Capitulo 5:

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-Lo único que te queda es quedarte en bragas.

-¡¿Qué?! ¡NO! - Le grite, aun estábamos sentadas alrededor de una mesa al fondo de la cafetería, quedaban 5 minutos para que las clases empiecen y todavía no tenía ninguna solución para mi problema.-Piensen, chicas, enserio. No puedo llegar tarde y no caminare con esta maldita mancha en el culo. ¡ASI QUE PIENSEN CONMIGO!

-Oye, no nos grites, no tenemos la culpa. - Siguió Sam - Creo que la idea de Ty es lo único que te queda. Es pésima, pero si no quieres ir en bragas, es lo único que te queda.

No podía creer en qué situación estaba, tampoco podía creer que Deasie lo hubiese hecho. Cuando me corto el inexistente hilo sobresaliente, me pinto todo el puto trasero de rojo oscuro.

Seguramente mi foto ya está por todas las redes sociales.

-Bueno, Ty, repetirme tu estrategia.

...

Mierda. Estúpida situación de mierda.

El odio por Alex crecía dentro de mí. Nunca había odiado a alguien, pero ahora entiendo cual es el sentimiento.

El plan de Ty era como ella: Loco, raro y nadie sabría quien soy. Esto último era solo si todo salía como lo planeado.

Estaba en los vestidores del gimnasio, ante el traje de la mascota de la academia. No podía creer lo que estaba por hacer.

-¿Segura que va a funcionar? - Le pregunte a Ty

-Sí, seguro. Bueno, eso creo

-¡No me ayudas Ty!

-Relájate, todo va a salir bien. -Dijo con una voz sorprendentemente tranquilizadora. - Ahora rápido, ponte la cabeza.

Me puse la gran cabeza de lobo gris en la cara. Tenía un olor nauseabundo. Olía a una mezcla de lavandina pura, aromatizante pasado de fecha y sudor.

Sudor. Todo el puto cuerpo me sudaba como nunca lo había hecho. No quise compararlo con nada, porque las ideas que se me venían a la mente no eran nada para menores.

-Bueno, mejor me apuro, nos vemos en tu habitación.

Y así vi, por los pequeños agujeros que el lobo tenía como ojos, como Ty se iba corriendo.

Así que me puse en acción y empecé a correr hasta mi habitación.

¡No iba a llegar a la primera clase nunca!

Pero si no llegaba no pasaba nada ¿No? A lo sumo invento una historia. Pero no era momento de arrepentirse, ya había tomado una decisión.

Seguí corriendo, ahora debía pasar por la chancha de baloncesto, así que abrí la puerta preparada para seguir corriendo, pero al llegar a la cancha me encontré en pleno partido. Lo ignore y seguí mi camino, pero cuando me vieron las animadoras, no me dejaron irme y me tomaron por la peluda muñeca.

Guerra de idiotas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora