Siempre tú

| XXXII |

Pov Alba

Uy menuda cara se le está quedando a Natalia hablando con su hermana, ¿le habrá pasado algo? espero que no jo, es como una hermana pequeña para mi y no quiero que le pase nada.

Nada más colgar se gira a mi y me dice que tenemos un problema, vale, tiene que ver con nosotras, ¿pero el qué? si estamos perfectamente... además... si tiene que ver con nosotras... ¿qué tiene que ver aquí Elena? no entiendo nada, necesito respuestas.

- ¿Qué pasa Nat? menuda cara se te ha quedado... ¿va todo bien?

- ¿Vamos muy rápido si te presento ya a tus suegros?-dice un poco nerviosa-.

¿Y esto? no me estoy enterando de nada... pero si Natalia no quería que lo supieran y por eso hemos ido a la casa del campo...

- ¿Y esto? pero si no querías que se enteraran...

- Pues... porque... no sé como se han enterado pero saben que estoy aquí y pues... Elena me ha dicho que me quieren ver y bueno... no sé si querrás venir conmigo... pero a mí me hace mucha ilusión...-dice esto último poniendo un puchero-.

Ay me la como.

- Pues claro que voy contigo Nat, yo voy a estar pegadita a ti todo lo que pueda y si puedo aprovechar un día más pues aprovecho-le digo con una sonrisa mientras me acerco a ella-. ¿Te ha quedado claro ya?

- Cristalino Albi-me dice con una sonrisa-. Por cierto... hay otra cosa que quiero hablar contigo y... no sé como te lo vas a tomar...-dice mientras agacha la cabeza-.

Que manía tiene esta persona de agachar la cabeza...

- Nat, mírame-le digo mientras le cojo de la cara y se la levanto para que me mire-. Seguro que me lo tomo bien, no te preocupes, ¿vale? y no tengas miedo porfi, que soy yo, Alba, tu novia-digo esto último en un susurro-.

- Jo Albi es que tengo miedo de que te enfades conmigo y bueno... estamos tan bien que no quiero que se joda...

- Nat, dímelo ya, seguro que estás exagerando, no creo que sea para tanto-le digo con una sonrisa para que se tranquilice-. ¿Quieres que vayamos a la casa del campo y así hablamos tranquilamente? así puedo darte caricias y te relajo un poquito, ¿te parece?

Y nada más decirme que si sé perfectamente lo que necesita y yo se lo voy a dar.

Diez minutos después llegamos a la casa del campo, ya estamos solas, aquí nadie nos podrá molestar, sé perfectamente que es la intimidad que necesita ahora.

Nos tumbamos en la cama y le digo que se ponga a mi ladito, para darle todos los mimos que ella necesita.

Estamos un rato sin hablar, yo dándole caricias en la espalda y ella intentando tranquilizarse y me imagino que pensando como decirme eso que me tiene que decir, que la verdad es que tengo mucha intriga y cada vez que pasa el tiempo tengo más intriga, espero que me lo diga pronto, además seguro que es una tontería, que ella se preocupa demasiado cuando no hace falta.

- Nat, ¿estás mejor?-le digo con una sonrisa-.

- Si Albi, muchas gracias y perdón por todo esto... se que soy una dramática pero jo, todo lo que tiene que ver contigo me pone muy nerviosa porque no quiero que nada salga mal entre nosotras... y eso...-dice mientras juega con mis dedos-.

Estaba a punto de decirle algo cuando la llaman, joder que oportuna es la persona que le llama ahora joder, ¿no podría haber llamado diez minutos más tarde? cuando hubiéramos terminado de hablar.

- Espera Albi, que es mi madre, seguro que es para que vaya.

Y para no ser una cotilla decido hablar con mi hermana, seguro que me hace la espera más amena.