El Demonio Entre Las Piernas

La caida

_el fruto de un pecado reside en ella, debe ser expulsada de los cielos_

_no, usemos a este engendro para realizar una invasion al infierno, si es parte demonio seguro que ella podra romper el sello que mantiene asalvo a los demonios de nuestras espadas y flechas_ manifestaba su idea una de las grandes comandantes del cielo.

_y si nos traiciona, como seremos capaces de confiar en una mestiza_ aclaraba otra.

Tras una discucion las angeles no se ponian de acuerdo de que es lo que harian con la angel que habia sido manchada por un demonio y no uno comun y cualquiera, si no la mismisima Chikane pecado de la lujuria.

_¡silencio!_ levanto su voz la lider, Diosa que era como la conocian aquella quien regia los cielos.

_he tomado mi descicion, aquella conocida como Himeko sera exiliada junto a la criatura que lleva en su interior, dejara de ser una virtud  y se convertira en una caida_dictaba su sentencia.

Muchas no se encontraban de acuerdo, observando a su autoridad ninguna se dignaba a cuestionar hasta que una se levanto de su asiento.

_diosa, se que es esa su descicion pero le ruego que considere en usarla en contra de los demonios_ se dirigia con respeto a su autoridad agachando la cabeza y arrodillandose ante ella.

_no, ya he tomado mi descicion, descuida Nael, ya habra otra ocasion para destruir el infierno, por ahora respetemos nuestras costumbres, toda aquella que se haya contaminado con la oscuridad de un demonio debe ser exiliada al mundo humano_ dictaba sus ultimas ordenes _recuerden que hay una paz establecida entre ambos reinos, que no deseo romper aun, pero les aseguro, que un dia acabaremos con la oscuridad_

Las demas hecharon un pequeño grito de alabanza tan corta que al terminar sus brazos derechos golpearon contra su armadura haciendo sonar  este con desden para luego retirarse.

La orden ya habia sido impuesta y tras mantenerla cautiva en lo que era su habitacion la joven Himeko habia sido enmanillado para ser llevada frente a un estrado angelical.

_por el delito de impureza y la gestacion de una criatura que rompe las leyes del infierno y el cielo se la ha declarado culpable, por que se le da la pena de exilio_

El martillo golpeo la madera dando su beredicto, la joven Himeko resignada a cumplir la voluntad de la diosa junto sus manos rezando una plegaria suplicando su perdon, pero al no oir nada continuo devota, incluso tras quitarle su halo frente a las angeles, esta continuo rezando.

Tras desender por unas escaleras la joven termino en una pequeña celda apuntando hacia abajo. viendo como acabaria sus minutos en el cielo levanto la mirada solo para dicir:

_quisiera que me entregaran mi arma si no es problema, ¡por favor!_ suplicaba a una de las guardias.

La misma la alcanzo y tomandola lentamente Himeko continuo rezando aun sin la ropa de angel ella aun sentia que la diosa iva a perdonarla, pero no sucedio, nisiquiera presente en el exilio la virtud de la castidad cayo por la fosa oscura que conducia al mundo humano.

Tras despertar la joven se notaba aun cansada y deshubicada se encontraba sola y bien acobijada a su frente un poco de la comida de ayer del cual se habia servido la demonio, en un principio ella se reusaba a consumirla pero tras sentir el ruido en su estomago esta no tuvo mas opcion que aceptarlo mientras hacia un acompañamiento con lagrimas de tristeza.

La mañana era fresca y tras sentir el aura humana avecinarse la muchacha descidio irse, para que los humanos no la encuentraran, tras levantar vuelo la exangel tambien conocida como la caida levanto vuelo al sentir la brisa ella se sintio mejor y mas libre pero tras recordar los hechos esta se puso melancolica nuevamente aterrizo y comenzo a sollozar en silencio.