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Miró por la ventana con la mirada llena de tristeza sin poder creer realmente a dónde se estaría dirigiendo en algunos minutos. La ciudad curiosamente estaba tornada de gris y aquello la deprimía sin remedio.
Caminó hasta el espejo de su habitación y se miró de arriba a abajo. Su cabello rubio totalmente recogido con una coleta alta, llevaba puesto un traje negro y zapatos en conjunto.
Se lo limpió las lágrimas negras porr el maquillaje con la mano sin quitarse la vista de encima. Tres golpes en su puerta la sacaron de su triste trance. Pietro apareció por el marco de la puerta igual de demacrado que ella.
-Stark me pidió que te avisara que el auto nos espera abajo. -Informó abrazándola por detrás, viéndose a ambos en el espejo.
Olivia asintió pero no movió ni un músculo, Pietro se había vuelto su hogar seguro, y de una forma u otra era la única familia que le quedaba. -Vamonos, no puedo llegar tarde.
Salieron de la casa de Sam Wilson con prisa, subiéndose al costoso auto en que Tony había enviado a Happy a buscarlos. El camino fue silencioso, las manos de ambos jóvenes iban juntas.
Una vez la guerra fue finalizada Olivia no salió de su habitación en algunas semanas, permitiéndose llorar las tres pérdidas que había sufrido y afortunadamente nadie la juzgó por ello.
Tony le había ofrecido su hogar en el lago para un funeral digno para los tres, para Natasha, Steve y Alison. Tanto Bellamy como Olivia estaban agradecidos de tener un lugar para velar a sus padres.
Al llegar a la hermosa cabaña de Tony notó que la mayoría de los invitados ya estaba allí, incluída la agente Sharon Cárter, que lloraba junto a Bucky en silencio, quién se veía triste e incómodo.
Olivia bajó del auto con lentitud, realmente no sentía fuerzas para aquello. El primero en recibirla fue justamente el soldado de los 40' que la abrazó fuertemente, dejándola llorar en su hombro. -Lo siento, manche tú camisa.
-No te preocupes niña. -Murmuró acariciando su cabello con ternura. Verla tan destruida y relativamente sola le dolía y le había prometido a Steve protegerla, sabiendo que Steve no lo oía igual lo había hecho.
Caminaron de la mano hasta el final del muelle, las personas más importantes de Steve. A su lado caminaban Clint y Pietro, quienes se despedirían de la agente.
Era una escena realmente triste y Olivia no dejaba de llorar. Lanzó el rosedal de Steve junto a Bucky al lago, seguido del de Natasha y el de Alison. -Juntos papá, hasta el final de la línea. -Susurró con pena.
La ceremonia continuó por el resto de la tarde, todos habían estado presentes, incluso Nick Fury y Carol Danvers, mostrando su total respeto hacía el sacrificio del capitán.