientras cenaban e intercambiaban besos

Al final, los trastes fueron al lavatrastes, ellos se lavaron sus dientes para ponerse sus pijamas y se recostaron juntos en la cama, Junho se abrazó de nuevo a él, pero no se durmieron enseguida, se contemplaron un poco más, en esa ocasión, ninguno quería sexo, en ese momento, querían estar así, juntos, mirándose con amor, acariciándose mutuamente, escuchándose sus latidos de su corazón, la tibieza de sus cuerpos

- ¿No tienes sueño? - Yoonho acaricio su rostro con el dorso de sus dedos

Junho ya sentía sus ojos cargados de sueño, pero se negaba a dejar de mirarlo

- ¿Tú no estás cansado? - Sonrió

-Estoy acostumbrado a desvelarme, tú no, así que cierra tus hermosos ojos y yo velaré tus sueños

-Hubo una temporada en que las reuniones y fiestas de Jason no me dejaban dormir, me mantenía estresado y desvelado

-Deja de pensar en esas cosas malas que te pasaron, ahora estás conmigo

-Tu amor es solo para mí - susurraba parpadeando más

-Tienes todo mi corazón - Le dijo besando sus ojos

Junho finalmente sucumbió con Morfeo y se durmió enseguida, Yoonho lo arropo y estuvo un buen rato mirándolo dormir, le gustaba mucho, el rostro bonito, su cabello suave y sedoso, apenas y podía creer que después de perder la fe en el amor, éste estuviera restaurándose y que su corazón de nuevo tuviera muchas ganas de vivir, para estar con él hasta los últimos días de su existencia

Finalmente, Yoonho también se durmió, bien abrazado de Junho... y soñó... que estaba con Junho en un hermoso jardín lleno de flores, había mucha luz del sol, él lo perseguía, Junho reía y había un perro grande brincando con ellos a su alrededor, de repente no era solo un perro, eran como seis por todo el lugar, Yoonho se detenía y daba vueltas mirando como jugueteaban y de repente se detenga al ver a Junho cargando a una niña en sus brazos, ella sonreía y levantaba sus bracitos para que lo cargara

Iba a hacerlo cuando despertó...

Junho seguía roncando a su lado, había perdido completamente a dulzura y ahora resoplaba ruidosamente en su pecho, miró el despertador y se sorprendió, aún no amanecía, por lo que imagino que había dormido poco y profundo, así que suspiró y volvió a cerrar los ojos, los sueños eran una locura, Junho jamás le había mencionado que quisiera un perro y mucho menos que le gustaran los niños

-Deja de pensar locuras Yoonho - sonreía mientras intentaba dormir

De repente escuchó hablar entre sueños a Junho

- "Yoonho, Yoonho... ponme más chocolate en todo mi cuerpo... cómeme"

Eso lo hizo reír, lo acomodo un poco mas en su regazo, le dio un beso en la frente y se dispuso a dormir, esta vez, sin soñar con mascotas o niños, o si lo hizo, no se acordaba, al amanecer, Junho se levanto de buen humor y se puso guapo para irse a trabajar, dejando a su hombre en casa, como debe ser...🤗

Losing my Virginity (2a parte)Where stories live. Discover now