IMAGINA
Cinco ama molestarteEstabas tranquilamente dándole un sorbo a tu café mientras disfrutabas del silencio en la cocina o lo hacías hasta que apareció Cinco seguido de aquel característico sonido de sus portales.
El chico se quedo parado mirándote — wow — murmuró inclinándose hacia ti — quién te robó del museo, encanto — casi te ahogas al escuchar su palabras haciendote sonrojar
— ¿Estás bien, muñeca? — murmuró Cinco con una sonrisa traviesa
— deja de hacer eso, Cinco — pediste sonrojada, el chico te tomó del mentón
— obligame, muñeca —te retó antes de desaparecer