Capitulo 13:

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Ya hacía dos meses desde la desastrosa fiesta.

Por suerte, no había pasado nada para exagerar.

En estos días, Noah me probo que no era un asesino violador de mujeres, y, en una de las horas de detención, que el había llegado tarde y le dieron solo un día -igual que a mí-, me propuso un ¿cita? ¿Salida?

La proposición fue algo así:

FLASHBACK:

Otra vez estaba en detención, así que hice lo mismo que acostumbraba hacer. Me incline sobre el banco, puse mis dos brazos doblados en modo de almohada, apoye mi cabeza en ellos y me quede allí pensando en la nada.

Pero, en un momento, sentí que algo me pego en la nuca una vez, lo ignore y seguí en lo mío. Dos veces. Tres, cuatro, cinco.

Y lo peor era que no eran golpes suaves, sino que me estaba haciendo un agujero en la nuca.

Me gire brutamente hacia atrás, en búsqueda de quien y que me interrumpía. Y me encontré cinco papeles debajo de mi asiento y a Noah sentado tres asientos atrás mío. El me hizo una seña que interprete como >

Yo le hice caso y, cuando ya los tenía sobre mi pupitre, los abrí.

Decían:

《Tu, yo, cena, yo invito》

《¿Qué dices?》

《¿Puedes?》

《Si no tomas los malditos papeles me levantare y te los leere yo mismo》

《Mira los papeles *inserte el puchero aqui*》

FIN DEL FLASHBACK

Desde ese momento, hemos estado ¿saliendo? Pero no éramos novios ni nos habíamos besado. Aunque sentía que si la cosa seguía así, algo iba a suceder.

En estos días, Ty y Sam, no cambiaron en absoluto. Siguieron locas y raras como eran.

Sam siguió con su modo-bruto para hacer las cosas. Era raro que sea tan linda y no lo aproveche. Pero ella era así, era hermosa y realmente no lo sabia

Y luego Ty, que nos suplico que no hablemos de lo que hizo en la fiesta. Yo no le mostré la foto, pero tenía la prueba perfecta si, algún día, deseaba que se lo recuerde.

Y por ultimo estaba Alex. El maldito y demasiado sensual para ser tan idiota de Alex. Digamos que me hace estar en precaución todos los putos días desde la fiesta, esperando su venganza. Todavía no había dado señal de vida. Pero yo sabía que estaba bien vivo, y planeando un ataque épico.

En cualquier momento iba a atacar, y yo eso lo sabía demasiado bien.

...

En este momento, yo estaba en la puerta de la casa de mis hermanos. Era la primera vez que los visitaba, pero ya sabía que la casa debía ser enorme. Pero también sabía que era regalo de mi padre, y a él, digamos que le sobra el dinero.

Para mis 16 me regalo una limo negra con chofer propio, para los 15 un viaje a Paris, y así sigue, todos los años desde que no estoy con el (desde los 12) me regalo cosas materiales a cambio del amor paterno. Pero yo sabía que me amaba, y que estaba lejos de mí porque no soportaba a mi madre -era entendible- pero igualmente, me gustaría abrazarlo una vez más.

De repente se abrió la puerta, y dos monos gigantes se me tiraron encima.

-¿Chicos? - Ellos me ignoraron y siguieron pegados a mi -¡CHICOS!

Se separaron de golpe y vi como se les dibujaba una sonrisa en el rostro.

-Lo sentimos, Lucy, es que la última vez que te vimos estábamos demasiado en pedo.

Y era cierto.

-Lose, yo también. ¡Los extrañe chicos! - Y ahora yo estaba aferrada a ellos.

Cuando entre a la casa no me sorprendí ni de lo grande que era, ni de la decoración. Todo estaba decorado como dos adolecentes de 17 años querían, solo que ellos no habían movido un dedo, todo estaba hecho por diseñadores de interiores.

Había juegos de distintos tipos: Ping-Pong, metegol, pool. Además tenían una pantalla gigante para los videos-juegos. La casa incluía otras miles de cosas como piscina, una barra con comida constantemente, habitaciones con camas gigantes para ¿dormir?

Pero lo que menos me importaba era las habitaciones y los juegos, lo que más quería de esa casa es que allí vivían mis hermanos. Esos grandulones borrachos que siempre buscan una escusa para hacerme reír, los extrañaba tanto.

-Y Nate ¿Qué paso entre tú y Sam? - Le pregunte entre risas.

-¿En verdad quieres saberlo?

...

Los gemelos me hablaron de su vida con nuestro padre, en Orlando, sobre sus novias, sus ex novias, los ex de sus ex novias.

Pero yo me limitaba a mirarlos, asentir y repetirme que era real, que ellos estaban allí. Que los hermanos que amenazaron a un chico para que me inviten al baile, que le cortaron las trenzas a una niña que insulto mis muñecas en primaria, los hermanos que hicieron tanto por mi estaban allí.

Pero deje mi lado sentimental de lado cuando me toco a mí contar mis aventuras con mama. No dije que es mala madre, porque no lo es, solo dije que no me quiere demasiado.

Luego de toda esa charla, me quede allí a dormir, debía despertarme a las 6am, ya que al otro día era Lunes, y el miedo de que Alex ataque volvería, así que no me distraje con nada y me fui directo a dormir.


Guerra de idiotas.Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon