La chica millonaria.

Capítulo 46

La rubia corría para evitar que el castaño recibiera las balas pero no lo logró.

Vio caer a su chico dragón y comenzó a llorar.

—No, Hipo—sollozo poniendo la cabeza del chico en su regazo para intentar despertarlo pero nada funcionaba, el chico no abría los ojos.

Hans la tomo por los hombros y susurró a su oído.

—Esto es tu culpa, el pudo haber vivido pero tú egoísmo lo mató—rio con malicia alejándose de ella.

Todos corrieron al hospital para intentar salvar a Hipo pero cuando llegaron, les dijeron que el chico había muerto.

—Perdon—lloro tomando la mano del cuerpo del castaño—Esto fue mi culpa, perdóname.

El día del funeral fue dos días después.

La rubia estaba devastada.

Sintió un nudo en la garganta horrible al ver el ataúd de su chico dragón.

Ahora estaba muerto y eso había sido su culpa

Astrid

—¡NOOO!—grite asustada sentándome de golpe en la cama.

—Amor—me llamo Hipo preocupado suspire con alivio y lo abracé inmediatamente con lágrimas corriendo por mis mejillas—¿Otra pesadilla?—pregunto en un susurró y yo asenti—¿La misma?—negue.

Por lo general tengo una pesadilla donde revivo todo lo sucedido mientras Hans estaba aquí, todo lo que me hizo y dijo, hacía que despertara muy asustada e Hipo me abrazaba y arrullaba

Por eso le pedía que durmiera conmigo desde que salí del hospital.

Pero está fue distinta.

—Esta vez reviví el momento en que Hans disparó—solloce—Pero no llegaba a tiempo para salvarte, te llevábamos al hospital pero solo nos decían que nos despidieramos y después tu funeral—no pude seguir hablando por qué comencé a llorar más fuerte.

—My lady—suspiro besando mi cabello—Enserio tienes que entender que no fue tu culpa nada de lo que pasó. No es tu culpa mi accidente, no fue tu culpa el de Christian, no es tu culpa nada de lo que pasó Astrid—me dijo limpiando mis lágrimas haciendo que lo viera a los ojos.

—Mi corazón sabe que no es mi culpa pero mi mente repite constantemente las palabras de Hans—acaricie su mejilla—me sentí horrible cuando tu mamá me marco ese día para decirme que estabas en el hospital—solloce—Todos los días Hans me decía que era mi culpa que estuvieras en el hospital.

—No hay manera en la que hubiera sido tu culpa, también sentí culpa por lo que te había pasado, viviste muchas cosas con Hans por protegerme, cuando abrí los ojos...—hizo una pausa tomando mi mano—y vi que habías recibido las balas también me sentí muy mal. Pero después entendí algo, si, nos tuvimos que ver en lo que le pasó al otro, pero no fue nuestra culpa amor—tomo mis mejillas y dejó un pequeño beso en mis labios.

—Te amo—pronuncie con una pequeña sonrisa, Hipo siempre me ayuda cuando tengo pesadillas y me apoya con todo lo que me pasa.

—Yo te amo más Astrid, los dos sabemos que lo de Hans no fue todo y que vienen más cosas pero ahora sabemos que separarnos no sirve de nada, tenemos que estar juntos.

—Gracias por luchar por mi y por luchar por lo nuestro—sonrei levemente abrazándolo.

—Estoy extremadamente enamorado de ti—puso un mechón de cabello detrás de mi oreja—Quiero luchar por ti y por nosotros.