✖ En sus ojos vi mas que un te quiero, vi a alguien que quería amar de verdad ✖
Lo observaba desde la distancia, haciéndome múltiples preguntas ya que, jamás lo había visto socializar con los estudiantes de la universidad, ni siquiera había esc...
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¡ʜᴀᴘᴀsᴀᴅᴏᴜɴᴀsᴇᴍᴀɴᴀ, sᴏᴏ!
[◆◈◇]
K. YoungSoo
—¿No te parece que es suficiente castigo? —alcé una ceja, Jackson yacía en mi cama, mirando hacia el techo, mientras yo sacaba unas frituras del cajón donde las escondía o Colin se las comería sin mi permiso si las encontraba en los gabinetes de la cocina.
—¿De qué lado estás? —alcé una ceja.
Aunque Jeon se haya disculpado no lo iba a perdonar de la noche a la mañana, ¿Tan desesperada estaba? Claro que no, solo salté de alegría en mi habitación como por diez minutos al recibir su mensaje.
—¡Ha pasado una semana, Soo! —alzó la voz y rodé los ojos, ¿Qué no comprendía?
—¿Y? Muy poco tiempo para mi gusto —le lancé las frituras y todas golpearon contra su pecho, luego cayeron por el hasta la cama.
—Claro que no, yo lo hubiese perdonado y mandado unas cuantas fotos sexys, capaz y...
—¡Jackson, por el amor a Dios! —grité horrorizada, ¿Qué acaso piensa que mandaré fotos desnudas? ¡Había perdido la cabeza!
—Soo, tienes un lindo cuerpo y estoy seguro que, debajo de toda esa ropa se encuentra el cuerpo de una Diosa —quería fallecer ahí mismo, ¿Qué hicieron con mi mejor amigo y quién era esta persona?
—¿Por qué fue que YoonGi no pudo venir? —habló Taehyung junto a un largo suspiro.
Ambos estamos tan sumergidos en nuestra burbuja de discusión absurda que, habíamos olvidado que Taehyung estaba con nosotros, en la misma habitación y en un sillón con mi laptop en su regazo, buscaba algo en internet.
—No pude despertarlo, su madre intentó ayudarme, pero él estaba en un gran transe —explicó Jackson sentándose en la cama y miró al rubio—. Y con respecto a ti, —movió su torso en mi dirección y me señaló— debes tener hasta telarañas ahí abajo, así que quiero que seas un poco más atrevida y quien sabe, quizás Jeon sea el indicado —si antes estaba horrorizada, ya no sabía como me encontraba ahora.
—¡¿Te has vuelto loco?! —me exalté al escuchar sus palabras— ¡No quiero a Jeon para tener sexo con él!
—¡No quisiste tener sexo conmigo! —contraatacó Jackson con una sucia jugada.
