One Shots ~ GaaLee

Rose Secreto

Estaban ahí, solos en su habitación, el momento que tanto había deseado estaba sucediendo. Rock Lee estaba completamente dormido sobre su cama, respirando tranquilo, era tan pacifico verlo su bello rostro dormido y su cabello liso cayendo de un lado mientras la brisa se colaba por la ventana.
Que hermosa vista.
 
Tomó una foto para retratar el momento. Era tan emocionante tener a Lee solo para él. Había perdido la cuenta de las veces que había suspirado por él.
 
Se acercó y se sentó a un costado de la cama, acarició el bello y suave rostro de Lee, acomodo su fleco a un costado para poder darle un beso en la frente. 
 
Al final las pastillas para dormir si resultaron siendo efectivas, pues Lee había caído dormido imposibilitado de defenderse de todo lo que le iba a suceder. 
 
Gaara no entendía que era lo que tenía Lee que lo había vuelto completamente loco, no podía dejar de pensarlo, no quería alejarse de él, se lo imaginaba en situaciones muy extrañas y le molestaba verlo con alguien más o sentirlo muy lejos de él.
 
Rock Lee no despertaría después de un par de horas, así que tenía el tiempo suficiente para hacer lo que quisiera y el pelinegro no se enteraría de nada. 
 
De todas manera ya tenía pensado que hacer. 
 
Luego de un par de fotos más, empezó a besarlo mientras lo desvestía. Era como volver  un sueño realidad. Tan delicado, tan suaves eran sus toques en el cuerpo de Lee, tenía miedo que lastimarlo, de herirlo.
 
Le colocó su chaqueta para impregnarlo de su olor y se alejo de él, tomó asiento en la silla giratoria de su computador y se paseo hasta quedar frente a la cama, tenía la vista perfecta para saciarse de Lee. Pero aún no lo haría. No del todo. 
 
Busco en la mochila de Lee, sus cuadernos eran como cualquier otro. Tenía un par de dulces dentro de un bolsillo, y los lapiceros regados por doquier. Nada interesante de ver. 
 
En su billetera traía un par de billetes, los suficiente para un almuerzo personal, su pase escolar y las llaves de su casa. Tampoco llamaba su atención.

Soltó todo, empezó a girar suavemente de un costado a otro pensativo mientras miraba con atención a Lee. 
 
Se levantó y está vez se acostó sobre la cama, le dio un suave beso en los labios y se acomodo sobre el pecho desnudo del Rock Lee. 

Que increíble se sentía, no quería que eso terminara, quería quedarse por siempre junto a Lee. Los latidos del pelinegro eran tan calmados y su respiración muy pacífica. 
 
Levantó un poco la mirada y su encontró con él bello rostro de Lee. Le dio un beso más y se levantó otra vez. Nuevamente tomó asiento sobre la silla giratoria, pero tomó el teléfono de Lee esta vez. 
 
Empezó revisando los mensajes. Naruto y Neji le mensajeaban mucho y eso lo molesto. De Neji podía esperarlo, pero de Naruto no, el rubio sabía de sus sentimientos por Lee así que de alguna manera se sentía traicionado al saber que Naruto tenía más contacto con él.
 
Eliminó todos los mensajes y bloqueó el número de ambos. Borró mucho de los contactos, le cambio el nombre a muchas personas colocándole calificativos un poco "Agresivos" y dejando solo los que le parecían importantes para Lee. Entre ellos estaba su número, pero solo lo tenía guardado con su nombre. Quedo mirando a Lee preguntándose cuáles eran los sentimientos que Lee sentía por él. 
 
Se entristeció al pensar que Rock Lee no sentía nada especial y se lleno de rabia de pensar que Lee se podría quedar con alguien más. Ellos ya eran muy amigos así que aprovecharía eso para amarrar a como de lugar a Lee, no se alejaría de él nunca y no permitiría que alguien más se acercara mucho a Lee. 
 
Modificó su nombre de contacto y lo guardo. Lee se llevaría una sorpresa cuando se diera cuenta. 
 
Paso a la galería. Habían muchas fotos, cantidad de fotos, muchas de ellas estaban borrosas así que las eliminó. Se quería dar la libertad de eliminar lo que él quisiera. 
 
Habían fotos de los paseos con sus amigos, a Lee le gustaba tomarle foto a todo lo que se moviera. Así que no se sorprendió de encontrar fotos de calles, plazas, autos y animales. También habían fotos de varios compañeros distraídos en el colegio. Eliminó todas esas, Lee no necesitaba tener fotos de alguien más que no fuera él. 
 
Muchas de las fotos en donde solo salía Lee se las envió por mensajes en la web, una vez que llegaban a su celular, borraba toda evidencia de traspaso por Internet. Así Lee no sabia que ahora Gaara tenía fotos privadas de él. 
 
Después de revisar hasta el cansancio el teléfono de Lee y haber jugado con la información que había en el, lo soltó. Volvió a al cama con Lee pero esta vez un poco más animado. Lo beso en los labios, lo tomó del cuello, lo volvió a besar, le mordió levemente de un costado, lo suficiente como para "evidenciar" que tenía a alguien "especial". 
 
Se fue quitando la ropa de a pocos mientras le iba dando suaves besos a Lee. Le abrió ambas piernas y se coloco entre ellas mientras le daba suaves embestidas que lo excitaban cada vez más. Se había puesto tan duro. Lo acarició y jugó con su cuerpo todo lo que él quiso, por un momento pensó seriamente si debía de aprovecharse de Lee, al final nadie iba a saberlo, ni siquiera el mismo Lee. Además, el cuerpo de Lee había empezado a reaccionar a sus caricias.
 
Pero no podía, en verdad quería mucho a Lee, así que no quería hacerle daño. Rock Lee no se lo merecía y por un momento se arrepintió de lo que estaba haciéndole. 
 
Se alejo de Lee completamente excitado. Traía la ropa interior puesta y un bulto sobre saliente de él, se miró y luego regresó a mirar a Lee. Lo haría. Eso no podía evitarlo. 
 
Sin pena se quito el miembro erecto de su ropa interior y empezó a masajearlo lentamente, sin despegar la mirada de Lee, tenerlo cerca completamente desnudo y con las mejillas sonrojadas lo excitaba más que cualquier otra cosa. Poco a poco fue aumentando el ritmo de su mano casi hasta llegar al punto de éxtasis que empezó a recorrer todo su cuerpo.


[...]
 
Abrió los ojos con súbito. Y se sentó de golpe sobre la cama, por un momento se sintió perdido sin recordar donde estaba. Hasta que logró visualizar la cabellera rojiza de su amigo que se hallaba ordenando las hojas que iban saliendo de la impresora.
 
— Gaara — dijo en voz baja
 
El pelirrojo se giró sobre su silla para observar al peli negro sentado sobre la cama. 
 
— Veo que despertaste 
 
— ¿Qué fue lo que pasó?— preguntó totalmente perdido 
 
— Te quedaste dormido 
 
Rock Lee no dijo nada. Su mente estaba tratando de hallarse en el lugar mientras recordaba los últimos acontecimientos. 
 
— ¿Pero cómo? Yo no recuerdo 
 
— Te acostaste sobre la cama y te quedaste dormido al poco tiempo 

Se dio cuenta de la oscuridad atraves de las ventanas de la habitación de Gaara. Lee no podía creerlo, no podía entender cómo había perdido el conocimiento de tal manera.

—¿Cuánto tiempo me quede dormido? 
 
— Unas 4 horas 
 
—¡¿QUÉ?!
 
—Trate de despertarte pero no reaccionabas, asumí que estabas muy cansado y no insistí más 
 
—¡No puede ser! 
 
El sonido de la impresora enviando la última hoja lo hizo sentir culpable, se suponía que se habían reunido porque debían de realizar un trabajo que les habían encargado en la escuela y el solo durmió toda la tarde. 
 
— Gaara ¿Hiciste todo el trabajo? 
 
— Si, lo hice solo 
 
— ¡Oh demonios! Lo lamento mucho — dijo mientras se tomaba de los cabellos, levantándose de la cama — te debo una
 
— No te preocupes, esta todo bien
 
— Prometo que te lo recompensare
 
— No es necesario 
 
— Tengo que irme, mi papá debe de estar muy preocupado — dijo mientras acomodaba su uniforme y tomaba su mochila. Se tocó ambos bolsillos tratando de buscar su celular pero no lo encontró 
 
— Aquí — le dijo Gaara llamando su atención mientras le lanzaba su celular, el cual Lee atrapó en el aire 
 
— Gracias, debo de irme ya, te veré mañana en la escuela 
 
Lee se fue como alma que lleva el diablo y Gaara solo atinó a seguirlo con la mirada atravez de la ventana de su habitación. Viendo cómo poco a poco el peli negro iba alejándose por las calles. 

[...]
 
Su padre lo había recibido en casa muy preocupado preguntándole en donde había estado toda la tarde y porque no respondió ninguna llamada que le hizo al celular. Lee no supo excusarse, no sabía cómo decirle a su padre que se había quedado totalmente dormido en la habitación de un amigo al que se supone debía de ayudar hacer el trabajo de investigación de la escuela. 
 
Entró en su habitación y se dejó caer sobre su cama, no entendía que es lo que le había pasado. Es como si hubiera cerrado un segundo los ojos y al siguiente habían pasado 4 horas de sueño. 
 
Se sentía raro, tenía una sensación muy extraña en el cuerpo. Tal vez se debía a su tan repentina inconsciencia.

Se levantó se dirijo al baño y se mojo la cara con el chorro de agua que escurría entre sus manos.
 
De vista en el espejo se dio cuenta que había una marca entre rojiza y violeta en su cuello —¿Qué es esto? 
 
Inmediatamente un segundo después le llegó un mensaje a su celular. 

"Espero que estés bien, nos vemos mañana en la escuela."

 
Era lo que venía escrito en el mensaje. Lo más extraño de todo era que el numero que lo enviaba era de Gaara, pero tenía escrito el nombre de "Amor" acompañado del icono de un corazón.