Capítulo 11

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׿Talento? ¿Para qué?
(T/N)

Asombrada, observaba la casa en la que estaba parada. Cuando caminaba por allí, siempre me carcomía la pregunta de quiénes vivían ahí, pues las paredes oscuras resaltaban entre las coloridas. Me llamaba demasiado la atención. Cerré la boca y me concentre tocando el timbre, sujete con firmeza mi mochila al momento en que Dee salió y se dirigía al portón.

—Espero que hayas traído lo que te pedí— abrió para darme paso —, principalmente, que estés preparada para reforzar sus nulos conocimientos.

Le sonreí nerviosa como respuesta y nos adentramos a la casa, era más llamativa por dentro.

—Oh, Dee— bajaba lento un señor rubio, el pelo atado en una coleta y la ropa era de mezclilla, esa apariencia decía mucho —. No sabía que teníamos visita— paró frente mío y estiró su mano —. Mucho gusto, soy Glam.

—E-el pla-placer es mío— tartamudeé y la estreche, ver su viva sonrisa me inspiraba, era todo un rockero o metalero, era encantador —. S-soy (T/N).

—Bueno, padre, ya se conocen, si nos permites vamos a...—

—¿Tú eres (T/N)?— preguntó Glam interrumpiendo a su hijo, la felicidad en su rostro cambio por seriedad —¿Tú eres chica que le enseña a mi desesperado hijo?

Escuché el rechinido de dientes de Dee, lo ví por unos segundos y tenía la cabeza baja, sus ojos emanaban tristeza y al mismo tiempo odio.

—¿Y bien?— insistió Glam aún clavado en mí —¿Ya sabes que mi hijo carece de talento?

—Sí, soy yo (T/N)— lo mire retadora, otra vez insistían con la palabra talento —¿Talento? ¿Para qué?— frunció el celo pero no volvería a ser una cobarde —, tal vez Dee no lo tenga pero tiene capacidad para hacerlo, es terco pero sé que aprenderá, él tiene inspiración.

Glam se agachó a mi altura, permanecía serio, creí que me echaría a patadas, pero sólo me dió palmaditas en el hombro.

—Está bien, es aceptable— sonrió como en el principio —, espero que algún día toquemos algo— se retiró a otra habitación.

Dee suspiró, acomodó su cabello y ahí estaba, esa sonrisa, pequeña pero llena de valor, dejo de lado su nueva aburrida, quizá quería expresarme su agradecimiento.

—Gracias por considerar eso de mí, aunque sea terco— sacudió mi cabello, era señal de confianza, avanzabamos más en nuestra amistad —. Vamos a mi habitación, ya tengo todo preparado.

Lo seguí subiendo las escaleras, había olvidado la razón por la que estaba ahí.

Caravana (Dee x Lectora) Where stories live. Discover now