Capítulo IX

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— Hyunjin... Despierta. – se agachó y pudo ver una gran herida en su torso por el impacto de la bala, ésta no paraba de sangrar— Hyunjin, por favor... Por favor no me dejes. - decía Heejin entre lágrimas, las demás chicas se acercaron para socorrerla, la sangre no paraba y no podían llamar a un médico porque corrían el riego con Hyunjin al ser sospechosa de crimen de asesinato.

Escucharon la puerta de la oficina detrás suyo abrierse encontrándose con la alta figura de Namjoon.

— Que alboroto... - bufó — ¿Qué sucede aquí? - preguntó al ver el charco de sangre y a las chicas con miradas de preocupación frente suyo. Soltó un suspiro y sacando su teléfono del bolsillo marcó a un número observando atentamente a las chicas.

— ¿Hola? Oficiales N y J, necesito que vengan. Sucedió un accidente aquí y... Requiero su apoyo, que sea rápido. - colgó rápidamente el teléfono.
— P-pero... No podemos decirle nada a los paramédicos, si se enteran... - habló Sooyoung siendo interrumpida.
— No llamé al hospital. - dijo en un tono serio pero preocupado. — Debido a lo que pasó las estarán buscando, ¿acaso creen que ésos tipos se iban a arriesgar a ser los únicos en saber de su ubicación y venir a hacerlo todo por su cuenta? - las chicas lucieron aun más asustadas, no podían hacer mucho y menos ahora que Hyunjin estaba gravemente herida. — Llamé a dos personas de mi equipo especial, ellas las guiarán a un lugar donde tendrán lo necesario para refugiarse y cuidar de la señorita Kim Hyunjin, al menos hasta que éste asunto se tranquilice un poco. – dijo para dirigirse nuevamente a la oficina chasqueando los dedos mientras venía personal de seguridad a llevarse lo cuerpos.

No pasaron más de cinco minutos hasta que una camioneta negra se estacionó afuera, de ella salieron dos chicas; una de cabello rosa y otra castaña, ambas vestían con traje y guantes mientras retiraban una camilla de el vehículo. Entraron al lugar y con rapidez sacaron a Hyunjin colocando una venda que cubría la herida.

— Estará bien. - dijo la chica pelirosa al ver el rostro de preocupación de Heejin la cual agachó la cabeza aun con los ojos llenos de lágrimas.
— La bala no impactó ningún órgano, pero debemos ser rápidas debido a la hemorragia, así que en marcha. - dijo la otra chica levantando la camilla junto con su compañera.
— Eh... Nosotras las seguimos, tenemos auto y no lo podemos dejar aquí. - dijo Sooyoung sacando sus llaves mientras Hyejoo y Jungeun asentían. — Heejin tú ve con Hyunjin.
— De acuerdo, vamos. — las dos chicas de traje seguidas de Heejin se dirigieron a la camioneta dejando con cuidado la camilla, Heejin se sentó atrás observando que la hemorragia de Hyunjin no empeore mientras sostenía la venda para evitar que más sangre salga.
— Heejin... - dijo Hyejoo desde afuera llamando la atención de Heejin. — Cualquier cosa nos avisas ¿sí? - Heejin solo asintió con una triste sonrisa para luego observar a su novia, verla en ése estado le partía el alma.

"Todo estará bien"

-🐱🐰-

En cuestión de minutos llegaron a una grande casa alejada de la ciudad, ambas chicas dejaron con cuidado a Hyunjin en una de las habitaciones y sacando algunas cosas de su maletín se dispusieron a realizar una pequeña operación para extraer la bala de su torso y cerrar la herida.

Heejin y las chicas permanecían esperando ansiosas en la sala, la castaña no paraba de mirar el reloj e ir de un lado para otro, sentía que el tiempo pasaba demasiado lento.
El sonido de un teléfono las interrumpió, Hyejoo contestó.

— ¿Qué pasa Gowonnie? - habló Hyejoo. — Amm... Estamos en la casa de... De... - miró a las chicas quienes se señalaron entre ellas, debía inventar una excusa rápido. — En la casa de Hyunjin. - dijo intentando sonar segura.
— ¿Q-qué? ¿La policia está en nuestra casa? - miró nuevamente a las chicas. — ¿S-segura que es la policía? - su tono de voz sonó preocupado, parece que ya se habían enterado de la muerte de los sicarios de Hansol e iban tras Hyunjin, pero, ¿Por qué la policía encubría todo eso? Tantas preguntas rondaban la cabeza de las chicas en ése momento; sin embargo, ahora su mayor prioridad era la salud de Hyunjin.
— Gowonnie solo... Sé cortés con ellos y que no se queden mucho tiempo ¿sí cariño?. Iremos para allá. - el sonido de la puerta abrirse las hizo levantarse rápidamente del sofá, a excepción de Heejin quien ya se encontraba dando vueltas en el pasillo debido a la preocupación.

I'm so bad! | 2Jin G!PWhere stories live. Discover now