𝗨𝗠𝗕𝗥𝗘𝗟𝗟𝗔─Tom Holland

12─𝗗𝗜𝗗 𝗬𝗢𝗨 𝗥𝗘𝗠𝗘𝗠𝗕𝗘𝗥?

─¡Sunny!

Addyson alza de forma alarmada su cabeza y se dirige tan rápido como puede hasta el lugar de donde viene el grito. Los nervios cosquillean por todo su cuerpo.

─¡Mira lo que conseguí!─Tom está en la antigua cama lila de la chica con una gran caja de cartón en sus manos─, ¿te acuerdas de esta pulsera?

Addyson se para en el marco de la habitación mirando a Tom con ansias y con cierta pizca de enojo en ella. Millones de ideas se le pasaron por la cabeza en esos segundos, claro que la más cercana a una de ellas era la decapitación del chico, pero por sus propias manos.

─¿Estás bien? Te ves un poco pálida─pregunta Tom con mucha tranquilidad.

─¡Tom!─brama Addyson─, ¡Casi me matas de un susto!

─Sunny, necesitas respirar, estás muy tensa─responde Tom.

─Perdón, pero pensé que mis padres habían llegado o algún vecino se acercaba─Addyson se acerca hasta el castaño.

Addyson examina con la mirada la caja entre las manos del chico, era un pequeño joyero de hello kitty.

─Tom, se supone que veníamos a buscar la ropa de invierno─reprocha la rubia.

Tom asiente dejando el joyero de lado.

─Tienes razón─tan rápido como Tom logra concentrarse, se vuelve a dispersar─, ¡Pero es que son tantos recuerdos! Parecen siglos desde la última vez que estuve en este lugar.

Addyson sonríe y mira a su alrededor con cierto brillo en su mirada. Ambos jóvenes están en el antiguo cuarto de la rubia, Addyson le había dicho a Tom que quería sacar algunas cosas antes de irse a Canadá, claro que las cosas con sus padres aún seguían bastante lejos de estar bien luego de esa reunión familiar, así que usó la estrategia de su hermano y apenas sus padres salieron de la ciudad Addyson no dudo en ir a buscar algunas de sus cosas, claro que Tom decidió unirse al plan de último minuto. Y ahora ambos están en la habitación de la chica, buscando las cosas.

Nada ha cambiado desde la última vez que se quedó en ese lugar, las paredes siguen del mismo color lila que había elegido a los 11 años, los póster de Big Time Rush aún siguen detrás de la puerta de su armario, incluso el agujero que Austin había hecho en su época de hockey sigue ahí, siente como si los años se congelaron.

─¡Mira esto Sunny!─Tom se lanzó sonriendo a la cama de la chica con un grupo libro marrón entre sus manos.

Addyson levanta la cabeza y no necesita más de un segundo para reconocer perfectamente lo que tiene Tom entre sus manos. El álbum de recuerdos que ambos hicieron. Addyson se acerca donde Tom detallando aquel libro con la mirada, es un antiguo diario que su tía May les había dado, la dura tapa de cuero tenía algunos rasguños por los años y las hojas ya tenían un color amarillento, pero ante los ojos de ambos todos estos detalles parecen hacer aún más perfecto al diario.