Amor Depredador [Gwuncan]

Un Sábado Loco

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Aquel día especial había llegado; sábado por la mañana. Nuestros personajes habían tenido una buena semana, por lo que hoy el día comenzó excelente.

Gwen se encontraba dentro del baño dándose su último toque de lápiz labial azul mientras Courtney la miraba a lo lejos con una sonrisa, la chica arregló un poco su cabello hasta que de pronto un fuerte motor se hizo sonar fuera del apartamento.

-Creo que tu príncipe azul llegó -dice Courtney.

-¡¿De veras?! ¿Cómo me veo? -responde dándose una vuelta para que su amiga la viera.

-Te ves muy bonita Gwen, ahora, ¡Anda!-

Courtney toma a Gwen de los hombros para llevarla hasta la salida y de un empujón sacarla. La chica pálida toma el ascensor hasta llegar al primer piso, saludó al conserje y salió del edificio encontrándose con un chico de aspecto rebelde sobre una motocicleta.

-Wow, estás muy bella chica rarita-

-Tú también chico rudo -le levanta una ceja.

El punk le hace señas con su cabeza para que se subiera y fueran al centro de la ciudad, se colocaron sus cascos y partieron, había sido un agradable paseo de pocos minutos, Gwen se sujetaba fuerte del abdomen de Duncan, pues nunca había montado una motocicleta y creía que en cualquier momento caería, mientras más se acercaba más sentía el perfume masculino del punk, apoyó su cabeza en su espalda y esperó hasta que llegaran al café.

Narra Gwen

Habíamos llegado a un lugar muy bonito y elegante, le había dicho a Duncan que me sorprendiera con el lugar y al parecer se sobrepasó haciéndolo según mis expectativas, habían mesas por todos lados, pequeños árboles y plantas que le daban una llamativa decoración al ambiente, música, meseros, de todo.

Nos sentamos en la mesa que quedaba al lado de una pileta e hicimos el pedido; Duncan se pidió un smoothie de kiwi y piña y yo un café helado con galletas de vainilla. Al llegar nuestras bebidas ambos nos miramos y sonreímos por la buena imagen que tenían, todo se veía delicioso. Volví a mirarlo pero esta vez de reojo, se veía tan apuesto tomando su smoothie.

¡Mierda! ¡Mierda! Me está mirando.